¿Podcast versus radio? (I) El audio mejorará nuestra vida
https://www.gorkazumeta.com/2018/04/podcast-versus-radio.html
El autor reflexiona en torno al futuro del audio de
contenidos hablados (I)
Ángel y Fran mostraron sus altavoces,
el de Apple y el de Google. Faltaba Alexa (el de Amazon). Interactuaron con
ellos y el resultado no fue del todo satisfactorio, teniendo en cuenta que, de
momento, estos altavoces, solo hablan en inglés y hay que dirigirse a ellos en
esta lengua para solicitarles contenidos. Los tres ponentes coincidían en que
muy pronto, probablemente este mismo 2018, dispondremos de estos dispositivos
en español, por un precio muy asequible. Y ahí empezará una nueva revolución de
los contenidos sonoros. Ángel Jiménez comentó que las empresas comienzan a
mostrar su interés por estar presentes en ellos con su oferta, aunque existe
todavía mucha incertidumbre sobre su utilización real y el alcance que pueden
llegar a tener. Incluso uno de los estudiantes presentes ponía en cuestión los
beneficios proporcionados por estos altavoces, dudando de ellos, a lo que los
ponentes le retaron a que volvieran a verse dentro de cinco años.
La segunda revolución, liderada por los altavoces
inteligentes, está protagonizada por el audio
- ¿El futuro provocará un enfrentamiento de intereses y demanda entre podcast y radio?
- Una reflexión basada en las II Jornadas de Innovación Audiovisual, organizadas el pasado 22 de marzo en Madrid, por la Fundación Cope y el CEU
El Estudio General de Medios
(EGM) establece que, pese al deseo ferviente de un sector muy interesado en la
evolución del podcast, quienes los consumen habitualmente, son -todavía- muy
pocos. Los cifra en, aproximadamente, 400.000 podcasteros, que los consumen
diariamente. Puede parecer, de entrada, como un número insignificante frente a
los 24 millones de oyentes de radio en España, de lunes a viernes. Puede. Pero
si multiplicamos su consumo habitual semanal (7 podcast, uno por día) por
cuatro semanas (un mes) y por doce meses (un año), la calculadora arroja cifras
de consumo de podcast en España, que superan los 134 millones de
escuchas/descargas, ahora mismo. Y es innegable que el podcast tiene una potencialidad
de crecimiento espectacular.
Pero, a pesar de las cifras y del
futuro, si hacemos una encuesta por la calle, como hemos podido comprobar en
algunos programas de radio, a la pregunta de ¿sabe usted que es un podcast? las respuestas encontradas distan
mucho -muchísimo, insisto, todavía- de ser positivas; muy al contrario, nos
encontramos con una enorme confusión en torno al término, si bien cada vez son
más las personas que lo sitúan correctamente.
María Sáinz, de Laboratorio de Vocento, durante su intervención en el CEU (Fotografía Gorka Zumeta) |
A día de hoy, el principal problema de los altavoces inteligentes se centra en la accesibilidad a los directorios. Hay muchas confusiones todavía
Si la radio es un hábito, los
podcasts también lo serán. Pero hay que fomentarlo. De momento, la radio está
dejando de ser un hábito, sobre todo entre las generaciones más jóvenes -la
brecha es mayor en España que en el resto de Europa, habría que hacerse algunas
preguntas de por qué ocurre así- y los podcasts empiezan a conquistar el
mercado de la ‘radio a la carta’. El
hábito tiene que acompañarse de la accesibilidad. Si resulta complicado acceder
a los contenidos, no hay hábito que se resista la incomodidad. De ahí que la
batalla tecnológica, todavía en mantillas en este sentido, marcará un antes y
un después en este tipo de consumos.
Todavía resulta incómodo consumir
podcast, salvo para los consumidores tecnológicamente avanzados, y poco
perezosos. Si analizamos el tipo de consumo podremos concluir que la llegada de
los altavoces inteligentes, y los sistemas gestionados por la voz humana, van a
resultar esenciales para potenciar el consumo de la ‘radio a la carta’, es decir, del podcast. Hoy en día hay que recurrir
a una App para consumir los podcast de, por ejemplo, Podium Podcast, y no es
inmediato el proceso. Hay que abrir la App, buscar, encontrar, seleccionar y
clicar para escuchar. Frente al ordenador es un proceso similar, partiendo bien
de la propia App, bien de la web. Pero es un proceso mediato, no inmediato.
En este sentido, la mesa redonda que
organizó la Fundación Cope y la Facultad de Humanidades y Comunicación de la Universidad
San Pablo CEU, de Madrid, el pasado 22 de marzo, bajo el título de II Jornadas de
Innovación Radiofónica, sobre el desarrollo de los altavoces inteligentes, fue
muy clarificadora. María Sáinz, del
Laboratorio de Vocento, Ángel Jiménez,
de Cuonda, y el podcaster Fran Izuzquiza,
moderados por el profesor de la UPSA Luis
Miguel Pedrero, charlaron animadamente en torno a estos nuevos dispositivos
que algunas voces ya han llegado en calificar como de “nueva revolución” en el
mundo de la comunicación.
La familia de los tres altavoces inteligentes más extendidos hasta ahora, el HomePad (Apple), Echo (Amazon) y Google Home |
El hábito tiene que acompañarse de la accesibilidad. Si resulta complicado acceder a los contenidos, no hay hábito que se resista la incomodidad
Nuestro espejo sigue siendo
Estados Unidos. Y, en este sentido, Ángel Jiménez, de Cuonda, remataba su
intervención con algunos datos, hacia los que nos dirigimos, como se ha
demostrado en tantos otros campos. Ya hay 55 millones de altavoces inteligentes
vendidos en este país, solo en 2018 se espera que se llegue a los 30 millones.
Las cifras de crecimiento están siendo espectaculares. Del siete por ciento de
hogares americanos ya provistos de un altavoz inteligente, se ha pasado, en
meses prácticamente, a un catorce o quince por ciento. Amazon ha duplicado las
ventas de Echo, su altavoz, con Alexa de interlocutora (el nombre al que hay
que dirigirse). Es el líder de ventas. Y, curiosamente, y ésta es la gran
oportunidad para la radio, lo que más se escucha es la radio, OM y FM (en
Estados Unidos la OM (AM) tiene todavía mucho posicionamiento en el sector).
Son circunstancias, como
subrayaba, muy positivas para la radio, si se sabe colocar en línea de salida,
y aprovechar las oportunidades. ¿Qué ocurre con el podcast? ¿Dónde se sitúa? Ángel
Jiménez destacaba algunos detalles relacionados con los nuevos hábitos surgidos
con la incorporación de los altavoces inteligentes. Al situarse en el salón de
casa, en la mayoría de casos, o en las cocinas, o dormitorios principales, por
este orden, las escuchas son, en un 50 por ciento de los casos, compartidas.
Quiere decirse que esa intimidad que proporciona el podcast cuando se consume
vía auriculares, o en el coche, en nuestros desplazamientos, con los altavoces
inteligentes cambia, porque se abre a más oyentes. Se reduce el tiempo de escucha
de los podcast al disponible cuando nos encontramos en el salón, sería
impensable en este sentido -comentaba Ángel Jiménez- dos horas compartidas de
contenidos proactivos de audio (no música).
Microsoft y Harman Kardon han presentado conjuntamente un altavoz inteligente, cuyo asistente personal de audio es Cortana |
Pero, a día de hoy, y se confía en que se resuelva en breve, el principal problema de los altavoces inteligentes se centra en la accesibilidad a los directorios. Como la solicitud de los contenidos se produce exclusivamente a través de la voz, la interpretación que hace el dispositivo de lo solicitado no siempre coincide con lo demandado. Y sin duda éste es un grave problema, porque existe una baja tolerancia al error. Si solicitamos tres veces un podcast y no atiende nuestra solicitud, es muy probable que no lo volvamos a pedir; con lo que la fuente del podcast habrá perdido una oportunidad, por problemas de la tecnología. Está claro que estos problemas, no lo olvidemos, surgidos en los albores de la historia del altavoz inteligente, se resolverán en su momento.
Ya hay 55 millones de altavoces inteligentes vendidos en EE.UU., solo en 2018 se espera que se llegue a los 30 millones. Las cifras de crecimiento están siendo espectaculares
La tecnología de los altavoces
inteligentes está en su primera fase histórica. Los sistemas de reconocimiento
de voz han avanzado tanto en estos últimos años que las empresas, en este caso
Apple, Google y Amazon, ya pudieron lanzarse a fabricar dispositivos gobernados
solamente a través de la voz. Pero, por ejemplo, el español está provocando
bastantes más problemas a estas marcas que el inglés, o incluso el italiano,
que acaba de adelantarse a nuestra lengua. El problema, en nuestro caso, según
desveló Fran Izuzquiza tiene que ver con la acentuación, que no resulta
sencilla para Alexa y el resto de sus ‘colegas’ inteligentes. Pero, como
coincidían los tres ponentes, esperemos que en 2018 estos tres dispositivos ‘hablen’
español.
Igual que los altavoces
inteligentes constituyen una nueva oportunidad de consumo para la radio que
-otra curiosidad- al ubicarse en el salón de casa, están volviendo a escucharse
colectivamente, como ocurría hace años con la radio; también se está
convirtiendo en una nueva ventana al podcast, y a su difusión. El problema es,
nuevamente, el del comando de invocación; es decir ¿cómo se llama para que la
búsqueda y la localización sea más rápida y eficaz? Los podcasts tienen que readaptarse,
en tiempo y en identificación, para rentabilizar mejor su posicionamiento en
estos dispositivos. Y, en este sentido, en Estados Unidos el campo está mejor
abonado que en España. Un par de datos: 112 millones estadounidenses han escuchado
al menos un podcast en su vida, luego el conocimiento de esta realidad está
mucho más extendido que en España, donde hay, con toda probabilidad, muchos más
consumidores de podcast que no saben que lo que escuchan se llama así... Pero,
veamos ¿cuántos de esos 112 millones son, al final, consumidores habituales?
Los datos, aportados por Ángel Jiménez en su intervención en el CEU señalan que
67 millones de americanos han escuchado un podcast en el último mes.
Evidentemente, está más extendido que en España.
¿Cuáles son los podcasts más
demandados a estos altavoces inteligentes en Estados Unidos? Pues los podcasts
de información general, los que sitúan al oyente, en unos pocos minutos, en la
actualidad del día, y que están producidos por empresas informativas de
renombre, The New York Times, Washington Post, y similares. Una práctica que, poco
a poco, sin prisas, pero también sin pausas, deberán producir nuestros
periódicos, si quieren formar parte de los consumos de podcast mayoritarios a
través de estos dispositivos. El hábito de disponer de la ayuda de Alexa en la
cocina y, durante el desayuno, preguntarle por las noticias del día, el tiempo
o el tráfico, constituirá una costumbre, que irá exiliando progresivamente el
empleo de otros dispositivos no inteligentes, las conocidas radios
convencionales, condenadas a desaparecer, ante la proliferación de estos nuevos
gadgets.
Continúa…