EGM 3ª ola: la pandemia se ceba con la radio
- La industria de la radio prefiere mirarse el ombligo que afrontar los problemas derivados de un medio maduro y en regresión
La carrera trimestral de las radios (Fotografía Pixabay) |
OLEADA EGM |
1ª ola 2019 |
2ª ola 2019 |
3ª ola 2019 |
1ª ola 2020 |
3ª ola 2020 |
Absolutos LV |
24.126.000 |
23.931.000 |
23.848.000 |
23.823.000 |
23.142.000 |
Dif. |
|
-195.000 |
-83.000 |
-25.000 |
-681.000 |
Pensaba que esta ola, tras la
imposibilidad de realizarse la segunda encuesta anual de la Asociación para
la Investigación de Medios de Comunicación (AIMC) por el confinamiento, iba
a ser ‘extraordinaria’. Así lo avancé en mi post previo a la publicación del
EGM, y ciertamente lo ha sido, pero en negativo. Sinceramente, me cuesta
creerlo, y confío en que en la próxima ola, correspondiente ya a 2021, se reajusten
unas cifras que me parecen ilógicas, por la secuencia tan demoledora que
dibuja.
La tendencia a la baja, acentuada en esta ola en 681.000 oyentes menos, debería hacer saltar las alarmas de todas las marcas, con independencia de sus propios intereses particulares. La industria percibe los datos adversos del consumo de radio y debería reaccionar, antes de que sea demasiado tarde
La primera gran conclusión que
puede extraerse de estos datos es que la radio no solo no ha sido capaz de
atraer nuevos oyentes en una de las épocas de mayor intensidad (y necesidad)
informativa, sino que, muy al contrario, lo único que ha conseguido es alejar a
681.000 personas que han dicho adiós a la escucha de radio diaria, de lunes a
viernes. No me podía creer los datos. Pero son los que son. De nuevo, por
enésima vez, la situación ha conseguido adelgazar considerablemente la
audiencia de las radiofórmulas musicales (no estaba el cuerpo para fiestas…) y
engordar la radio hablada, con especial incidencia en la Cadena SER, que ha demostrado, al menos
desde el punto de vista del apoyo de los oyentes, que ha hecho un buen trabajo,
con sus 4.353.000 oyentes, 240.000 oyentes más que en la primera ola de 2020.
No es de extrañar su satisfacción, que no pretendo ensombrecer. Tampoco el
crecimiento, más modesto, de Cope, que se ha
situado en 3.240.000 oyentes, 20.000 más. Un oyente es un regalo. Veinte mil
más un tesoro. Pero sin duda no era suficiente. Esperaban más en la cadena azul, porque han jugado fuerte.
Basta darse una vuelta por las
webs de cada una de las grandes cadenas para percibir que todas tienen
motivos para alegrarse, pese a que Onda Cero
ha perdido posiciones, aunque de poca monta, siete mil oyentes menos (esto es
prácticamente quedarse igual) y RNE, en
este caso las cifras son más elocuentes, se ha dejado en unos pocos meses, con una
pandemia de por medio, 189.000 oyentes, que le han dado la espalda. En el lado
contrario, hay que citar a EsRadio, la cadena de Federico Jiménez Losantos,
que ha logrado en esta ola su récord histórico: 628.000 oyentes, 63.000 nuevos
apoyos respecto de la primera ola de este año. EsRadio ha rentabilizado su estrategia de oposición al Gobierno.
Como digo, el batacazo de las
musicales ha sido histórico, y el vuelco a la radio hablada, muy significativo.
Estoy convencido de que las razones no hay que buscarlas solo en la
información, e incluso en la polarización ideológica que estamos viviendo, que
han rentabilizado más unos que otros, sino también en la necesidad de compañía,
como
defendía mi buen colega Carlos Moreno, “El Pulpo”, en el debate
organizado en torno al futuro de la radio por #Periodismo2030, la pasada
semana. Han sido meses de mucho desasosiego e incertidumbres, mucho dolor en
algunas familias que han perdido a sus seres queridos, y miedo, mucho miedo en otros
casos, especialmente en la población más envejecida y con cuadros sanitarios más complicados. No olvidemos los fallecimientos que se han producido, en la mayor
parte de los casos, estadísticamente, la mayoría eran oyentes de radio, no
podemos olvidarlo. Formaban parte, también, de la familia de la radio.
Las matemáticas han sido muy
duras con la radio en esta última ola del año, en realidad la segunda. No ha
crecido tanto, como puede parecer al principio, la radio hablada en su
conjunto. Ha pasado de 12.123.000 oyentes a 12.139.000, tan solo 16.000 oyentes
más. Prácticamente, por tanto, nos movemos en torno a los mismos parámetros de
principios de año, y esto ¡con la que ha caído! Miremos ahora hacia la radio
temática. En la primera ola del año registró 13.268.000 oyentes, y ha cerrado
el año con 12.165.000, 1.103.000 oyentes menos, una hecatombe provocada sin
duda por la situación de excepcionalidad derivada de la pandemia, que ha hecho
que los oyentes opten más por información, entretenimiento y compañía, frente a
solo música, que por cierto es fácil de encontrar también en otros canales, bajo demanda.
Revalidar el liderazgo con la rotundidad con que lo ha conseguido en esta ola la Cadena SER -y en menor medida la Cope- es un magnífico cartel de fin de año, para compensar las cuantiosas pérdidas sufridas por culpa de la pandemia en los primeros meses del año
La radio es reflejo de la sociedad,
a la que sirve. Si miramos las cifras de consumo de radio por Comunidades Autónomas,
llaman la atención algunos números. La única región en la que la Cope supera en oyentes a la SER es Murcia (135.000/104.000), seguidas
de Andalucía (SER, 739.000; Cope, 696.000) y Madrid (SER, 763.000; Cope,
612.000), donde las cifras están muy próximas. Y los lugares donde hay más distancias
son Cataluña (SER, 421.000; Cope, 194.000; RAC1, 866.000; Catalunya Radio,
641.000), y País Vasco (SER, 295.000; Cope, 53.000; Radio Euskadi, 172.000). Seguro
que un estudio detenido de estas cifras podrá sacar paralelismos con los
resultados electorales de estos mismos territorios, a simple vista es
relativamente fácil verlo. De ahí la importancia de las estrategias políticas
en alianza con las cadenas radiofónicas. Es un tema para profundizar más
adelante.
De los grandes comunicadores, ¿quiénes
han subido más en cotización, y quiénes han bajado? En el prime time matinal,
está claro que Àngels Barceló experimenta un crecimiento al alza en el “Hoy
por Hoy”, lo que consolida la apuesta de la Cadena SER por ella al frente de sus
mañanas. La periodista catalana se ha situado en los 2.980.000 oyentes, rozando
los tres millones que la radio de Prisa no ve desde 2017 (2ª ola), lo que
supone un incremento de casi 150.000 oyentes (148.000). En Gran Vía 32 hoy
están de fiesta, a pesar del marco de cifras absolutas de la radio hacia el que
nadie parece mirar cuando de lo que se trata es de sacar pecho por marcas.
Carlos Herrera yo lo había
vaticinado en su programa, incluso fue más lejos de lo que debía. Adelantó que,
tradicionalmente, la tercera ola del EGM para Cope
es negativa, porque siempre les resta oyentes. Y fue más allá al afirmar que “cuando
te acercas a la SER, siempre salen en socorro, son los ‘Tezanos’”, aunque
admitió “me puedo equivocar, eh, me puedo equivocar, ya veremos”. ¿Qué
resultado ha obtenido “Herrera en Cope”? Discreto respecto de la primera
ola del año. Ha perdido, efectivamente, como vaticinaba, 11.000 oyentes, que es
como quedarse igual. Sin embargo, al crecer tanto su competidor de la SER, las distancias han aumentado, y ahora
están bastante más lejos de esos 148.000 oyentes de distancia que disparó las
alarmas en la primera ola de 2019. La batalla continúa.
La SER ha sido la mejor parada en esta 3ª ola de 2020, en realidad la segunda del año (Fotografía CadenaSER.com) |
¿Qué ha ocurrido con Carlos
Alsina? Si bien Onda Cero, que estaba
celebrando eufórica estos días su trigésimo aniversario, ha perdido posiciones, el
conductor del “Más de Uno” puede enarbolar la bandera del ascenso, porque
ha logrado atraer a 40.000 nuevos oyentes, lo que no está nada mal, teniendo en
cuenta el ligero retroceso de la cadena verde. Alsina reúne a 1.235.000 oyentes
cada día. Pero, insisto, no es solo el número de oyentes, sino la influencia
que es capaz de ejercer, y Alsina está subiendo enteros por su esfuerzo, conocimiento,
acierto y dedicación.
El EGM certifica el batacazo de la radio musical, que ha perdido más de un millón de oyentes en esta ola, en la que la audiencia ha preferido estar informada y acompañada
Por último, entre los
contendientes, nos quedan las mañanas de la radio pública, que ocupan Íñigo
Alfonso (de 6:00 a 10:00 horas) y Pepa Fernández (10:00-13:00). Sería
imposible, con una pérdida de casi doscientos mil oyentes, que ellos estuvieran
en números positivos. De hecho, sus pérdidas -188.000 oyentes- coinciden con
las pérdidas de la cadena en números absolutos. Pasan de 997.000 oyentes a
809.000. No es un buen resultado. Y eso que las pérdidas podían haberse
incrementado de continuar la tendencia a la baja por las tardes, pero los buenos
resultados de la nueva apuesta vespertina “Tarde lo que tarde”, con Julia
Varela, han compensado las pérdidas. Pregunta: ¿la estrategia de RNE de apostar por el servicio público, y el deseo de trabajar desde la objetividad, sin estridencias, puede jugar en su contra en un país muy polarizado que busca realimentar sus propias ideas en la tensión? Interesante debate, que dejo tan solo apuntado.
En esta ola del EGM a la Cadena SER le va a tocar pagar más el
estudio de AIMC, también a Cope, y por contra
a quienes pierden audiencia la factura se le hace algo más llevadera. Pero está
claro que compensa. Revalidar el liderazgo con la rotundidad con que lo ha
conseguido en esta ola la cadena amarilla es un magnífico cartel de fin de año,
para compensar las cuantiosas pérdidas sufridas por culpa de la pandemia en los
primeros meses del año.
Carlos Herrera había vaticinado que en esta ola le tocaba perder oyentes, y además: “cuando te acercas a la SER, siempre salen en socorro, son los ‘Tezanos’”
Tenemos un conflicto abierto en
los plazos. La radio en España vive un buen momento, con 23 millones diarios de
lunes a viernes, lo que supone un 54,6 de penetración. Pero la tendencia a la
baja, acentuada en esta ola en 681.000 oyentes menos, debería hacer saltar las
alarmas de todas las marcas, con independencia de sus propios intereses
particulares. La industria percibe los datos adversos del consumo de radio y
debería reaccionar, antes de que sea demasiado tarde. No podemos quedarnos en
la superficialidad de las campañas de autobombo a las que nos tienen
acostumbrados las grandes cadenas nacionales.
Hay que avanzar, apostar,
arriesgar, tal vez equivocarse, resurgir y volver a intentarlo. Javier González
Ferrari, profesional de probada y dilatada solvencia, dibujó la pasada
semana en el debate organizado por #Periodismo2030 el verdadero reto de la radio en España: “Yo creo -dijo- que
el reto de la radio es pensar en nuevos formatos, porque llevamos con los
mismos 25 ó 30 años”. Y Ferrari, con la radio en su ADN, sabe lo que
se dice. De momento, la radio permanece inmóvil, mientras el pódcast es quien
más está aportando en materia de nuevos formatos y contenidos. No es extraño que,
mientras uno de los dos vive el retroceso ola tras ola en el EGM, el otro
experimenta un crecimiento exponencial que hasta la propia encuesta de la AIMC
esté ya certificando con cifras muy significativas. Pronto hablaremos de ellas.
Relacionado:
Muchas gracias, Gorka. Es de un gran valor para los que amamos la radio disponer de tu análisis (objetivo en mi opinión) del EGM. Un saludo.
ResponderEliminarCoincido. Muy interesante el análisis y la reflexión final. No entiendo como todas las radios tiene prácticamente los mismos formatos en las mismas franjas horarias. ..
ResponderEliminarCoincido .
EliminarUna petición , el Impuesto de Sociedades , tiene diferentes tipos-. cooperativas 20 % , pymes 25 % , resto de empresas 30 % , y empresas petroíferas 35 % .-
No puede tener el mismo tipo una empresa de tele tv.- dolor rosa o basura .- y una empresa de prensa o de radio-. Si no prensa.- no va a haber medios mass media que narren lo que sucede cada día.
Una petición .- ayudas a la prensa escrita y a la sradios.- y por faor redios en cadena señales en cadena .- Basta ya de chiringuitos de quien alquila una señal y no crea un puesto de trabajo .- -
El mejor análsis de la radio .- Apreciaciones, en mi humilde consideración -. la fiabilidad es escasa, ver descargasen ivox , etc y youtube. o el control de las dab .- No hay 3 radios, hay mas, esradio , rne, capital , etc.- 3.- Solo los que tengan una estructura de costes saneadas son empresas , ebitda negativas sonmuertos vivientes. , tienen pérdidas , y no tienen oyentes,poner cansó en catalá, en la G Via , es poco creible. En esta España rota , quien la ha hecho roto , no espere que haya un espirítu federal , humo ,
ResponderEliminarRecordar quien uso a la figura del Fuhrer para poner largar .Al parecer la expresión de Super García el imperio del monopolio a que grupo mass media se refería ? .Que periodistas han puesto en pie una cadena a pecho descubierto , capital radio, y es radio -. Losantos , Luis Vicente yRafa Cerro .Desprenden radio radio, todos eran a3radio. se nota la casta y la bravura ¡
La radio tiene que piropearse.- se anuncia en la radio, para gente que trabaja y tiene buen gusto - que viaja en coche o enmetro o en bus-. y escucha su emisora favorita.- Tienen las marcas que diferenciar , y dar valor a la radio.-
ResponderEliminarTodos damos valor a david contra goliat- y la ciudadanía pone valor a los pequeñps frente a los grandes Tv .- que esán borrachos de dinero - .-
Viva la radio - ah y yo escucho todas las radios.- Para mi todas son nº 1. -