El PP transige y acepta desmontar el modelo de RTVE que impuso
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El proceso puede sufrir todavía reveses
El PP se encargó de derogar el modelo de consenso establecido por Zapatero en 2006
DIRCOMfidencial.com. Radio Televisión Española (RTVE) comienza este
martes el camino para recuperar “la independencia y el pluralismo en la
elección parlamentaria de sus órganos”, según reza el objetivo que
persigue la proposición de ley auspiciada por el PSOE. El Congreso de
los Diputados ha comenzado a deshacer el actual método de elección
del presidente y del Consejo de Administración de la corporación, que
implantó el PP gracias a la mayoría absoluta obtenida en 2011.
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| Si todo llega a buen puerto, disfrutaremos de una RTVE con un presidente elegido por consenso |
La iniciativa del PSOE secunda la presentada por Ciudadanos
el pasado febrero. Al acuerdo para intentar reducir el poder actual que
goza el Partido Popular en la corporación se han sumado Unidos Podemos,
las formaciones soberanistas. Y, aunque no estaba del todo
garantizado, finalmente también el Partido Popular también ha apoyado
la propuesta, dado que lo contrario hubiese significado el segundo
golpe al Gobierno de Mariano Rajoy en apenas dos semanas.
Los populares han accedido a dar su apoyo sin
contraprestaciones, aunque lo han hecho negando en todo momento la
mayor sobre “los niveles de manipulación y censura intolerables” que
denuncia el PSOE. “La objetividad y la pluralidad están plenamente
garantizada”, ha asegurado un miembro del Partido Popular durante su
intervención en el hemiciclo.
Este discurso sigue la estela del pronunciado por el
presidente de RTVE, José Antonio Sánchez, en su comparecencia
ante la sesión de control parlamentaria, cuando negó la existencia de
“purgas”. “Que en una institución pública del Reino de España en pleno
siglo XXI se consientan purgas me parece aterrador. Me parece gravísimo”, llegó
a ironizar.
La proposición de ley que ha logrado el consenso propone
deshacer la reforma implementada en 2012 para volver al modelo aprobado durante
el gobierno de Zapatero en 2006. De esta forma, se suprime la vía de la
mayoría absoluta para la elección de los cargos y retornar a una mayoría de 2/3
en la Cámara Baja.
Pero superar el trámite de la toma de consideración no
garantiza que vaya a terminar saliendo adelante. Puesto que ahora se
abre un proceso parlamentario cuya culminación no será antes del otoño y
que abre un proceso de introducción de enmiendas parciales en comisión
antes de llevarla a votación. Tampoco garantiza una victoria de la oposición,
ya que durante este proceso pueden aparecer bloqueos por parte del
Partido Popular, que controla un tercio del Congreso.
