Iñigo Alfonso: “Es una maldición vivir tiempos interesantes”
- La radio colecciona emociones, tanto para los oyentes como para los profesionales. Normalmente, las primeras son mucho más numerosas que las segundas. Pero hoy, en la redacción de Informativos de RNE ha vivido con intensidad una emoción en primer grado con la despedida de Iñigo Alfonso de “Las Mañanas de RNE”. Tras su despedida de los oyentes, en la antena, le esperaban sus compañeros, puestos en pie, y le han dedicado un prolongado aplauso de respeto, admiración y cariño que Alfonso ha recibido a su pesar, pero agradecido. “No me gusta hablar de mí, perdonen ustedes, pero me quería despedir”, ha dicho. Y quien le conozca sabe que es así, discreto, elegante, cercano y sincero. Practica la nobleza de los navarros combinada con la pasión por el periodismo en la radio. Hoy ha sido en RNE un día difícil, pero esperanzador: “el camino es largo, nos volveremos a encontrar, seguro”. Que sea pronto
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| Íñigo Alfonso esta mañana, en el estudio 101 de la Casa de la Radio, minutos antes de despedirse (Fotografía Jorge Merayo, Twitter) |
“Esta luz roja del micrófono, del micrófono abierto es imponente: te desnuda, te muestra como eres, te mete una energía que puede nublarte, creer que eres inmortal, eterno sonido, pero es que no eres nada sin ellos. Desconfíen de quien les diga que en la radio puede solo. Estoy muy emocionado, me siento un privilegiado, he cumplido un sueño, la primera emisión de “España a las 8” fue el 6 de noviembre de 1967, hace casi 60 años, y si uno conoce los profesionales que han pasado por estas ondas, impresiona. Gracias a la radio pública por dejarme ser parte de esta familia"
Y seguía dando las gracias, insistiendo en la palabra, con
la emoción contenida, y concentrándose en el papel, sin levantar mucho la
cabeza hacia el control, para no caer en la emoción del momento, realimentarla,
y perder los papeles, algo que todos los que hemos vivido momentos de cierta
intensidad ante el micro hemos temido y procurado evitar. “Todo esto ha
sucedido -trataba de explicarlo- porque ustedes han sintonizado la
radio. Esto es lo más importante. Siempre me ha impresionado que ustedes nos
hagan un hueco en sus rutinas, en el inicio del día, cuando más caótica es una
casa, con las prisas, el atasco, el bus, cuando pasean por el campo, en la
ciudad, fuera de la ciudad, jóvenes y mayores nos han dado un tesoro frágil y
poderoso: el de la confianza. Gracias por confiar en nosotros. Y les pido que
sigan haciéndolo”, rogaba, generoso con quienes vengan tras él.
En la política de los gestos, de los pequeños y grandes
gestos, no puede entenderse cómo hoy, día de despedidas, RTVE ha decidido
publicar la noticia de que Josep
Cuní se ocupará de “Las Mañanas de RNE” a partir de septiembre.
Alguien podría entenderlo, mínimo, como una descortesía, incluso como una vendetta
por un final indeseado que desde luego Alfonso no se merece, después de su
implicación en su actual destino. Hay que contemplar y respetar unos tiempos
que aquí, una vez más, se han obviado, y que demuestran un desprecio injustificable
y hasta infantil.
“Un programa de radio es un intermediario entre la
realidad compleja, complejísima diría yo, y ustedes. Así que gracias por
permitirnos hacer la radio pública en la que creemos. Nos hemos dejado la piel
para tratar de estar a la altura de esta oportunidad, una radio sin complejos,
abierta, ancha, plural, diversa, abierta al futuro, útil, con nuestros aciertos,
nuestros errores, que tendrá continuidad, seguro. Yo he tenido la suerte, he
tenido la suerte, de hacer radio pública en libertad. Muchas gracias”, se
despedía esta mañana con una redacción en silencio escuchándole.
Y llegaba un rápido balance de acontecimientos informativos que han marcado la etapa de Íñigo Alfonso al frente de “Las Mañanas de RNE”. “En estos seis años hemos contado cómo una pandemia nos arrinconaba, amenazaba lo que más queríamos, en una madrugada estalló una guerra en Europa, y otra en Oriente Próximo, un asalto al Capitolio de los Estados Unidos, no tengo dedos de la mano para contar cuántas noches electorales hemos pasado con ustedes: investiduras, atascos políticos, inflación, los tipos de interés, hemos visto amanecer en Kiev, y en Jerusalén, en Ceuta y en una muy buena parte de este país”, concluía la breve enumeración.
La cadencia avanzaba a buen ritmo, salvo en algunos momentos en los que la emoción la alteraba. Pero se recomponía. “Como decíamos en el capítulo anterior, porque la radio es eso, el capítulo anterior que se une al próximo y nunca se para, como la vida misma, hoy tenemos que decir esto de es una maldición vivir tiempos interesantes. Hoy termina probablemente la tarea más adictiva, apasionante, maravillosa, que he realizado en la radio, en mi querida Radio Nacional de España, seis años después, pero esto no es ‘hasta aquí hemos llegado’, y ‘bajamos el telón’ y ya está, y punto. Hoy no se acaba nada. El lunes Meritxell Planella les seguirá contando cómo vemos que está girando el mundo. Estarán puntuales a las 6 Meritxell y el resto de compañeros que han hecho posible que cada día sean realidad cuatro horas de radio, que esto es casi como un milagro. Créanme, no puede existir un programa como este si no tiene el mejor equipo detrás”, explicaba.
Más despedidas: ‘Gente despierta’ y “El Gallo que no
cesa”
O, dicho de otra manera, Carles Mesa y Chema García
Langa, respectivamente. Siempre me ha parecido un error ningunear a los oyentes suprimiendo un
programa, suprimiendo SU programa. Entiendo que hay que tomar decisiones y
aplicar estrategias y los directivos, en la empresa pública y en la privada,
tienen que tomar decisiones, porque, entre otras cosas, para eso les pagan.
Pero han de saber, y ser conscientes de los ‘huérfanos’ que dejan por el
camino. Mesa y García Langa llevaban años al frente del micrófono rojo como
para contar con su parroquia, la misma que en estos días de despedidas de sus
programas, han expresado su contrariedad en las redes sociales por las ‘inexplicables’
decisiones de los directivos de RNE (esto ha sido de lo más equilibrado que se
ha escrito). Los oyentes se encariñan con sus voces y los dos profesionales
citados formaban parte de la gran familia de la radio pública y de las rutinas
de su audiencia. Volveremos a encontrarnos con ellos, no tengo duda. Pronto.
Pero hay decisiones, a menudo necesarias e incomprendidas, que dejan oyentes
confundidos, en mayor o menor grado.
Y una evidencia, que han vivido en sus carnes todos cuantos han tenido un programa de radio: “Esta luz roja del micrófono, del micrófono abierto es imponente: te desnuda, te muestra como eres, te mete una energía que puede nublarte, creer que eres inmortal, eterno sonido, pero es que no eres nada sin ellos. Desconfíen de quien les diga que en la radio puede solo. Entonces es que no los han conocido. No ha conocido a mi equipo, ni al resto de compañeros de informativos y programas de esta radio. Pero yo sí he tenido la suerte, yo sí. Y muchas gracias”, insistía en el agradecimiento.
En la primera foto no se ve al protagonista pero es que parte de la grandeza de @inigoalfonso se observa en la cantidad de gente que lo apreciamos y admiramos, como profesional y como persona. Los belgas y tu francés ganan, nosotros te vamos a echar mucho de menos Alfouns. 💖 pic.twitter.com/hwrh1AVmqW
— Sandra Urdín (@SandraUrdin) July 19, 2024
"He tenido la suerte de hacer radio pública en libertad". @inigoalfonso, gracias por capitanear las mañanas de este barco tan maltratado por Rtve. Siempre con humildad, generosidad, bondad y respeto a su función informativa pública. Dejas ejemplo y maestría. También 💔 ... https://t.co/hb5208tCgY
— Mayca Aguilera (@MaycaAguilera) July 19, 2024
Un profesional riguroso y elegante. Una de las razones por las que sabes que te tienes que esforzar más. Y, sobre todo, un convencido de la importancia de la necesidad de una radio pública independiente y de calidad.
— José Luis Sastre (@jl_sastre) July 19, 2024
Un abrazo, @inigoalfonso https://t.co/dsCDYYsyy2
Se merece @inigoalfonso los aplausos de sus compañeros y de la audiencia. Va el mío también 👏🏻👏🏻👏🏻. Un profesional riguroso y honesto que ha hecho un trabajo ejemplar. No es fácil ser ecuánime en estos tiempos de polarización mediática
— Jordi Rguez Virgili (@jrvirgili) July 19, 2024
pic.twitter.com/q34UH4QJsH
Iñigo se merece todos los aplausos. Un profesional ejemplar y honesto que ha hecho un trabajo excelente. https://t.co/caf2LYetH9
— Carlos Franganillo (@cfranganillo) July 19, 2024
Ay… un nudo en la garganta, escuchando la despedida de @inigoalfonso. Su sosiego, pluralidad y buen periodismo en @LasMananas_rne eran un bálsamo en estos tiempos de bronca continua. Te echaremos mucho de menos, amigo. Empiezan nuevas aventuras!! 😘😘 https://t.co/PsJTvvEX4U
— Alejandra Herranz (@AlexHerranz) July 19, 2024
Lo de @inigoalfonso y su equipo de @LasMananas_rne es otra liga! Gracias por estos años de radio pública! Hemos notado en cada momento como lo has hecho en libertad y para todos. Y eso, a veces, no es fácil!!!!
— Marc Sala (@_marcsala) July 19, 2024
pic.twitter.com/xqEnuaq7Hp
Día emocionante en @rne
— Rodolfo Irago (@RodolfoIrago) July 19, 2024
Después de seis temporadas se despide @inigoalfonso de @LasMananas_rne
El matinal más informativo y plural de la radio española estos años de tanta trinchera y polarización
Un honor y un placer haber sido parte de la familia… y el lunes @Meritxell_78 pic.twitter.com/zELEwQLk8S
Hoy se nos va el capitán de @LasMananas_rne y sólo tengo palabras bonitas para @inigoalfonso. Amigo… gracias por haberme enseñado tanto, por haber creado el mejor equipo del mundo y por haber hecho el mejor informativo de la radio. 💪🏼📻❤️ ¡Seguiremos defendiendo la pública! pic.twitter.com/hYphElrqG7
— Jorge Merayo González (@MerayoJorge) July 19, 2024
Y el final: “¿Y ahora qué? Pues solo decirles que, claro, estoy muy emocionado, que me siento un privilegiado, que he cumplido un sueño, la primera emisión de “España a las 8” fue el 6 de noviembre de 1967, hace casi 60 años, y si uno conoce los profesionales que han pasado por estas ondas, pues impresiona. En el programa informativo decano de la radio española. Gracias a la radio pública por dejarme ser parte de esta familia”, concluía.
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