“El EGM sin prisas”: Muchos números rojos en la tarde y la noche

El EGM es más fiable en el acumulado anual, y en la última oleada sigue siendo negativo (III) 

La SER y Cope se recuperan algo; Onda Cero y, sobre todo, RNE, pinchan  

El paisaje de la radio que dibuja cada tres meses en EGM hay que interpretarlo. Y no siempre acertamos, aunque hay que tratar de partir de dos conceptos imprescindibles en este negocio que considero son: la independencia y la honestidad. El primero, porque si uno intenta beneficiar a alguna marca, queda automáticamente desautorizado para ejercer el análisis; y el segundo, porque, cuando las cifras no ‘hablan’ claramente, nos dejamos llevar por interpretaciones a menudo desacertadas, pero al menos deben ser honestas, apoyadas en lo que uno realmente piensa. El EGM es complejo, y es mucho más fiable apoyarse en el acumulado anual (basado en casi 80.000 encuestas) que hacerlo en ola.

Carles Francino, el director de "La Ventana", participa en la presentación de la nueva temporada 2018-2019, junto a Pepa Fernández (Fotografía CadenaSER.com)

El hecho de que el EGM, constantemente, se esté corrigiendo a sí mismo, demuestra que el estudio no acierta a la primera siempre, y por tanto requiere de autocorrecciones. No es la primera ocasión que me comentan que no existen datos en las diferentes encuestas de la AIMC que permitan sostener muchas de las afirmaciones que mantenemos; a pesar de lo cual perseveramos en el acercamiento al EGM y a su explicación. Tómense, por tanto, las reservas necesarias en torno a su interpretación, pero constato que, al menos en mi caso, defiendo en mi humilde análisis la independencia y la honestidad. Cuando alguno de estos conceptos esté amenazado, dejaré de analizar el Estudio General de Medios.

La tarde y la noche. Como diría Guillermo Fesser, “están pasando cosas”. Pero, también es verdad, siempre pasa. Vayamos primero con los datos, genéricos, de la tarde de la radio española, a nivel nacional:la, a nivel nacional:

EGM	‘LA VENTANA (SER)	“LA TARDE” (COPE)	“JULIA EN LA ONDA” (OC)	“ESTO ME SUENA” (RNE)	“ES LA TARDE” (ESRADIO)
Audiencia	806.000	411.000	499.000	239.000	125.000
Dif. ola	+22.000	+ 16.000	-74.000	-91.000	+56.000
Acum.	-74.000	-75.000	-42.000	-93.000	+38.000
Acum.	-8,4%	-15,4%	-7,8%	-28%	43,7%

Fuente: EGM, 3ª ola 2018

Aparentemente, el EGM es bueno para la Cadena SER y para la Cadena Cope. Y en la publicidad que se difundió en su día, en la jornada de su publicación, así se vendió. Pero, insisto, el resultado de ola es más insostenible que el acumulado anual. Y aquí, de nuevo, vuelve a quedar reflejado. Hay cifras que deben hacer reflexionar a algunos directivos y hasta a ir pensando en introducir cambios de calado. Y, desde luego, no puede afirmarse en ningún caso que las cosas van bien en las grandes cadenas.

La pérdida anual acumulada en las tardes de Ciudadano García en RNE es de un 28%. Casi 100.000 oyentes han dejado de escucharlo

Para empezar, las únicas cifras en negro, en crecimiento, se mire como se mire, son las de EsRadio, que en esta ola ha demostrado que está -a pesar de su limitada cobertura, frente a las grandes cadenas, públicas y privadas- superando su propio histórico. La cadena de Federico Jiménez Losantos sigue apostando a la contra y aunque su promotor es de complicado etiquetado ideológico, sí veo una relación entre el crecimiento de opciones políticas como Vox con estos resultados. Habrá que observar detenidamente la evolución, porque la tendencia de esta nueva opción política, surgida del seno del Partido Popular, y situada a la derecha de la derecha, es la de crecer, ante un panorama nacional que se empeña en radicalizar posturas, de uno y otro lado del arco ideológico, y tensar la cuerda de la sokatira.

Todas pierden por la tarde en el acumulado anual. Como decía, respaldan este dato casi 80.000 encuestas, lo que representa, por definición, un margen de error mucho más reducido que las 25.000 encuestas de cada ola. Pero dentro de las pérdidas, no es lo mismo bajar un 8,4 por ciento anual en el caso de “La Ventana”, de la SER, que perder un 28 por ciento en el caso de “Esto me suena” de RNE. O perder un 7,8 por ciento en el caso de “Julia en la Onda”, en Onda Cero, que perder un 15,4 por ciento en “La Tarde”, de Cope. El caso de la radio pública empieza a ser preocupante. José Antonio García obtuvo con su programa en 2014 (3ª Ola) 365.000 oyentes, 126.000 más que los que ahora suma. Más recientemente, en 2017, y también con una hora más de programa, 356.000 (2ª ola), 117.000 oyentes menos respecto de las cifras de la última ola realizada. Este magacine vespertino no solo ha perdido una hora de programa (lo cual serviría en cierta manera para equilibrar audiencias), sino también muchos oyentes, más de una cuarta parte de su parroquia. Tal vez esté sufriendo signos de agotamiento de la fórmula, reiteración y una excesiva previsibilidad. No es un programa de grandes pretensiones, ni desde luego de grandes presupuestos o equipos. Pero es la radio pública. Que en estos meses también ha sufrido cambios de orientación ideológica, y una tendencia a la baja, que, por lo general, suele perjudicar a toda la parrilla.

    

Ángel Expósito ha tenido un buen estreno en "La Linterna"

En el caso de Cope, se ha producido un cambio en las riendas de “La Tarde” y, aun así, ha subido. Se marcha Ángel Expósito a “La Linterna”, y los nuevos inquilinos del horario vespertino -Pilar Cisneros y Fernando de Haro-, suman 16.000 nuevos seguidores, en ola. No es lo normal, pero entra dentro de lo posible: el lugar donde ha tocado hacer la encuesta (que se realiza por sorteo riguroso a principios de año) puede que ideológicamente sea favorable a los oyentes de centro, centro derecha y por tanto oyentes de un programa de Cope que ha ganado en enfoque político y social, y pulso informativo, aunque ha obviado otros contenidos más intrascendentes y agradecidos, que también forman parte de la vida y que este horario, más relajado, recomienda.  Mi impresión es que descenderá en encuestas sucesivas. El exceso de política resulta cansino y la omnipresencia informativa, e incluso el tono, pueden empañar unos buenos resultados.

Fernando de Haro y Pilar Cisneros, de Cope

Por último, las cifras de la Cadena SER y Onda Cero, tampoco son buenas. Pero mientras Julia Otero “solo” pierde 42.000 oyentes en el acumulado anual, después de cuatro oleadas subiendo; el magacine que dirige y presenta Carles Francino hace tiempo que dejó atrás el millón de oyentes (2ª ola 2015) y algo menos los 907.000 (2ª 2017). En esta ola, donde más ha ‘pinchado’ es en el último tramo (19:00-20:00 horas) en que se incluye la desconexión para la información local/regional de las emisoras, que ha registrado una pérdida de 79.000 oyentes (evidentemente, compensada en positivo por las cifras del resto de tramos horarios). En el caso de “Julia en la Onda”, resulta espectacular un descenso de 115.000 oyentes en el tramo de 17:00 a 18:00 horas. Pero, no lo olvidemos, la SER sigue manteniendo las distancias frente a sus competidores. Es decir, todavía tiene margen de sobra y, puestos a perder, todos pierden. La que más pierde -no lo olvidemos- es la radio.

En los informativos nocturnos, ha habido también, en oleada, contrastes: perdedores y vencedores, aunque, con el EGM delante, conviene siempre matizar, como creo que a estas alturas hemos aprendido todos. Veamos los datos:

EGM	‘HORA 25” (SER)	“LA LINTERNA” (COPE)	“LA BRÚJULA” (OC)	“24 HORAS” (RNE)	“EN CASA DE…” (ESRADIO)
Audiencia	1.002.000	727.000	338.000	323.000	88.000
Dif. ola	+7.000	+41.000	-34.000	-154.000	+29.000
Acum.	-30.000	-11.000	-7.000	-88.000	-29.000
Acum.	-2,9%	-1,5%	-2,0%	-21,4%	-24,8%

Fuente: EGM, 3ª ola 2018

A excepción de la Cadena SER y EsRadio, el resto de directores de programas informativos nocturnos, ha cambiado, aunque con suertes diferentes en los resultados de audiencia. Para Àngels Barceló es un refuerzo regresar al ‘Club del millón’ de oyentes, aunque su acumulado anual sea negativo, pero psicológicamente -sobre todo después de perder el tramo de 23:30 a 0:00 horas, de mucha audiencia- es un regalo que la consolida en esta posición dentro de la cadena generalista de Prisa Radio. Tras la salida abrupta de Juan Pablo Colmenarejo de la cadena de los obispos, Ángel Expósito acudió en socorro de “La Linterna”, y la operación ha salido bien, al menos en oleada, porque su acumulado anual sigue estando también en negativo.

Juan Ramón Lucas se ha estrenado a la baja en "La Brújula" de Onda Cero

La llegada de Juan Ramón Lucas a “La Brújula” y de Antonio Delgado a “24 Horas” ha corrido peor suerte. Si Expósito se ha estrenado subiendo, sus compañeros y competidores han perdido seguidores. 34.000 oyentes menos en el caso de Onda Cero y, más grave, en volumen, 154.000 oyentes menos en Radio Nacional. Lo fuera de lo normal es lo ocurrido en Cope, mientras que la pérdida de apoyos, ante cambios sustanciales (de presentador y conductor, y de enfoque informativo) es lo más previsible. Sin embargo, si atendemos al acumulado anual, todos están en números rojos, sin excepción. Si prestamos atención al volumen de las pérdidas, la situación de RNE es especialmente negativa. En cualquier caso, el nivel de factura de los cuatro informativos nocturnos es muy alto, y recomendaría hacer zapping entre ellos para ir seleccionando secciones/contenidos y horarios. Si bajamos más al detalle, RNE pierde oyentes en todos los tramos de “24 Horas”, mientras que “La Brújula”, donde también predomina el rojo en las cifras, recoge sin embargo una insuficiente subida de 26.000 oyentes de 22:00 a 23:00 horas, uno de los cuatro únicos tramos que está en positivo en la parrilla de esta oleada de la cadena verde.

En definitiva, en acumulado anual, la radio española, tanto la de tarde como la de noche, está en números rojos (con la excepción de EsRadio en horario vespertino). Pero las cadenas optan por el dato que más les beneficia, como es natural. La que está perdiendo, insisto, es la radio, globalmente. Pero hay quienes prefieren seguir aplicando la táctica del avestruz.