La lucha de intereses por la DAB
https://www.gorkazumeta.com/2019/10/la-lucha-de-intereses-de-la-dab.html?m=0
El editor reflexiona en torno a los temas que se abordarán en la Asamblea Anual del WorldDAB, que se celebrará en Bruselas el mes que viene
Francia vivía una situación de recelo ante el DAB similar a la española, pero el gobierno y la radio pública lograron desbloquearla
No es fácil cambiar una infraestructura mastondóntica como
la frecuencia modulada, tan arraigada en la cultura de los ciudadanos europeos.
Pero si ya éste constituye un problema suficientemente importante como para
prestarle la atención y el esfuerzo debidos, por si fuera poco, la disrupción
digital ha ampliado el escenario a otros actores, nacidos de la globalidad.
Así, los tradicionales productores de contenidos sonoros (la industria
radiofónica) ven comprometido su negocio por la irrupción de los nuevas reglas que podríamos denominar "reglas de las lentejas": "si las quieres las tomas, y si no, las dejas". Son gigantes
tecnológicos que han establecido nuevas reglas en la distribución y difusión de contenidos.
Si la industria, como es lógico, quiere estar presente en el nuevo hardware,
como los altavoces inteligentes, por ejemplo, tiene que pasar por su taquilla,
a pesar de que, de momento, no obtenga retorno de su inversión en contenidos,
más allá de su propia presencia en ese gadget.
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| Los coches es un entorno estratégico para la radio (Fotografía Pixabay) |
Por si fuera poco, la transmisión actual a través de
internet, en 3G y 4G, y el anunciado 5G (broadband), en
el que muchos tienen depositada una confianza que no se corresponde con la
realidad, al menos en lo que a difusión de radio digital se trata, está
pervirtiendo el modelo tradicional de difusión por aire (broadcast) en
un aspecto clave relacionado con las cuentas de explotación de la industria
radiofónica tradicional, que no es otro que los nuevos costes introducidos por
los gigantes tecnológicos por el alquiler de las redes de difusión de que son
propietarios.
En el WorldDAB ven, con estupefacción, lo que ocurre en España, no dan crédito a la involución de la industria radiofónica española, y a su negativa a avanzar en este escenario por el que ha apostado la Unión Europea con determinación, como podemos comprobar por las ingentes inversiones en redes desarrolladas en cada uno de los países
De ahí la creciente preocupación de la industria radiofónica
tradicional por el progresivo aumento del poder de estos “gigantes tecnológicos”,
como los denomina el propio WorldDAB, en el nuevo escenario de la difusión de
contenidos sonoros. El DAB, como sustituto de las caducas ondas medias y las
todavía vigorosas frecuencias moduladas, devuelve el control de la difusión al
aire y, consiguientemente, reduce los costes de explotación.
Por eso, Patrick Hannon, el presidente del WorldDAB, subraya la necesidad de que este organismo trate de “posicionar a DAB + en el centro de las estrategias digitales de
los organismos de radiodifusión”, para recuperar posiciones originales del
sector en el control de la difusión de su propio producto, sin tener que enriquecer a terceros, que no arriesgan en la producción de contenidos.
La Asamblea General de este año abordará asuntos clave en el
desarrollo de la DAB + en Europa y en el mundo, como los últimos trabajos de la
industria automovilística por mantener la radio muy presente en el tablero de
instrumentos, con independencia de la
Legislación europea de finales de 2018 que obliga a todos los vehículos
europeos comercializados en Europa a incluir un receptor de DAB y DAB+ en un par de años. La
radio sigue siendo estratégica en el consumo de radio (el primer lugar donde se
escucha) y por fortuna los fabricantes de automóviles siguen contemplando su
presencia como imprescindible. Otra cosa, muy diferente, será cuando se implante el vehículo autónomo, pero aún queda para este escenario, aún más disruptivo que el actual.
Pero también deberá abordar la situación en cada uno de los
países europeos, los planes de cobertura y expansión futuros y sus plazos de
ejecución. En este capítulo, una vez más, España sigue ausente, aunque emite
-para nadie- en un 20 por ciento de la cobertura poblacional, centrada
geográficamente en Madrid y Barcelona. Pero sin compromisos de regresar al 51
por ciento de cobertura alcanzada a principios de los dos mil ni por supuesto
de progresar en este ámbito. Por si fuera poco, el
Partido Popular quedó retratado en el Senado cuando, con absoluta ignorancia
tecnológica, apostó por el 5G como soporte futuro de la radio digital en
España, en detrimento de la DAB por la que está apostando el resto de Europa.
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| Participantes en un seminario sobre implementación de redes DAB+ del WorldDAB, que tuvo lugar en Hungría el pasado m es de mayo, organizado por la Autoridad Nacional de Medios e Infocomunicaciones (Fotografía, Julia Nechyporenko, Consejo Nacional de Radio y Televisión de Ucrania) |
Tampoco el Partido Socialista (PSOE), actualmente en funciones, a la espera de que las urnas le saquen del embrollo en que se ha metido, cuestión harto difícil por cierto, posee interés en apadrinar el DAB +. Pero, a diferencia del Popular, sí mantiene, con la boca pequeña, su voluntad de avanzar por este camino. Una actitud que, a la vista del histórico, me cuesta creer y aceptar. Pero me encantaría equivocarme.
Francia constituía una preocupación para el WorldDAB por cuanto vivía una situación similar a la española: la industria radiofónica privada recelaba de la llegada de la DAB+. Sin embargo, la determinación de la administración, y el empuje de la radio pública, Radio France, terminaron por desbloquear la desconfianza
Queda mucho trecho por recorrer, pero Europa está en el buen
camino, con las excepciones, clamorosas, de España y Portugal. Otro de los
aspectos que se abordará en esta Asamblea que se desarrollará los días 5 y 6 de
noviembre próximos, será la irrupción de los altavoces inteligentes, que avanza
a un ritmo constante, pero inferior al impacto previsto. De nuevo, la industria
tradicional se convierte en presa de los gigantes tecnológicos (Google, Apple,
Amazon,…). La Unión Europea trabaja con un prototipo de smartspeakers cuyo receptor
de radio está basado en tecnología DAB, lo que devolvería el control de la
emisión a los actores tradicionales de la radio. Pero, seamos realistas, no es
fácil competir con el poderío de los grandes actores globales apuntados.
Todo avance, por pequeño que sea, en el desarrollo de la DAB
+ en el mundo, es un triunfo para el WorldDAB. Francia, hasta hace poco, constituía
una preocupación para este organismo supranacional que vela por la extensión de
esta nueva tecnología de radio digital terrestre. El país galo registraba una
situación similar a la española, en la que la industria radiofónica privada recelaba
de la llegada de la DAB +, por lo que de intromisión de nuevos actores suponía
para un sector que no vive un momento tan feliz que permita nuevas alegrías e incursiones…
Sin embargo, la determinación de la administración, y el empuje de la radio
pública, Radio France, terminaron por desbloquear la desconfianza, y Francia
(20%), ahora, ha acelerado el desarrollo de la DAB +, con la intención de
situarse pronto en coberturas similares a las de sus vecinos europeos, como
Gran Bretaña (97,3%), Alemania (98%), Italia (80%) o Bélgica (95%), por citar
unos pocos países.
En el WorldDAB ven, con estupefacción y asombro, lo que
ocurre en España, no dan crédito a la involución de la industria radiofónica
española, y a su negativa a avanzar en este escenario por el que ha apostado la
Unión Europea con determinación, como podemos comprobar por las ingentes
inversiones en redes desarrolladas en cada uno de los países implicados, no
solo en el Viejo Continente, sino también en otras latitudes como Asia y
Oceanía. Pero su margen de actuación para impeler a España a cambiar de actitud
ante la DAB + es muy limitado, por cuanto la Unión Europea -y éste fue su gran
error, que no se pensó en el caso de la TDT- fue permitir que cada estado
decidiera su propio calendario, su propia velocidad de digitalización de la radio. En privado, los
responsables del WorldDAB no entienden lo que pasa en España, por cuanto el
escenario era similar al de otros países, como el caso francés citado, desbloqueado con voluntad de progresar.
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| Evolución de los ingresos publicitarios en el mercado británico, en millones de libras, en los últimos cinco ejercicios cerrados, tras la introducción de la DAB, según WorldDAB |
El modelo más extendido de implementación de la DAB + en
Europa lo han liderado los gobiernos, claramente, por extensión de la Unión Europea,
por solidaridad y responsabilidad. Y los gobiernos, como no podía ser de otra
manera, lo han delegado en sus medios públicos, que han sido los auténticos
motores del desarrollo de la nueva tecnología, y los que han atraído a los
privados, más reticentes ante el evidente abandono de la zona de confort que
representa la irrupción de la DAB +.
No es fácil cambiar una infraestructura mastondóntica como la frecuencia modulada, tan arraigada en la cultura de los ciudadanos europeos
Sin embargo, no se ha publicitado lo suficiente la respuesta
del mercado publicitario de la radio en aquellos países que ya disponen de una
infraestructura en DAB más consolidada, como el mercado británico, donde en los
últimos cinco ejercicios, han crecido un 24 por ciento los ingresos por
publicidad (según podemos comprobar en el gráfico correspondiente), lo que da
idea de la regeneración de un medio que, al cambiar de tecnología, al
actualizarse, se recoloca en el escenario de los medios, con nuevos contenidos
y programaciones, en definitiva, con nueva y renovada oferta, tan necesaria -imprescindible,
diría yo- para evitar que se extienda el certificado de defunción de la radio
que no se mueve, no evoluciona, no arriesga, sino que funciona por inercia,
impulsada únicamente por el eslogan del ‘virgencita, virgencita…”.
En España, trasladando ese modelo, la radio pública, por delegación del Gobierno, debería liderar la implementación de la DAB + en nuestro país, y reservarse para sí nuevas frecuencias nacionales para poner en marcha nuevas programaciones que cubran un nuevo espectro generacional de oyentes a los que atraer con la sugerencia del audio: niños y jóvenes, los dos ámbitos, ahora mismo, más desasistidos por la radio, germen de las nuevas y futuras audiencias que harán sostenible el actual modelo de radio en España, o no. Pero RNE tampoco puede moverse, pese a su incuestionable voluntad de progreso en este sentido, me consta, el de sus actuales cuadros directivos; porque el Gobierno no les da luz verde para hacerlo. Y ya se sabe que "donde hay patrón, no manda marinero".
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