‘Estirando el chicle’, ‘Malasmadres’ y ‘Gabinete de curiosidades’: la fuerza de ellas en el ‘podcast’ español
- "Yo, que también vengo de la publicidad, quería huir de la dictadura de la imagen. No soportaba hacer un vídeo sobre un tema que me había currado mucho y que los comentarios fueran sobre dónde había comprado el cojín que salía al fondo" (Nuria Pérez)
De izquierda a derecha: Carolina Iglesias, Victoria Martín, Nuria Pérez y Laura Baena, en una terraza de los estudios de Podium Podcast, en la Cadena SER (Fotografía ElPaís.com, Andrea Comas) |
"Otros espacios liderados por hombres deberían reflexionar sobre por qué sus seguidores escriben comentarios insultando a sus invitadas. A nosotras no nos pasa. En nuestras plataformas no se llama a nadie gorda, fea o puta" (Victoria Martín, "Estirando el chicle")-Todas proceden de disciplinas distintas. ¿Cómo llegaron al podcast?
Laura Baena ("Malasmadres"). Empezó
en la pandemia, que me pilló con una niña de 15 días en brazos. Necesitaba una
ventana de oxígeno. Para mí ha sido una manera de charlar con amigos. Ahora
también hago un confesionario de 'Malasmadres', donde me envían mensajes por
WhastApp, que es como comenzó el club hace años.
Carolina Iglesias ("Estirando el chicle"). Nosotras
terminamos de hacer una serie para internet, Válidas,
en pleno confinamiento. Nos dimos cuenta de que necesitábamos buscar una forma
de seguir haciendo algo juntas.
Victoria Martín ("Estirando el chicle"). Yo
tenía mis dudas de hacer un podcast. Al final, se ha
convertido en un espacio de charla entre mujeres sin línea editorial. Es un
lugar seguro en el que hacer comedia que no está dirigida a contentar a los
hombres. Y si ellos se ríen, pues genial.
Nuria Pérez ("Gabinete de curiosidades"). Yo, que también vengo de la publicidad, quería huir de la dictadura de la imagen. No soportaba hacer un vídeo sobre un tema que me había currado mucho y que los comentarios fueran sobre dónde había comprado el cojín que salía al fondo.
-¿Sienten que en un medio relativamente nuevo como
el podcast es más sencillo romper techos de cristal?
V. M. No, no y no.
C. I. "Estirando el chicle" ha llegado
a ser el podcast más escuchado de España ¿Y qué ha cambiado?
V. M. Al final, nuestro público es un 85% o 90%
de mujeres y parece que eso no vale.
L. B. Aunque eso para mí también es superar un
techo de cristal. Lo es desde el momento en que he tardado dos años en lanzarme
al podcast porque me creía por completo el síndrome de la
impostora, siendo generalmente una tía muy segura. Es que por ejemplo todos
los late night y casi todos los matinales de radio están
liderados por tíos.
Las cuatro podcasters en los estudios de Podium Podcast y la SER (Fotografía ElPaís.com, Andrea Comas) |
N. P. "Gabinete de curiosidades" nació
con esa misión: reflexionar sobre temas que están pasando de largo o a los que
se les está dando un enfoque que no es el adecuado. El feminismo está muy
presente.
L. B. Siempre digo lo que pienso, pero la
libertad del micro del podcast es inigualable. El otro día
participé en una mesa de debate sobre conciliación y todas éramos mujeres. ¡Si
nosotras ya nos lo sabemos! Si no nos escuchan ellos, ¿cómo vamos a avanzar?
V. M. Nosotras coincidimos a veces con
algún late night en el tema de invitadas. Los comentarios que
se realizan a esas personas dentro de nuestra plataforma son totalmente
diferentes. ¿Cómo puede ser que a ellos les parezca bien tener a ese ejército
de incels [célibes involuntarios] atacando a mujeres cada vez
que aparecen en su programa? A lo mejor deberían reflexionar sobre por qué
ocurre eso. A nosotras no nos pasa. En nuestras plataformas, aunque hacemos
comedia algo escatológica, no se llama a nadie gorda, fea o puta.
C. I. Al final, recoges lo que tú proyectas.