La radio del futuro será digital, pero no sabemos ni cómo ni cuándo
https://www.gorkazumeta.com/2018/05/la-radio-del-futuro-sera-digital-pero.html?m=0
Reflexión en torno a la conversación mantenida con Isaac Moreno (exCope) en el BIT Audiovisual 2018
Pero no. La sala estaba llena,
repleta, y todos estaban expectantes. Más curioso aún si apuntamos que el marco
-el BIT Audiovisual- está dedicado en más de un 80 por ciento a la televisión,
las telecomunicaciones y a la distribución de los datos, fundamentalmente. Y que la radio ocupa un
discreto lugar, tan discreto que yo no logré ver ningún micrófono en ningún
estand (pero reconozco que tampoco investigué a fondo).
No creo, sinceramente, que éste
sea el camino, salvo que apoyemos el apagón por el ‘artículo 33’, como
finalmente ha ocurrido en Noruega. Creo que el camino es el británico: ofrecer,
a través de los nuevos canales digitales, una programación diferenciada de la
ofrecida por la red analógica, de modo y manera que los oyentes perciban el
valor añadido de esas nuevas radios, y se interesen por ellas. Hay canales de
radio en Europa que emiten solo por DAB, otros simultáneamente en DAB y online.
Los costes, como apuntaba el propio Isaac Moreno en BIT Audiovisual, se
multiplican al tener que mantener tantas redes. “Lo que no puedes permitirte, como radiodifusor privado, es mantener eternamente
redes en paralelo, analógicas y digitales, para difundir los mismos contenidos”.
Precisamente, esta razón -la económica- es la que va a conducir progresivamente
a la desaparición de las Ondas Medias. “El
final de la OM lo tenemos muy cerca, sobre todo por costes. Resulta muy costoso
el mantenimiento de un poste con esta tecnología”. Pero me reconocía que,
mientras que los radiodifusores públicos están apagando su red de OM (Francia,
Alemania…), a los radiodifusores privados les cuesta más tomar esta decisión,
porque puede producirse una fuga de oyentes (que pierdan la OM pero no se
trasladen a la FM, o al online).
Como le comentaba a Isaac Moreno aquella mañana en el BIT, nunca hasta ahora le ha costado tanto a la industria radiofónica un oyente, porque tiene que llegar a él a través de OM, FM, DAB (DAB+), online, TDT y pronto a través de los altavoces inteligentes y, quién sabe si triunfarán, las gafas de escucha, presentadas en la última edición de Radiodays. El exdirector técnico de Cope asentía. Y añadía: “Es que la traslación al nuevo escenario digital de la DAB, o la DAB+, implica no solo aumentar los costes de los operadores en la nueva implementación de la tecnología digital, sino también el gasto que supone entre los oyentes tener que proveerse de nuevos receptores para captar la nueva señal”. Claro, hay que ser realista, y mirar todos los aspectos que rodean a este proceso. Pero, si no hay clara voluntad de progresar, de ahorrar costes con la DAB –“no es mucho más barata que la FM, pero sí es menos costosa”- no llegaremos nunca a dar el paso.
Isaac Moreno, a pesar de todo,
fiel defensor de la radio híbrida como puente de comunicación entre la radio
analógica (FM) y la radio online (que no digital), apuntaba: “No
firmaría ningún certificado de muerte para la frecuencia modulada. No veo
las condiciones bajo las que habría que firmar un certificado de muerte para la
FM. Mi posición en torno a esta banda analógica de difusión de contenidos es
por mi convencimiento del potencial que encierra todavía. No existe, que
yo conozca, ninguna otra plataforma o canal que garantice las mismas
prestaciones de la FM”.
Seguramente no hay una varita mágica para establecer el mejor sistema de traslación de un escenario a otro, es cierto; de ahí también que, en función del entusiasmo que uno muestre por una u otra tecnología, la digitalización de la radio se ve más o menos cerca. Cuando le planteé a Isaac la aparición de una tarifa plana de datos móviles, siguió subrayando que, de manera indirecta, para escuchar la radio online era obligado pagar, y que la radio por tanto costaba dinero. Cierto. Pero no es el mismo escenario que el de una tarifa con límite de gigas para gastar en datos. El paisaje está, pues, cambiando a marchas forzadas, y lo que es válido para ahora, tal vez sea historia en uno o dos años. La llegada, inminente, de la quinta generación de telefonía móvil -el 5G- ante la que, por cierto, el Gobierno español prepara un ‘tarifazo’, abrirá otras puertas. Para algunos, puede suponer la puntilla definitiva a la DAB. Incluso a la FM, y a la radio por aire. Yo no lo creo. Pero es cierto que dará un impulso a la difusión de contenidos a través de la red, algo que a los radiodifusores no les hace gracia, porque es la red que más les cuesta, como destacaba el propio Isaac Moreno en el BIT Audiovisual, donde también estaban presentes los operadores, sonriendo por su floreciente negocio con la radio (aquí cada uno observa la película desde su sillón…).
En cuanto a la radio híbrida, por
la que tanto apuestan ahora desde España, tiene que enfrentarse a no pocos
inconvenientes. De hecho, el primero de ellos es la negativa de los fabricantes
a activar el chip de la FM en sus smartphones. La mayoría los tiene incluidos
en sus circuitos integrados, pero no están activados. A los operadores les
interesa que se consuman datos a través de online. El negocio es el negocio. Con la radio por aire no
ganan nada… Cada uno mira para casa. La radio híbrida marida a la perfección
radio por aire con radio por internet, pero resulta imprescindible que el smartphone
disponga de sintonizador de FM, para que actúe el discriminador híbrido. No
existen tampoco App. de radio híbrida conocidas por el público. La Cope, e Isaac Moreno, venían defendiendo esta tecnología
desde 2014, o incluso antes, y desde entonces poco se ha recorrido. Solo espero que el 'Foro de la Radio Híbrida', recién constituido para extender esta tecnología, no corra la misma suerte del 'Foro de la Radio digital'...
La activación del chip de la FM en los smartphones sí que está llevando a algunos gobiernos a tomar cartas en el asunto, sobre todo después de algunos desastres naturales que han puesto en evidencia que la radio (por aire) es la única que garantiza el servicio en unas circunstancias adversas, mientras que, ante catástrofes, la red es de lo primero que se viene abajo. Así, México, por ejemplo, ha obligado a los fabricantes de smartphones que quieran comercializarlos en su país a que implementen el chip de la FM, y Estados Unidos ha pedido a Apple que active el chip de la FM en sus iPhone. Ambos gobiernos se han dado cuenta de la importancia de la radio como medio de comunicación ante catástrofes o desastres naturales, algo que también reivindica la UNESCO.
En ese nuevo escenario, es fácil entender
cómo enemigos acérrimos como las televisiones, la pública (RTVE) y las privadas
(Mediaset y Atresmedia) han firmado un acuerdo para constituir una plataforma
de contenidos conjunta, de cara a competir contra las nuevas ofertas como
Netflix, Amazon Prime, y similares que intentan copar el nuevo mercado de la televisión
a la carta. En este sentido, me hubiera gustado preguntar a Isaac Moreno acerca
de un anuncio que hizo en ese Seminario dedicado a la Radio Híbrida, organizado
por Aragón Radio, en 2015, "estamos desarrollando una plataforma con el
'dial' de la Radio española en la red", pero no me dio tiempo en el BIT. No obstante, preguntado
fuera de la feria, me dijo que estaba paralizado, “habría que retomarlo otra
vez”. Desde luego, me parece el momento, todo lo que sea apoyar, y facilitar,
el consumo de radio bienvenido sea. Lo necesitan los oyentes, pero sobre todo,
la propia radio.
Los intereses priman sobre el progreso tecnológico
Lo primero que me llamó poderosa,
y gratamente, la atención de la charla que mantuve en la Feria BIT Audiovisual
el pasado jueves 10 de mayo, con Isaac
Moreno, ex director técnico de la Cadena Cope,
que no ha perdido un ápice de su pasión por la radio, fue la asistencia. No
pensaba que iba a encontrarme un auditorio lleno. Pensaba, con toda sinceridad,
que nos íbamos a ver los mismos de siempre; los que llevamos, de serie, desde
hace muchos años -demasiados- la cantinela del futuro digital de la radio.
Momento de la charla que mantuvieron en BIT Audiovisual Isaac Moreno y Gorka Zumeta, el editor de esta web, el pasado 10 de mayo (Fotografía Notimérica, en esta información) |
Existe un proyecto para crear una plataforma conjunta en internet de las grandes cadenas de radio que está paralizado, "habría que retomarlo otra vez" (I.M.)
El marco, por tanto, no ayudaba.
Pero el tema -el futuro tecnológico de la radio- sí interesaba. Es cierto que,
entre el público, había compañeros de fatigas de aquel intento, estrepitosamente
fracasado, del Foro de la Radio Digital, que
continúan en activo. También pude ver a los directores técnicos de las
principales cadenas privadas de radio. Todos quieren saber. Todos los actores
de esta obra inacabada, desdibujada, quieren que el autor -quien sea,
probablemente la administración tenga algún protagonismo en este asunto-
escriba claramente, sin titubeos, lo que resta para completar la historia. Pero
ese actor ‘oficial’ es el primero que se escaquea, hábilmente.
La FM reina en el mundo. Esto es
incuestionable. Y con esta afirmación coincidía con Isaac Moreno, y hasta con
la UER (Unión Europea de Radiodifusión).
Este organismo tiene censados en su zona geográfica 12.000 postes de FM, de los
que casi dos mil (1978) están ubicados en España, el país que más emisoras tiene.
Y, por tanto, más intereses posee en la permanencia de esta red, que es la que
le proporciona sus mayores ingresos, con diferencia sobre la siguiente red,
internet.
Los intereses. Éste es el quid de una cuestión que tiene que ver
con la aparente cerrazón de apoyar abiertamente la implementación de la DAB en
España, por la que sí han apostado en otros países de nuestro entorno. Por eso,
apoyándome en unas declaraciones
que escuché, y que comparto, del catedrático de la Politécnica de Madrid, Mateo Burgos, realizadas en Onda Madrid,
la DAB amenaza el oligopolio de facto de la industria radiofónica española. No es
fácil asumir que la radio digital permitirá el acceso a este nuevo escenario de
otros operadores que aspirarán a llevarse su parte de la tarta publicitaria. Cuando
le pedí su opinión al respecto, Isaac Moreno contestó: “yo creo que no. Sencillamente, los radiodifusores privados hemos estado
durante quince años en la guerra de la DAB, y estamos convalecientes en la
retaguardia, y tenemos los anticuerpos. Habrá que esperar”. Habrá que
esperar, apunta Moreno. ¿Cuántos años más? ¿Cuántos años más pagando una red en
DAB -el actual veinte por ciento de cobertura en Madrid y Barcelona- para que
nadie la escuche? “Tal vez iniciativas
como las que han tomado en Alemania e Italia de regular la venta de receptores
de radio de manera que todos incorporen al menos una tecnología digital, sea la
IP, sea la DAB, nos ayuden a avanzar hacia otro escenario en el que por lo menos
contemos con un parque de receptores habilitados para captar señales digitales”
-completó Moreno-.
Un momento de la charla en el BIT 2018 |
Todos los actores de esta obra inacabada quieren que el autor escriba claramente, sin titubeos, lo que resta para completar la historia. Pero ese actor ‘oficial’ es el primero que se escaquea
Como le comentaba a Isaac Moreno aquella mañana en el BIT, nunca hasta ahora le ha costado tanto a la industria radiofónica un oyente, porque tiene que llegar a él a través de OM, FM, DAB (DAB+), online, TDT y pronto a través de los altavoces inteligentes y, quién sabe si triunfarán, las gafas de escucha, presentadas en la última edición de Radiodays. El exdirector técnico de Cope asentía. Y añadía: “Es que la traslación al nuevo escenario digital de la DAB, o la DAB+, implica no solo aumentar los costes de los operadores en la nueva implementación de la tecnología digital, sino también el gasto que supone entre los oyentes tener que proveerse de nuevos receptores para captar la nueva señal”. Claro, hay que ser realista, y mirar todos los aspectos que rodean a este proceso. Pero, si no hay clara voluntad de progresar, de ahorrar costes con la DAB –“no es mucho más barata que la FM, pero sí es menos costosa”- no llegaremos nunca a dar el paso.
Lo cierto es que muchos países de
la órbita europea ya cuentan con unas coberturas en DAB cercanas al cien por
cien, y que ya hay fechas planteadas para ir apagando la FM y apostando por la
nueva tecnología DAB. Desde organismos como la UER, o el WordDAB, nos miran
sorprendidos, porque España no participa en sus reuniones y campañas, a ningún nivel,
ni desde la administración, ni como operadores. En la presentación del Foro de la Radio Híbrida, a finales de
2017, que han creado los radiodifusores públicos (RNE) y privados (AERC), que
tuvo lugar en la sede del Ministerio de
Energía, Turismo y Agenda Digital, y que apadrinó el Secretario de Estado para
la Sociedad de la Información y la Agenda
Digital, el santanderino José María
Lasalle, el político no se refirió en ningún momento a la DAB y, que yo
sepa, la FM tiene poco de “Agenda Digital”. A mí aquel acto me provocaba
vergüenza ajena cuando pensaba en los políticos europeos apoyando, con
decisión, la llegada de la DAB y los nuestros desconociendo esa realidad, ni
siquiera mencionándola como objetivo a alcanzar.
Presentación del Foro de la Radio Híbrida en el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital, con el Secretario de Estado, José María Lasalle, el 11 de diciembre de 2017 |
“Es que el cambio a DAB implica no solo aumentar los costes de los operadores, sino también el gasto que supone para los oyentes, que tienen que comprar nuevos receptores"
Seguramente no hay una varita mágica para establecer el mejor sistema de traslación de un escenario a otro, es cierto; de ahí también que, en función del entusiasmo que uno muestre por una u otra tecnología, la digitalización de la radio se ve más o menos cerca. Cuando le planteé a Isaac la aparición de una tarifa plana de datos móviles, siguió subrayando que, de manera indirecta, para escuchar la radio online era obligado pagar, y que la radio por tanto costaba dinero. Cierto. Pero no es el mismo escenario que el de una tarifa con límite de gigas para gastar en datos. El paisaje está, pues, cambiando a marchas forzadas, y lo que es válido para ahora, tal vez sea historia en uno o dos años. La llegada, inminente, de la quinta generación de telefonía móvil -el 5G- ante la que, por cierto, el Gobierno español prepara un ‘tarifazo’, abrirá otras puertas. Para algunos, puede suponer la puntilla definitiva a la DAB. Incluso a la FM, y a la radio por aire. Yo no lo creo. Pero es cierto que dará un impulso a la difusión de contenidos a través de la red, algo que a los radiodifusores no les hace gracia, porque es la red que más les cuesta, como destacaba el propio Isaac Moreno en el BIT Audiovisual, donde también estaban presentes los operadores, sonriendo por su floreciente negocio con la radio (aquí cada uno observa la película desde su sillón…).
Sin embargo, hay un dato del
informe de la UER al que antes me refería que conviene destacar para situarnos
en torno al auténtico consumo de radio online, distribuida a través de la red.
Del total de tiempo de escucha de la radio en España, ¿qué porcentaje se produce
a través de internet? La UER, basándose en el EGM, destaca que entre un 5 y un
6 por ciento (datos de 2016). A pesar del tiempo transcurrido, no puede
esperarse un crecimiento espectacular. Por tanto, conviene relativizar el
consumo de radio online, que es algo superior en el resto de Europa, esto
también es cierto. Pero es muy reducido, todavía.
Isaac Moreno explica y defiende la radio híbrida en el acto de constitución del Foro de la Radio Híbrida |
El paisaje está cambiando a marchas forzadas, y lo que es válido para ahora, tal vez sea historia en uno o dos años
La activación del chip de la FM en los smartphones sí que está llevando a algunos gobiernos a tomar cartas en el asunto, sobre todo después de algunos desastres naturales que han puesto en evidencia que la radio (por aire) es la única que garantiza el servicio en unas circunstancias adversas, mientras que, ante catástrofes, la red es de lo primero que se viene abajo. Así, México, por ejemplo, ha obligado a los fabricantes de smartphones que quieran comercializarlos en su país a que implementen el chip de la FM, y Estados Unidos ha pedido a Apple que active el chip de la FM en sus iPhone. Ambos gobiernos se han dado cuenta de la importancia de la radio como medio de comunicación ante catástrofes o desastres naturales, algo que también reivindica la UNESCO.
La radio sigue siendo atractiva,
al menos para los casi 25 millones de oyentes que registra el EGM, entre los
que, es cierto, hay pocos jóvenes, y sobre todo insuficientes para garantizar
la imprescindible renovación generacional, como apunté al final de mi intervención,
pero el siglo XXI está planteado, o mejor dicho, replanteando, las relaciones
entre los oyentes/usuarios (como les gusta referirse a ellos en Cope) y la radio, que se produce desde muy
diferentes canales, sonoros, visuales y textuales, todos complementarios. De todas formas, si no damos un volantazo, en materia de contenidos, para atraer a nuevos oyentes, nos dará igual la tecnología...
La radio híbrida: lo mejor de dos mundos, la radio por aire y por internet |