Avance: La evolución del reportaje radiofónico, Severino Donate (SER)
https://www.gorkazumeta.com/2017/12/avance-la-evolucion-del-reportaje.html
Postcast dedicado a este género
El género del reportaje radiofónico ha evolucionado, marcado por las nuevas narrativas del siglo XXI
Es el más completo. El más agradecido de todos cuantos géneros radiofónicos existen, porque, en realidad, los incluye a todos: incluye la información y la entrevista, y puede incluir hasta el radiodrama, por qué no. Y es que las nuevas narrativas del siglo XXI, que seguimos desenvolviendo, asociadas a una nueva generación de periodistas, o creadores, claramente influenciados por el lenguaje sonoro procedente del cine, han sumado en este caso para enriquecer este género que, eso sí, a pesar de la evolución y simplificación tecnológica, sigue siendo el más caro de todos cuantos se producen en la radio, y no precisamente por los recursos técnicos, sino más bien los humanos.
El reportaje radiofónico implica a varias personas en su elaboración, es, como todo en la radio, un trabajo en equipo |
Hacer un reportaje requiere mucho tiempo y esfuerzo. Lo fácil es acudir a una rueda de prensa, sacar un par de cortes, redactar un texto más o menos afortunado, y grabar una pieza de un minuto y medio. Veamos el timing: desplazamiento a la rueda de prensa, veinte minutos; asistencia a la convocatoria, setenta y cinco minutos; regreso a la redacción, veinte minutos; edición y redacción del texto (si no corre prisa) cuarenta minutos y emisión en directo (incluida espera) sesenta minutos. Así se cumple la mañana de un redactor, así todos los días. Pero un reportero es otro estatus.
"Un reportaje radiofónico no es una pieza de dos minutos con tres cortes y una musiquita"
Un reportero elige el tema -o se lo eligen- y debe empezar a investigar las ramificaciones del asunto solicitado. Deberá acudir a diferentes fuentes para completar su trabajo y esto en radio incluye el añadido de la grabación (teléfono o presencial -las notas de audio de WhatsApp han facilitado el trabajo muchísimo-). Una vez recopilado el material, el reportero tiene que trabajar la estructura para que el todo ofrecido sea coherente y, en definitiva, hablando de radio, cuente una historia interesante, siguiendo una estructura clásica -planteamiento, nudo y desenlace- o apostando por fórmulas alternativas, más creativas, y sobre todo menos previsibles por el oyente. Con todo, la última fase, la de la edición, no es baladí, pues el ensamblaje de las piezas del mosaico tiene que resultar perfecto, no solo para trasladar a los oyentes la información recopilada de la mejor manera posible -la más eficaz-, sino también para corresponder al esfuerzo previo realizado. Un reportaje es como el algodón del anuncio: se tiene que notar el trabajo invertido, las fuentes consultadas…
ESTE
MARTES, 12 DE DICIEMBRE, POSTCAST: LA EVOLUCIÓN DEL REPORTAJE RADIOFÓNICO,
SEVERINO DONATE (SER). EL GÉNERO DEL REPORTAJE RADIOFÓNICO HA EVOLUCIONADO,
MARCADO POR LAS NUEVAS NARRATIVAS DEL SIGLO XXI