Avance previa EGM: La ola de la amnistía
La tercera oleada del EGM se publicará el jueves 30 de noviembre
- El clima político, tensionado por la Ley de la Amnistía, como pago a los nacionalistas catalanes por su apoyo a la investidura de Pedro Sánchez, marcará en gran parte el resultado de la radio generalista
- Otros acontecimientos como la violenta respuesta de Israel a los ataques de Hamás, lanzados desde Gaza, también influirán en los resultados
- La radio es España está perdiendo en credibilidad y se mantiene a más de once puntos de distancia del índice de confianza promedio del resto de europeos
- La pelea "Hoy por Hoy" versus "Herrera en COPE" se reactiva con la continuidad de Sánchez al frente del gobierno
- Las mañanas de RNE, a las que Ángel Carmona les ha cambiado la cara (casi) radicalmente, constituirán otro punto de interés en el EGM
Nadie espera que las fichas del tablero de la radio española cambien sustancialmente |
La continuidad de Pedro Sánchez en el gobierno, y la polémica que ha envuelto su forma de llegar a La Moncloa, renueva las posibilidades de "Herrera en COPE” de rascarle oyentes al “Hoy por Hoy” de la SER, gracias, una vez más, a los descontentos de la cadena amarilla (descenso) y a la fiebre conservadora (ascenso) de COPE, representada por Carlos Herrera, frente a Àngels Barceló. Supongo que el mayor morbo del EGM sigue centrado en esta pelea. Recordemos que en la última ola se quedaron a una distancia de 232.000 oyentes a favor de la SER. Y que han estado a 124.000 oyentes (2ª ola, 2022)
Pero pocos han medido el efecto que provoca semejante radicalización de posturas entre las cadenas radiofónicas. Ya en 2022, el Digital News Report España, concluía que “solo un 13% de los internautas españoles confía en la independencia de los medios ante los políticos y poderes económicos”, lo que hacía cinco puntos menos que en 2017. El mismo estudio ha vuelto a insistir en este aspecto este año. En la información que elaboré a partir de este prestigioso estudio realizado por la Universidad de Oxford, y la Universidad de Navarra en la parte propiamente española, titulé: “aumenta peligrosamente el desinterés por la información”. El informe detectó un 37% de españoles que “ni se interesa en las noticias ni se fía habitualmente de ellas”. En este caso, solo el 33% de los españoles se fía habitualmente de las noticias que recibe a través de los medios de comunicación. En la edición de este año del estudio había buenas noticias: la radio mejoraba confianza, en concreto COPE y SER. La primera subió 6 puntos porcentuales, y la segunda, 4,8 puntos. Pero no es suficiente.
En los últimos años la excesiva polarización en España está provocando movimientos muy reseñables. En los últimos cinco años la radio en España ha perdido más de diez puntos de confianza. En el último Eurobarómetro de la Unión Europea (2022), la herramienta para medir el estado de la opinión pública de los ciudadanos europeos, dedicado específicamente a pulsar la confianza en medios, la radio revalidó su posición primigenia, pero, si se matiza el dato, en nuestro país ya hay más ciudadanos que “tienden a desconfiar de ella” (48%), frente a quienes siguen confiando en lo que cuenta (45%). Como último dato de referencia, la media europea de confianza en la radio se sitúa en 56%, once puntos por encima de los españoles.
La adscripción de las cadenas radiofónicas líderes del sector con posiciones políticas concretas es posible que provoque, como mantiene el sabio refranero español, “pan para hoy, pero hambre para mañana”. Me explicaré. Es muy posible que, en el fulgor de la batalla previo a unas elecciones generales como las pasadas, del 23-J, se produjeran picos de audiencia provocados por la demanda de información o, más bien, por la necesidad de autoidentificación ideológica de los oyentes, que tienden a escuchar aquellas emisoras que realimentan su propia línea de pensamiento. No es habitual entre los españoles, a juzgar por los criterios de consumo de radio, seguir el consejo del periodista Javier del Pino, director del programa “A Vivir que son dos días”, en la Cadena SER, cuando afirmó: “Ojalá los oyentes de la SER oyeran más la COPE y al revés” para formarse una opinión más equilibrada y ecuánime.
Lo negativo viene después, y lo certifican los diferentes estudios. Con la mirada -y el oído, en el caso de la radio- fríos, los españoles se dan cuenta de que los medios juegan un papel movilizador, pero también manipulador. Este EGM va a medir de lleno la crisis de la amnistía defendida por el PSOE, como estrategia para lograr llegar a La Moncloa. Las cesiones de Pedro Sánchez sobre todo con los nacionalistas catalanes a cambio de contar con su apoyo parlamentario han levantado una polvareda difícil de apaciguar y las cadenas de radio, una vez más, han tomado posiciones a través de sus periodistas más destacados.
-Continúa
-El post completo se publicará este sábado 25 de noviembre