2022, el año del nuevo impulso a la radio desde el Gobierno
- Desde hace veinte años se sigue emitiendo en estándar DAB en Madrid y Barcelona sin que la población se haya enterado
- En 2000 la industria de la radio sufrió una frustración injusta que le ha costado millones de euros y todavía sigue pagando… para nada
- El pasado 8 de octubre las cadenas comerciales se reunieron con el Secretario de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales para analizar el futuro del sector
- Al Gobierno se le llena la boca hablando de digitalización y su apuesta determinada por impulsarla, pero la radio sigue siendo la gran marginada de sus proyectos
Carles Mulet durante su intervención en el pleno del Senado (Fotografía Compromís) |
El pasado 4 de noviembre, Compromís intentó impulsar la RDT mediante una Proposición de Ley, que el PP calificó de “trampantojo”, sin aportar alternativa; mientras que el PSOE aprovechó su intervención para tirarla al cubo de la basura y hacer un mitin con el capítulo de innovación digital del Proyecto de Presupuestos y la dotación millonaria que le han destinado
El senador catalán Josep María Matamala (Junts per
Catalunya) argumentó, además de la ausencia de urgencia, que la Proposición de
Ley de Compromís “representa importantes inversiones, tanto a las empresas
privadas, como también a los Ayuntamientos que tienen sus emisoras locales,
pero también a todos los oyentes, hay que hacer un cambio en todos los aparatos”.
Vamos situándonos: el dinero. Sí lo había para la TDT, pero la hermana pobre de
los medios audiovisuales, como siempre, no merece tantas atenciones. Obviaré
el, seguro, involuntario olvido de su señoría de mencionar al colectivo de la
“radio pública”, y no solo a los ayuntamientos, y puntualizaré que, para los
oyentes, hacerse con un receptor de DAB/DAB+ no representaría ya, en ningún
caso, una barrera económica, por cuanto estamos partiendo de precios inferiores
a veinte euros. Pero nadie se va a comprar un receptor, por muy barato que ya
sea, si no hay nada interesante que escuchar. El camino es, justo, el
contrario: deben ser los radioperadores -públicos y privados, por este orden-
los que apuesten por nuevos contenidos que atraigan a los oyentes, nuevos y
veteranos. Los mercados europeos donde la RDT lleva más años implantada han
demostrado que la radio es capaz de atraer a público más joven, con nuevas
propuestas, igual que ocurrió en los sesenta en España con la llegada de la FM:
nuevos contenidos, nuevos oyentes.
Nada
se ha dicho de las decenas de millones de euros que llevan “invertidos” los
radioperadores “a fondo perdido” y no hay visos, a corto plazo, de que
dejen de pagarlos, a riesgo de perder las frecuencias digitales. Mucho se ha
hablado de volver a la cobertura del 51 por ciento de la población en DAB para
recuperar, al menos, posiciones. Pero no
tendría sentido hacerlo en DAB, sino en DAB+, su evolución tecnológica. Y, en
cualquier caso, habría que partir de cero. Para que se hagan una idea, la
industria estuvo pagando al operador (entonces Retevisión) hasta 2011, en que
los radioperadores lograron que la administración se apiadara de sus ingentes
gastos, 176.000 € al año por concesión, una cifra que descendió sensiblemente
al reducirse las emisiones al veinte por ciento del país.
¿Qué retorno ha obtenido la industria de la radiodifusión
privada por la aventura de la RDT? ¡Cero! Y lleva gastados, millones de euros.
El “fiasco
total” de la implantación de la DAB en España, como lo calificó el
exdirector técnico de la Cadena SER en su día, Agustín Ruiz de Aguirre,
en esta web, produjo una enorme frustración en el sector, entre los que
estaban, y entre los que aspiraban a estar. No es de extrañar, por tanto, que
su actitud ante el proceso de digitalización en España sea de clara
desconfianza. Aquello se parió mal desde el principio, con intereses espurios,
y así nos ha ido.
El senador Carlos Mulet ha asumido como propio el objetivo de reflotar la RDT en España |
Pero este capítulo ocurrió hace veinte años, cuando España,
junto con Gran Bretaña, pasó a liderar en Europa el movimiento de la RDT. Esto
fue lo que reivindicó el senador popular, Juan Miguel Vázquez Rojas aquella
mañana. Poco menos que España tiene DAB gracias a un Gobierno del Partido
Popular, presidido en este caso por José María Aznar. ¡Como si se
pudieran enorgullecer de semejante bodrio legislativo, que enfrentó a los
operadores y disparó unos gastos en la industria que no han servido más que
para incrementar las pérdidas en sus cuentas de resultados! Esto sí que fue,
señoría, el verdadero “trampantojo” de la historia de la RDT en España…
Nuestra RTVE podría, por ejemplo, seguir los pasos de su homónima francesa. Radio France apagó progresivamente todos sus postes de onda media en 2015, y dedicó sus recursos a potenciar sus emisiones digitales
A sus señorías, en el Senado, les gustó la música de la canción
que proponía Compromís, pero no desde luego la letra, que cada grupo aspira a
escribir, según sus intereses y directrices, con especial interés, como no
podía ser de otra forma, por los letristas del Gobierno del PSOE y Unidas
Podemos que, en su día, allá por 2016, apoyaron
con entusiasmo el despliegue de la DAB en España, mediante la presentación de
una proposición 'no de ley' sobre la democratización del espectro
radioeléctrico. Como calificó el periodista de El Mundo, John Müller,
Podemos cayó “en la trampa de la ilusión digital”. Aquello
no tenía ni pies ni cabeza.
El pasado 8 de octubre, en la sede del Ministerio de Asuntos
Económicos y Transformación Digital, el secretario de Estado de
Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, Roberto Sánchez, se
reunió con los máximos representantes de las tres grandes cadenas radiofónicas
privadas, Ignacio Soto, director general de Prisa Radio, Julián
Velasco, CEO del Grupo Cope y Ramón Osorio, director general de
Atresmedia Radio, para analizar conjuntamente el futuro del sector.
Desde la Secretaria de Estado se informó a las cadenas
privadas de la transposición a la que la Unión Europea ha obligado a la
legislación española, por la que, a partir del 21 de diciembre de 2020, todos
los vehículos nuevos adquiridos en España deberán ir provistos de receptor
radiofónico que pueda captar las señales digitales emitidas a través de DAB y
DAB+, por las que se ha apostado con decisión en el ámbito europeo, e
internacional. Una adaptación que nuestro ejecutivo ha realizado sin mucho
entusiasmo, por qué negarlo y que, con el tiempo, irá conformando un parque de
receptores en movilidad en todo el país que, o bien creará un espacio de
oportunidad para el desarrollo de la RDT en España, o bien seguirá alimentando
la frustración de los oyentes que se encontrarán una banda digital sin emisiones.
Mucho se ha hablado de volver a la cobertura del 51 por ciento de la población en DAB para recuperar, al menos, posiciones. Pero no tendría sentido hacerlo en DAB, sino en DAB+, su evolución tecnológica. Y, en cualquier caso, habría que partir de cero.
El secretario de Estado informó a los altos representantes
de las cadenas de radio comerciales de su calendario de cara a la elaboración
del futuro Plan Técnico Nacional de Radiodifusión Sonora Digital que
sustituirá al actualmente vigente, y cuyos plazos se sitúan, en el mejor de los
casos, en torno al año 2022. Roberto Sánchez quiere escuchar a los
representantes de la radio pública (RNE) y a los de las corporaciones públicas
autonómicas. Asimismo, les trasladó la necesidad de constituir un grupo de
trabajo coordinado por la secretaría de Estado, en el que participen todos los
directores técnicos implicados en el futuro de la radiodifusión, para ir dando
cuerpo al nuevo texto legislativo. O sea, más tiempo.
En la reunión también se comentaron otros aspectos
relacionados con la actualidad del sector, como la Proposición de Ley de
Impulso de la Radiodifusión Sonora Digital Terrestre presentada por la
coalición valenciana Compromís en el Senado (y en el Congreso de los
Diputados), a través del Grupo de la Izquierda Confederal (Adelante Andalucía,
Més Per Mallorca, Más Madrid, Geroa Bai y Catalunya En Comú Podem) para avanzar
en la digitalización de la radio de nuestro país, y que no tocaba aprobar
ahora, porque los planes del Gobierno son otros. Así, la senadora María
Teresa Fernández Molina, fue la encargada de trasladar a sus señorías de
Compromís que “hay que utilizar otra estrategia para transformar la radio
digital en España, evaluando la situación inicial con rigor, identificando las
medidas de estímulo e impulso necesarias para garantizar el éxito en la
implantación y por último a través de la futura Ley General de
Telecomunicaciones, en la que se incluirá el Código de Comunicaciones
Electrónicas”.
Pues bien, ya
se encuentra en período de “audiencia e información pública”, el Anteproyecto
de Ley General de Comunicación Audiovisual impulsado por el Gobierno.
Uno puede recorrer sus farragosas páginas en PDF tratando de encontrar alguna
alusión impulsora de la RDT y se quedará con las ganas. En lo que sí hay mucha
insistencia en el Anteproyecto es en la necesidad de contar con la preceptiva
autorización de la administración mediante la correspondiente licencia para
poder emitir por ondas hertzianas (sea en analógico o digital indistintamente).
Nada, mejor no hablar de las tres mil emisoras piratas que emiten en España,
¿para qué, verdad?
Lo de los coches ha cambiado: a partir del 21 de de diciembre de este año, todos los coches nuevos deberán ir provistos de recetores de radio digital (FM+DAB+DAB+) |
Esto será lo que finalmente ocurra en Europa, más temprano que tarde. Que, al igual que ocurrió con la TDT, el Parlamento Europeo establezca un plan conjunto de desarrollo e implantación de la RDT en todo el territorio de la Unión. ¿Cuándo? Cuando Alemania y Francia decidan. El primero ya trabaja en entornos del noventa por ciento de cobertura del país en DAB+ y acaba de poner en marcha su segundo múltiplex, y el segundo está haciendo un auténtico esfuerzo desde 2018 para recuperar el tiempo de inacción, provocado, precisamente, por el escaso interés de los radiodifusores privados. Por fortuna, su actitud ha cambiado, tras la apuesta por la digitalización, también, en el ámbito local, esencial para los intereses comerciales de las cadenas privadas. Europa ha apostado con decisión por la RDT en estándar DAB+ y las coberturas poblacionales se encuentran ya muy cerca del cien por cien, con las excepciones de Francia (20%) e Italia (+83%).
Los mercados europeos donde la RDT lleva más años implantada han demostrado que la radio es capaz de atraer a público más joven, con nuevas propuestas, igual que ocurrió en los sesenta en España con la llegada de la FM: nuevos contenidos, nuevos oyentes
Mientras tanto, en España, seguimos mareando la perdiz e
insistiendo en la no urgencia de impulsar la RDT ahora, en este contexto
pandémico que nos ha tocado vivir. En el resto de Europa, sin embargo, piensan
lo contrario, y han sido los organismos públicos los que han liderado el
proceso de implementación de la RDT en sus respectivos países. En esto España
también es diferente, aunque haya que escarbar un poco. En el programa de La 2,
“RTVE Responde”, del 30 de diciembre de 2018, el director de
Estrategia e Innovación Digital de la Corporación, Pere Vila,
declaró: “RNE y RTVE tenemos planes para promocionar la radio digital en
España, es importante para nosotros, queremos ser el motor de la digitalización
de la radio en nuestro país, pero este motor tiene que trabajar en coordinación
con el resto de actores y la Administración”. Está claro: el ‘pero’ es
determinante. “La radio digital es un tema de país, no solo de RNE”,
sentenció Vila. En pregunta lanzada en enero de este año a la Administradora
Única de RTVE por el mismo senador Mulet, que ha decidido enarbolar la bandera
de la digitalización de la radio española, y que bien podría identificarse con
el protagonista del mito de Sísifo de Camus, por su persistencia y empeño en
una causa casi perdida, Rosa María Mateo insistió en el mismo argumento
de su director de Estrategia. “¿Tiene RTVE realmente voluntad de hacer algo
en materia de DAB+?”, preguntaba el senador valenciano. “Sí”,
respondió por escrito la máxima responsable interina de RTVE, y a continuación
colocó la preceptiva conjunción adversativa: “pero tiene la voluntad de
hacerlo en coordinación y sintonía con el resto de actores”. O sea, RTVE no
va a mover un dedo hasta que no se lo ordenen. La voz de su amo.
Nuestra RTVE podría, por ejemplo, seguir los pasos de su
homónima francesa.
Radio France apagó progresivamente todos sus postes de onda media en 2015,
y dedicó sus recursos a potenciar sus emisiones digitales. Cambió, pues, medios
analógicos por nuevos digitales. Consideró que las audiencias que cubrían sus
postes de OM eran “marginales”, y además estaban cubiertas por la FM y la
emisión online. El paisaje en España es similar, aunque aquí las audiencias de
OM no son tan marginales, pero sí cuentan con la alternativa de la FM. RTVE
podría sacar adelante proyectos que tiene guardados en un cajón polvoriento,
como Clan
Radio, en su día un proyecto de radio online infantil de RTVE, anunciado a
bombo y platillo en 2013, que podría encontrar en DAB un magnífico canal para
reanimar el mercado.
A sus señorías les gustó la música de la canción que proponía Compromís, pero no desde luego la letra, que cada grupo aspira a escribir, con especial interés por los letristas del Gobierno del PSOE y Unidas Podemos
En esa misma reunión del 8 de octubre, los representantes de
las cadenas comerciales más importantes del país trasladaron al secretario de
Estado su voluntad de solicitar, en la futura Ley Audiovisual, la prohibición
expresa de emitir publicidad en las emisoras ilegales. Esta es, al parecer, su
única preocupación. Nada dicen de los
postes ilegales que utiliza la propia industria en aquellas plazas en las que
carece de concesiones, pero se niega a perder el mercado publicitario, aun
a riesgo de ser multada por la infracción administrativa cometida (que no
llegará…).
Con una RTVE servil al poder, los radiodifusores privados situados en contra de la RDT, por lo que les supone de ingentes inversiones económicas y dudoso cuando menos retorno de los esfuerzos, y una administración desactivada en materia de radio, que funciona al albur de los lobbies del sector, por la cuenta que les trae, solo podemos esperar que esto salga adelante cuando el sector privado se decida. O cuando la Unión Europea, aunque no sea de tradición taurina, tome el toro por los cuernos, y publique la Directiva definitiva en materia de Radio Digital Terrestre. De una u otra forma, tendremos DAB+ en España. ¿No sería mejor ir desbloqueando la situación, y dar pasos cortos, pero firmes, a la vista de lo que ocurre en nuestro entorno más próximo?
Esa opinión que se expone arriba sobre apagar las Ondas Medias es una locura, En España hay casi 1 millón de oyentes que utilizan la OM , muchos la escuchan en zonas donde la FM o no llega o llega fatal y donde el DAB no es viable... apagar esas emisoras sería una canallada para los oyentes! mas bien deberían de preocuparse de desarrollar el DRM/DRM+ y abandonar el DAB... En España no tenemos porque copiar los errores de Francia! En EEUU con un sistema diferente mantienen sus OM Y FM digitalizadas sin tener que invertir un dineral en una nueva red de emisoras
ResponderEliminarCreo que habría que salvar unos pocos emisores en onda media que garantizasen la recepción en toda España, pero me temo que en un formato solo digital. En EE.UU. las empresas se están planteando hacer las emisiones solo en formato digital para la onda media (lo que ellos denominan "On Allen AM"). En su caso pueden comprarse un receptor de HD Radio en cualquier comercio. Nosotros precisaríamos comprarnos un receptor DRM en una tienda de antigüedades. Esperemos que pronto se comercialicen esos receptores, pero no creo que la AM sobreviva a los últimos abuelitos que todavía se lleven el transistor a la oreja. En todo caso, creo que no podemos pensar que puedan seguir habiendo cinco emisoras de onda media por provincia. Y eso que deseo fervientemente que pronto haya receptores disponibles en el sistema DRM. Pero no es lo que tenemos en este momento.
EliminarDel DAB+ tenemos noticias en publicaciones muy especializadas, y se ignora en otras que llegan a más lectores o espectadores. Puede que yo haya sido muy torpe pero no veo nada publicado del pleno del Senado del pasado 4 de noviembre, en los medios de comunicación más importantes.
ResponderEliminarExiste una “Ley del Silencio” sobre el DAB+: o se le ridiculiza, o se le condena al ostracismo. Un importante medio de comunicación trajo dos artículos cuyos titulares recuerdo muy bien . Uno estaba encabezado por un “DAB+, LA TECNOLOGÍA QUE HARÁ QUE PRONTO TU RADIO FM NO SIRVA PARA NADA” y otra información con estos titulares: ““La radio digital terrestre se apaga antes de nacer. El Gobierno subastará para cobertura móvil las frecuencias que destinó al sistema radiofónico que nadie usa porque administración y empresas le dieron la espalda”. Noticia que fue convenientemente desmentida en “Panorama Audiovisual” https://www.panoramaaudiovisual.com/2015/08/31/la-dab-no-se-cierra-en-espana-pese-a-el-pais/
Si no hay ocasión para ridiculizar el DAB+,no hay noticia. Y sorprendentemente, también tenemos censura: intentar publicar enlaces de la ya desaparecida Dabbarcelona.info en Facebook es misión imposible: Jnvariablemente Facebook me avisa que mi publicación infringe un buen puñado de normas. Por lo visto alguien ha movido los hilos para que nadie pueda recuperar, por “Web Archive Org”, cosas interesantes de la radio dab catalana. Incluso el actual enlace (que es un enlace roto), provoca la censura de Facebook.
El publicar todo esto que ahora estoy escribiendo, me valió el que una publicación mía fuera borrada de una página de Facebook dedicada a los temas de la radio. No se me informó de si estaba atentando contra alguna de las reglas de esa página. Pero si cualquier intento de hablar del DAB+ en España provoca ese tipo de reacciones, nadie me puede convencer de que no existe una “Ley del Silencio”.
Todos estos esfuerzos han tenido sus frutos, pues salvo que la gente esté muy interesada en la radio y tenga unos años, no va a saber que existe un sistema de radio que no va a tener otro inconveniente para él, que tener que comprar un receptor, que en muchos casos está ya por debajo de los 30 euros, y en algunos casos todavía más barato.
En mi caso tengo la esperanza de que se vayan iniciando concursos de radio digital terrestre autonómica y local. Navarra arrancó en enero, y en las Baleares, se hizo una nueva convocatoria del concurso ya finalizado, para dar la oportunidad a diversas empresas y asociaciones a ocupar las plazas que quedaron desiertas en mayo de 2011. Pero el tiempo del DAB ya pasó y el gobierno debería de autorizar la convocatoria en el estándar DAB+. Y evidentemente, ampliar las plazas disponibles por múltiplex hasta 18. Mientras tanto, las empresas con licencia de radio digital terrestre, emplean seis múltiplex para emitir las mismas cadenas que con el DAB+ precisaría de un único múltiplex en Madrid y otro en Barcelona. O que con el DAB+ permitiría con la misma energía que actualmente se gasta, hacer presente la radio digital terrestre además en Valencia, Sevilla, Zaragoza y Málaga.
Eduardo Martínez.
Si hubieran tenido voluntad se estarían ya ahorrando dinero emitiendo un solo bloque DAB+ con los programas que emiten los actuales 3 bloques DAB que hay en Madrid y Barcelona.
ResponderEliminarEs más, se podría ver movido variaciones a la legislación sobre licencias para permitir más programas nacionales en estos 3 bloques pasándolos de DAB (6 programa de capacidad) a DAB+ (18 de capacidad) permitiendo así fomentar una oferta radiofónica más variada que la del DAB actual.
Si por cada 3 piratas o 3 que le han subido potencia o cambiado ubicación al poste hubieran puesto uno de DAB ya tendría DAB media España.
Está claro que cuando se intenta eliminar la radio digital terrestre es a partir de que en el año 2007, se crea el nuevo estándar DAB+. A partir de ese momento la radio digital terrestre pasa a ser una amenaza para los tres actores principales de la radio: El grupo de empresas "A" (que aunque podría verse beneficiado por la disminución de costes en las emisiones, vería como el conjunto de empresas "B","C" y "D" pasan a emitir donde antes solo ella emitía. Por su parte el conjunto de empresas "B,C y D", que podrían beneficiarse de poder llegar donde antes solo llegaba "A", temen a su vez que puedan aparecer empresas nacionales o venidas del extrajeron ("F", "G"... y "Z"), que no solo puedan competir en el reparto de la tarta publicitaria, sino que puedan sufrir que los contenidos de las nuevas empresas son más atractivos que los que ellos hacen, y poder quebrar por la bajada de audiencias. Y el tercer actor, el presidente autonómico de turno, que con la fm, tiene un espectro muy limitado para repartir y que debiera repartir para garantizar la máxima pluralidad, pero que al final se dedica a beneficiar a empresas afines ideológicamente o afines a secas. Y al cual, con un sistema que permite ampliar mucho el espectro, se le reduce su margen de maniobras.
EliminarLa radio digital terrestre empieza a ser una amenaza para los tres vértices de este triángulo a partir de la invención del DAB+. Y es a partir de ese momento (que en el resto de Europa aprovechan para dar un gran impulso a la digitalización de la radio, poniéndose todos de acuerdo en emplear este sistema para este fin), cuando en España se ponen todos de acuerdo, para intentar que la digitalización de la radio no altere el estado de las cosas. Y esto incluye el "desinformar" a la población en general, de la existencia de un sistema de radio digital.
Con los tres múltiplex nacionales, los dos autonómicos, y los dos locales que contarán las capitales de provincia y sus cercanías, hay espacio para que haya el equivalente a 126 estaciones de fm: El doble que lo que en teoría cabe en la fm, con el mismo coste de energía, que emitir siete emisoras de fm. Con los planes de Compromís hay todo ese espacio disponible, si se emite con una tasa de 68Kps. Y con todo ese espacio, se podría reorganizar toda la actual fm, y dejar espacios para nuevas empresas de radio (que es lo que precisamente, no se quiere dejar que suceda)
Eduardo Martínez.
Y algo a tener en cuenta:
ResponderEliminar¿Y que garantiza que en 2022 siga el mismo gobierno al frente? También tuvo buenas palabras una senadora hace unos años y ahora anda por su trabajo en su vida privada ya fuera de la política y ni querrá saber nada de esto. Lo lamentable es que los partidos luego no se hacen cargo de los compromisos que adquirieron los políticos de sus filas y decir buenas palabritas sale gratis.
Lo que hay que legalizar son los 2 DAB y los 2 DRM, y que en cada aparato casero de radio digital terrestre que se venda en España por las tiendas físicas e internet haya los 2 DAB y los 2 DRM.
ResponderEliminarEsperemos que así sea. Pero a día de hoy, o uno se va a una tienda de antigüedades y compra un Himalaya o un Morphy Richard, o tiene que ir a una fábrica de China y encargar 500 receptores con DRM. No hay otra manera de obtener un receptor con estas características. Y todo parece indicar, que en las dos marcas que uno puede obtener si hace ese pedido mínimo, tiene garantizado el DRM para las ondas media y corta, pero no parece tenerlo para la fm.
EliminarEsperemos que un conglomerado de empresarios chinos con tiendas en España, cometan ese pedido de 500 y en alguna tienda de algún lugar, se pueda comprar alguna de esas dos marcas ( Las marcas de la India no se comercializan fuera de la India. Y la mayoría de receptores que se han anunciado con DRM, no han pasado del anuncio ante la prensa. Aunque todo podría cambiar).
Eduardo Martínez.