Mona León Siminiani: “Hay una línea muy delgada entre tener un estilo propio y quedarse anquilosado”

La productora, guionista, realizadora y locutora imparte un taller sobre ficción sonora en “La Casa Encendida” de Madrid 

“Hay más producto, pero no necesariamente alternativo a lo que ha sido siempre la radio” 

• “Pensar para el oído”, así se llama el taller de audio que Mona León Siminiani propone en esta institución. Una formación centrada en la narrativa del guion de producciones documentales, o del ‘true crime’, el campo en el que mejor se desenvuelve esta realizadora
• Serán tres jornadas de cuatro horas cada una, los días 7, 14 y 21 de marzo, en “La Casa Encendida”, en las que se pondrá el foco en el lenguaje del audio, y en las técnicas específicas que requiere para que el oyente pueda seguir la historia sin perderse, y con el máximo interés
• El taller se detendrá en la construcción de personajes, especialmente en la dirección de actores, asignatura aún muy pendiente en la ficción española, y con un objetivo eminentemente práctico, porque los participantes escribirán sus propios guiones y los interpretarán bajo las indicaciones de Mona León Siminiani

-¿Por qué crees que se ha disparado el interés colectivo en torno al fenómeno pódcast?

-Porque es una novedad dentro de la oferta audiovisual, y porque, al ser accesible mediante el móvil, es muy cómodo. En realidad, y dado que está visto que la tendencia ha sido la del pódcast conversacional, se puede considerar que es una nueva radio a la carta.

Mona León Siminiani (Fotografía MLS)

-¿Cómo definirías este fenómeno?

-Pues como un redescubrimiento de la radio y del audio por parte de las generaciones más jóvenes, que están acostumbradas a elegir productos concretos en el momento que quieran, antes que estar sujetos a los horarios y temáticas que exige una parrilla. El boom pasará y se asentará. De hecho, creo que ya está empezando a hacerlo.

"La mayoría de los pódcasts son gente que habla. Al ser algo tan barato de realizar, hay mucha gente que se apunta a hacerlo, y eso puede que sí esté ampliando el número de voces, o el hecho de poder hablar de ciertas temáticas que tradicionalmente tardan mucho en llegar a los grandes medios. Hay más, sí, pero no sé si necesariamente mejor"

-El pódcast, frente a la radio, ¿está demostrando mayor creatividad, mayor riesgo, mayores aportaciones, más originalidad, cuando la radio lo inventó todo? ¿No es una paradoja?

-No estoy muy segura de que esté siendo más creativo, ni desde luego más original que la radio. El pódcast básico que se escucha ahora mismo es la radio conversacional de toda la vida, pero mucho más barata.

-Entonces, ¿cuál es su principal ventaja, desde el punto de vista de la creación?

-Supuestamente da una mayor libertad, porque no está sujeto en principio a los cánones de una emisora o de un gran medio. Sin embargo, no se ven muchas cosas que ‘excedan’ lo que se ha hecho en radio desde sus comienzos. Yo diría que casi al contrario. Hay que tener en cuenta que nos hallamos en una cultura de mercado ahora mismo, no una cultura ‘cultural’. La libertad que otorga un pódcast debería en principio permitir esa eclosión de nuevas ideas, de nuevos formatos, de experimentación, pero no sé si se está dando.

-¿No?

-Es que la mayoría de los pódcasts, Gorka, son gente que habla. Al ser algo tan barato de realizar, hay mucha gente que se apunta a hacerlo, y eso puede que sí esté ampliando el número de voces, o el hecho de poder hablar de ciertas temáticas que tradicionalmente tardan mucho en llegar a los grandes medios. Hay más, sí, pero no sé si necesariamente mejor o que innoven más.

-¿Dónde hay que buscar la diferencia del pódcast con la radio?

-Creo que la mayor diferencia con la radio convencional, a día de hoy, es el modo de hablar: el pódcast (conversacional, que es el que todo el mundo entiende por pódcast) sí habla más como en la calle, dice tacos y usa modismos que tradicionalmente en la radio están más ‘prohibidos’. En cuanto a lo demás, no encuentro una especial apuesta por la creatividad o la innovación o la experimentación, ni que estas se premien especialmente.

"El pódcast supone un redescubrimiento de la radio y del audio por parte de las generaciones más jóvenes, que están acostumbradas a elegir productos concretos en el momento que quieran, antes que estar sujetos a los horarios y temáticas que exige una parrilla. El boom pasará y se asentará. De hecho, creo que ya está empezando a hacerlo"

-¿Y si nos adentramos en tus dominios, la ficción sonora, Mona?

-En el caso de la ficción sonora, poco habitual, se retoman en realidad los clásicos radioteatros, de toda la vida, pero, excepto raras excepciones, vuelve a ser gente que habla, solo que en un entorno de ficción, gente que cuenta cosas, más que narraciones cinéticas en las que asistimos a lo que ocurre. Ahora mismo, sencillamente encuentro que hay más producto, pero no necesariamente más alternativo a lo que ha sido siempre la radio.

-¿Cuánto se tarda en escribir un buen guion, antes de meterse en un estudio?

-Mucho. Un guion de ficción sonora es, en cuanto a narrativa y esfuerzo en el contar, exactamente igual que un guion de cine o de serie al que se añade además la dificultad de que hay que contar con que aquí no hay apoyo de imagen, por lo que hay que ingeniárselas para que todo se entienda y se siga sin problemas. La construcción de personajes, tramas y emociones es exactamente igual que en audiovisual, hay que construirla igual. Otra cosa es que normalmente no tengamos el tiempo ni los medios para hacerlo y tengamos que hacerlo mucho más rápido. Por supuesto, depende del guion, de la duración de lo que se vaya a hacer y del nivel de exigencia que se tenga.

-¿Y entonces, cuáles son las condiciones que debe reunir quien aspire a dedicarse a escribir guiones de ficción sonora?

-Tienes que saber bastante de narrativa y saber que le vas a echar tiempo. Y pasa igual con el resto de los procesos: la buena interpretación es igual que en cine, requiere de una construcción de personaje, una buena dirección y el conseguir que la voz exprese todo lo que no se ve, lo cual supone trabajar con el cuerpo exactamente igual. En el montaje, lo mismo. Y lo mismo con la musicalización, que no se suele hacer porque es verdaderamente difícil y hay que saber. Todo lleva mucho tiempo y mucho esfuerzo.

Reflexiones de Mona León Siminiani sobre la radio actual y la que viene (Edición Gorka Zumeta)

 -Igual que un escritor no deja de autocorregirse, ¿el podcaster no deja de retocar el audio hasta que llega la edición definitiva: puede convertirse en una obsesión?

-Bueno, yo creo que eso va en personas, como todo. Cuando vas sabiendo más y teniendo más experiencia vas aprendiendo también que no todo puede ser perfecto. Yo personalmente soy muy detallista y exageradamente perfeccionista en todos los pasos del proceso: guion, dirección, montaje, musicalización..., pero no tiene por qué ser así.

Mona León Siminini dirigiendo a las actrices Lolita Flores y Cayetana Guillén Cuervo (Fotografía MLS)

-Conociéndote, Mona, imagino que en tu caso, y de ahí viene tu esfuerzo, que al tiempo es tu sello, el sonido resultante tiene que responder milimétricamente a lo que tienes dentro en tu cabeza. ¿Me equivoco?

-No. Y eso lo extiendo a todo el proceso: desde el guion hasta la última nota de música. Así dirijo y así llevo a cabo todo el proceso, pero también hay ocasiones en que la misma producción cobra vida, y decide cómo quiere sonar, y entonces tú te dejas un poco llevar. Esto es como todo proceso de creación: no es muy de uno, tú eres una especie de instrumento que facilita lo que tiene que salir, que es lo único que importa.

"Un guion de ficción sonora es, en cuanto a narrativa y esfuerzo en el contar, exactamente igual que un guion de cine o de serie al que se añade además la dificultad de que no hay imagen, por lo que hay que ingeniárselas para que todo se entienda y se siga sin problemas. La construcción de personajes, tramas y emociones es exactamente igual que en audiovisual. Otra cosa es que normalmente no tengamos el tiempo ni los medios para hacerlo y tengamos que hacerlo mucho más rápido"

-Yo hablaba de ‘obsesión’ por la perfección.

-La obsesión suele tener más que ver con el ego, con un alarde de ‘mira qué bueno soy’, que a mí personalmente me interesa poco. Yo tengo una relación de bastante sumisión con respecto a lo que tiene que ser, que es eso, lo que tiene que ser. La historia está por encima de todo, especialmente de mí. Mi labor es escuchar en mi cabeza cómo quiere ser contada esta historia, cómo hago para que se llegue a eso que ‘oigo’, cómo hago para llevar al oyente al punto emocional que requiere esta historia. Cuanto más hago más me doy cuenta de que eso que decían ya los griegos, es bastante cierto, al menos para mí: son las musas las que hilan, yo solo soy sus manos, sus oídos y su cabeza en este plano, y mi labor es seguir ese camino.

-¿Un camino en el que te has ido relajando un poco, podría decirse así?

-Te diré, Gorka, que cuanto más mantengo esta actitud -escuchar a las musas-, menos me bloqueo y menos me agobio u obsesiono. Suena un poco esotérico o iluminado, pero no tiene nada de eso, diría que es más bien todo lo contrario: es más un ponerse a disposición, y eso requiere mucho soltar lastre...

-¿Qué perfil debe reunir una persona para encajar en el ecosistema del pódcast?

-¡Ay, si yo lo supiera! No tengo ni idea. Si alguien lo descubre, por favor que me lo diga.

-A lo largo de tu trayectoria profesional, ¿tú también has experimentado una evolución, eres consciente de ella, o surge de manera absolutamente natural?

Sí, claro. Yo empecé con los pódcast cuando nadie sabíamos cómo se llamaba esto. Empecé con ‘Extra Fantástica’, para Radio 3 Extra (RNE), y le llamábamos, fíjate, "píldoras de cosas para internet". Y cuando empecé con “Negra y Criminal” en la SER, era un programa ‘raro’ en el que uno de los objetivos era volver a hacer ficción en radio con actores y demás. Pero el cuerpo pide y el cuerpo aprende. Pide cambios y aprende a implementarlos. A mí, paradójicamente, me ha ido llevando cada vez a un estilo más y más audiovisual, más cinético.

-Pero en “Negra y Criminal” ya partías de lo cinético...

-Cierto, cierto, siempre partí de lo cinético, que a mí me pone mucho, pero esta tendencia ha ido evolucionando y pide otras maneras, otros retos. Me interesa mucho el ‘hasta dónde puede llegar el oído’, conquistar terrenos, aunque no sea algo que interese al medio especialmente. Me interesaba ya desde “Extra Fantástica”, y muchísimo desde que empecé con “Negra y Criminal” y ahora esta pulsión se ha ido desarrollando.

Mona León Siminiani (Fotografía Fundación SGAE)

-Pero es innegable, Mona, que, cuando se habla de ti, y de tu forma de trabajar, hay una imagen de sello personal inconfundible, de marca, si me permites.

-Es que, para mí, Gorka, hay una línea muy delgada entre tener un estilo propio y quedarse anquilosado, que es uno de mis mayores terrores. España es un país poco tendente a la innovación, más bien adoptamos innovaciones cuando ya están muy asentadas. Es difícil salirte de tu casilla. A mí en este sentido me gusta probar, hacer cosas nuevas, jugar con diferentes géneros, despistar... Era lo que ya hacía en “Extra Fantástica”, si lo pienso bien, y ahora ese ímpetu, por así decirlo, ha ido tomando una forma más concreta, y sé mejor cómo hacerlo. Quizás me aplico esa vieja norma de la radio que dice que el programa que no sube, baja, porque quedarse fijo no se queda. Vamos, que soy cinética por dentro porque también lo soy por fuera (lo que tiene ser culo inquieto). Yo soy muy curiosa, y muy preguntona. De partes soy consciente y de otras partes supongo que no, porque en este proceso pasa un poco como en el de creación: hay cosas que dependen de ti, pero hay más que ¡a saber de qué dependen!

 

 -¿Qué es lo que vas a contar en este curso de “La Casa Encendida”?

-Pues un poco todo esto, pero intentando que los alumnos lo experimenten por sí mismos en la medida de lo posible. Como yo estoy en todos los procesos del pódcast, desde el guion hasta el final, iremos viendo y haciendo prácticas sobre cada paso. Me centraré más en los primeros pasos, el guion y la dirección de actores, porque el montaje ya requiere de herramientas menos accesibles en principio para un curso de estas características. Escribirán sus guiones y los grabarán dirigiendo ellos mismos a los actores. Me temo que se van a divertir mucho, y si pueden sacar, aunque solo sea un par de conceptos en claro, habrá sido un éxito total y absoluto.

-Yo, si me permites, me atrevo a adelantar que seguro que sacan más conceptos que esos dos que señalas, tratándose de Mona León Siminiani.

-Muchas gracias, Gorka.

-¡A ti! Feliz curso.

-Amplía aquí la información sobre el talles “Pensar para el oído”, de Mona León Siminiani, en “La Casa Encendida” (Madrid), los días 7, 14 y 21 de marzo próximo.

-Música del pódcast de JeffSpeed68, titulada "Outside In", con licencia Creative Commons.

Relacionado:

-Mona León Siminiani: "La radio es el medio de la imaginación".

-El miedo le sienta bien a la radio: "Negra y Criminal" (SER)

-Gorkast: “Del radioteatro a la ficción sonora”