Álex Fidalgo: "No soy el mismo hoy que cuando empecé"

El periodista acaba de fichar por la plataforma danesa Podimo, tras su paso por Podium Podcast

"'Lo que tú digas' no va a ser de pago"

Se cumplen cuatro años desde la puesta en marcha del podcast conversacional, que ha reunido ya 180 entregas

Siempre es un placer charlar con este tipo al que le encanta charlar. De hecho, vive de ello, ¡por fin! Porque la aventura para llegar hasta esta nueva situación le ha costado, literalmente, sudor y lágrimas, y hasta preguntarse, varias veces, si el camino merecía la pena, porque en los principios estaba lleno de espinas. Va camino de celebrar las doscientas entregas (conversaciones) del podcast "Lo que tú digas" y lo sigue viviendo con tanta pasión como el primero. Hace tiempo que le admiro, le sigo y le escucho. Y como nos hemos enterado de que acaba de fichar por la escudería de la plataforma danesa Podimo, y algunas voces se han echado las manos a la cabeza pensando que el cambio implicaría la obligatoriedad de estar suscrito (pagar en definitiva) para escucharlo, nos ha parecido que aclarar la nueva situación era una excusa perfecta para hacer balance con él de estos cuatro años de vida de su podcast, que es, no hay duda, el resultado de un empeño personal. Álex Fidalgo, lo certifico, es un gran tipo.

Álex Fidalgo ha cumplido cuatro años al frente de su podcast "Lo que tú digas" (Reportaje Fotográfico Óscar Lafox, para Podimo)

-¿Estás en un buen momento, Álex? ¿Qué balance haces de estos cuatro años de “Lo que tú digas”?

-Súper positivo, Gorka. ¿Qué te voy a decir yo? Estoy muy orgulloso del camino recorrido. Ahora que puedo verlo todo desde una perspectiva distinta, más confortable, he tenido margen para admirar y querer un poco al Álex Fidalgo –perdón por la tercera persona– que en los primeros años de "Lo que tú digas" trabajaba toda la semana en cosas que aborrecía para poder pagarse el equipo del podcast, los autobuses, trenes y aviones, y los hostales o las pensiones en las que pasaba la noche para poder charlar con mis protagonistas.

"Durante tres años perdí vida por el podcast, pero en los dos últimos años parece estar devolviéndomela. Estamos saldando deudas"

-Fueron comienzos muy duros, sí.

-Durísimos. No te voy a mentir: disfruté de cada diálogo, pero no disfruté del camino, que además recorrí con la duda permanente de "¿Esto que estoy haciendo realmente sirve para algo?".

-Está claro que mereció la pena, ahora te das cuenta…

-De aquellos polvos vienen estos lodos y ahora, claro, me emociono al mirar atrás. ¡Claro que servía! Y fue la audiencia la que, consciente o inconscientemente, estaba animándome para seguir pedaleando, como esa gente que está en las cunetas viendo las vueltas ciclistas. Me llevaron en volandas. Eso es lo mejor de todo, aunque suene tópico: la audiencia. La gente.

-La gente es increíble, y no es una exageración.

-Hace un tiempo me entrevistó Sergio F. Nuñez para su podcast ‘Náufragos’, y yo le hablaba de un término anglosajón al que le tengo mucho aprecio y que creo que viene a cuento: underdogs. Los que lo tienen todo en contra, pero encuentran la manera de salir adelante y avanzar, incluso adelantando a los que lo han tenido todo a favor.

"El nombre "técnico" de la nueva modalidad de Podimo es freemium, esto es que los nuevos episodios de LQTD van a estar disponibles de forma completamente gratuita, pero única y exclusivamente podrán encontrarlos en la app. de Podimo"

-La resiliencia, de la que ahora tanto se habla. ¿Cuántas entregas llevas acumuladas de “Lo que tú digas”?

-Pues 180 episodios publicados en el momento de responder a tu pregunta, Gorka, pero 183 grabados.

-Eso sí que es un ‘fondo de armario’, como tú te referiste a él en la presentación de tu libro.

-No es sólo un fondo de armario generoso, sino que además es de verdadero lujo. Alta costura. He aprendido infinitamente más que en mis años de universidad.

-Me decía en una ocasión Guillermo Fesser que tienes que ser muy zoquete si, con toda la gente que pasa por la radio, no aprovechas algo de cada uno. “Lo que tú digas”, ¿qué te ha aportado?

-Mucho, Gorka. Yo no soy el mismo hoy que cuando empecé. Te voy a poner un ejemplo muy gráfico y espero que la gente me entienda: yo empecé el podcast en un momento en el que, si entraba en la redacción de un periódico, una radio o una televisión, entraba nervioso, inseguro, con la cabeza gacha y hablaba titubeando. Literalmente. Me sentía tan, tan pequeño... Estaba muy mal. A día de hoy, puedo entrar con la cabeza alta y hablar con la gente como una persona normal, como uno más. Es como si hubiese alcanzado cierta tranquilidad y estuviese a gusto en mi piel (profesionalmente hablando).

-¿Te ha proporcionado seguridad en ti mismo?

-Totalmente, aunque, como bien sabes, sigo dudando de mí y creyendo que nada de lo que hago está todo lo bien que podría estar. Eso no va a cambiar.

Álex Fidalgo está lleno de energía para ofrecer lo mejor de sí mismo en "Lo que tú digas"

-¡Ay de aquel que no dude, ya empezó Sócrates! Y qué es lo que te mueve a buscar el personaje: tu interés en él, la oportunidad, la comercialidad y el atractivo que puede ejercer entre tu audiencia…

-Pues no siempre me mueve lo mismo, de ahí que el abanico de invitados sea tan amplio y ecléctico. En ocasiones es un reportaje que me ha llamado la atención, en otras un documental, una historia o una entrevista que leo o veo en otros medios. Y últimamente también a la hora de elegir protagonistas tiene mucho que ver el criterio de mi productora, Cristina García.

"'Lo que tú digas' es un programa de gente interesante. Es un espacio en el que son bienvenidos todos aquellos que tengan algo que contar, algo que aportar. Hay filósofos, científicos, psiquiatras, criminólogos, psicólogos, artistas... hasta narcotraficantes o una camionera"

-¡Ahora tienes productora!

-Sí, sí, y me propone nombres casi a diario. Le debo tanto... De verdad que el momento de buena salud actual que vive el podcast es mérito suyo.

-A nadie se le escapó que un grande como Juan Carlos Ortega reconozca en “El Periódico” que eres “probablemente el mejor entrevistador que tenemos en España”. Ya sé que, por tu forma de ser, la frase te dará un poco de vértigo, pero ¿cuál crees que es la imagen que proyectas para que Ortega diga eso?

-Bueno, teniendo en cuenta que Ortega y yo a día de hoy somos amigos pero no lo éramos todavía cuando escribió aquello (pero sí lo había tenido en mi programa), yo imagino que en nuestra charla percibió mucha ilusión, honestidad y curiosidad. Habló con alguien que le entrevistaba sólo y únicamente para conocerle, sin más. ¡Como en una primera cita! No había hoja de ruta. Aquella charla que tuvimos fue muy, muy bonita. Yo le admiraba mucho y recuerdo perfectamente la grabación con él, que la hicimos a través de Skype. Hubo una química instantánea y fue la primera charla más puramente loquetudiguera, en el sentido de dejarnos llevar, disfrutar y hablar de todo y nada a la vez.

-¿Cada vez tienes menos personajes inalcanzables? Buenafuente creo que es uno de los últimos que has sumado a tu fondo de armario…

-Sí es cierto que he ido tachando muchos nombres de aquella lista tan ambiciosa que me hice cuando toda esta locura empezó: Buenafuente, Rodrigo Cortés, el doctor Cavadas, Íker Jiménez, Carlos Alsina... Es que de verdad que te estoy enumerando ahora mismo a estas personas y me parece increíble que realmente haya pasado, que haya estado sentado charlando con ellos de tú a tú. ¡¡Y acabo de grabar con un ministro y astronauta, por el amor de Dios!!

-Pues ‘nadie’ sabría de qué ministro se trata… ¿Ministro y astronauta? ¡No caigo…!

-Afortunadamente, queda mucho por hacer, muchas puertas a las que llamar, muchas historias que contar. Eso sí, ¡Espero que no haya muchos "inalcanzables"! Que me lo pongan difícil, vale. Pero no mucho, por favor...

Álex Fidalgo continúa atrayendo con sus entrevistas a miles de oyentes

-Podría llegar un momento de la vida en la que el fondo del armario se convirtiera, directamente, en una tentación que hay que llenar por llenar, o una pared en la que hay que seguir colgando retratos… ¿Ves el final de “Lo que tú Digas” en algún momento o todavía sientes con todas tus fuerzas que merece la pena seguir conociendo a gente interesante para charlar con ella?

-Sinceramente, no lo veo. No lo veo, entre otras cosas porque, aunque ahora en las últimas semanas da la sensación de ser un podcast de famosos o estrellas mediáticas, no lo es. No nació con esa intención. Es un programa de gente interesante. Es un espacio en el que son bienvenidos todos aquellos que tengan algo que contar, algo que aportar. Hay filósofos, científicos, psiquiatras, criminólogos, psicólogos, artistas... hasta narcotraficantes o una camionera.

"A la hora de elegir personajes, no siempre me mueve lo mismo, de ahí que el abanico de invitados sea tan amplio y ecléctico. En ocasiones es un reportaje que me ha llamado la atención, en otras un documental, una historia o una entrevista que leo o veo en otros medios"

-Por eso, tiene que haber de todo, como en botica… Ese es su atractivo.

-Si aparece un personaje popular, no aparece por su fama, sino por lo que yo parezco intuir tras la fachada del éxito. Y seguirá habiendo ballenas blancas, claro. Y más últimamente, en un momento en el que muchas grandes estrellas parecen surgir de un día para otro gracias a (o por culpa de) esa lanzadera que son las redes sociales.

-¿Has conseguido vivir del podcast?

-Afortunadamente, sí.

-Te ha costado, pero lo has conseguido.

-Durante tres años perdí vida por el podcast, pero en los dos últimos años parece estar devolviéndomela. Estamos saldando deudas.

-Vamos con las novedades… a finales de 2019 fichaste con Podium Podcast… Ahora nos has sorprendido fichando por Podimo, y la gente -muchos de tus seguidores- están algo confusos porque creen que te vas a hacer ‘de pago’… ¡Y no es verdad, no? Convendría aclararlo…

-¡Cuánto te agradezco la pregunta! No. “Lo que tú digas” no va a ser de pago.

-Magnífica noticia para tus seguidores, Álex.

-El nombre "técnico" de la modalidad es freemium, esto es que los nuevos episodios de LQTD van a estar disponibles de forma completamente gratuita, pero única y exclusivamente podrán encontrarlos en la app. de Podimo.

"He ido tachando muchos nombres de aquella lista tan ambiciosa que me hice cuando toda esta locura empezó: Buenafuente, Rodrigo Cortés, el doctor Cavadas, Íker Jiménez, Carlos Alsina... me parece increíble que haya estado sentado charlando con ellos de tú a tú. ¡¡Y acabo de grabar con un ministro y astronauta, por el amor de Dios!!"

-¿Qué has firmado con Podimo: solo una temporada, de momento?

-Sí. Y ojalá sea la mejor temporada de todas hasta la fecha, pero que la que venga después sea aún mejor. Y así eternamente. Espero que nuestra unión se prolongue en el tiempo, porque yo creo que eso significará que a ambos nos ha ido bien.

-Está claro que Podimo ha apostado por ti.

-Pero yo también he apostado por ellos, Gorka.

-Quid pro quo… claro. Me gustaría preguntarte algo sobre las condiciones con las que te vinculas a una plataforma. Los primeros que lo habéis hecho estáis abriendo camino en este sentido a los que vendrán detrás… ¿Cómo está la situación, qué es lo que ves en el mercado? ¿Tus derechos quedan salvaguardados en todos los casos?

-Mi vinculación es la misma que con Podium Podcast. “Lo que tú digas” es mío, es mi programa. Pero los episodios que hago para ellos, son suyos. Los han comprado. Cuando hablo con la gente, les hago una analogía que no sé si será muy correcta o se entenderá bien (pero es que me encantan las analogías): yo soy un pintor. Tú puedes comprar mis cuadros y tenerlos en tu casa, pero siempre los habré pintado yo. Tú eres el dueño y yo el autor. Pues esto es algo así, creo...

-Terminamos, ¿sigues echando de menos la radio?

-Siempre. Dice Snoop Dogg en una canción algo así como que tú te puedes ir de tu barrio pero tu barrio nunca se va a ir de ti. A mí me pasa eso con la radio. Yo me crié en la radio. Y si tengo la oportunidad de volver, volveré, siempre que sea algo que pueda compaginar con "Lo que tú digas"