Benigno Moreno: “La radio pública debería ser como la Seguridad Social"

Entrevista a Benigno Moreno, exdirector de RNE (II)

“Todos la podemos criticar, pero nos sentimos orgullosos de ella”

•     “Creo en una radio para todos, sin trincheras”
•    “Santiago González se arriesgó conmigo para un puesto de mucha responsabilidad, con un candidato alejado totalmente del perfil de un directivo”
•   “Acepté la Dirección de RNE por responsabilidad y por coherencia con el equipo que había confiado en mí”
•     “La lealtad me parece que es algo imprescindible, no a cualquier precio, pero te permite mirarte al espejo y aguantar esa mirada”
•     “Soy un poco exigente, pero no el que más, ni de manera enfermiza”
•     “Lo más difícil en una dirección es elegir a tu equipo y crear un clima adecuado”
•     “Si esperas enterarte por los que van al despacho a contarte cosas, no te enteras de nada”
•     “Hoy puedo ir con la cabeza alta por los pasillos de la Casa de la Radio"
•    “Hay que crear unos medios públicos útiles para los ciudadanos, de confianza y garantía”

Benigno Moreno, exdirector de RNE y director de 'Ficción Sonora' (RNE)

Continúa…

-¡Y Santiago González te nombró director de Programas de RNE!

-Sí. Él se arriesgó conmigo para un puesto de mucha responsabilidad, con un candidato alejado totalmente del perfil de un directivo, con muchos trabajadores a mi cargo y sin ninguna experiencia de gestión. Yo no puedo decir otra cosa que gracias. Acepté porque me sentía del equipo que tenía que demostrar que se pueden hacer las cosas con criterios profesionales y creo que Santiago González lo demostró con creces.

-Pero ahí no termina la cosa. Javier Pons, director de TVE se marcha y Alberto Oliart (que había sustituido a Luis Fernández en la Presidencia de RTVE), nombra a Santiago González en su puesto. La dirección de RNE se queda vacante y Santiago da tu nombre. Y así llegas a la dirección de RNE. Si dijiste sí a la Dirección de Programas, ¿había que aceptar también la dirección de RNE? ¿Pese a que, en principio, podía tratarse de un puesto más político que técnico?

Benigno Moreno y Santiago González, su valedor

-Yo acepté la Dirección de RNE por responsabilidad y por coherencia con el equipo que había confiado en mí, porque sabíamos el trabajo que se estaba haciendo, pero sobre todo por el proyecto, porque por fin se podía demostrar que en manos de profesionales, con el control adecuado del parlamento, los medios públicos tienen sentido para los ciudadanos. El Presidente Oliart nos citó un sábado en su casa antes de proponer los nuevos nombramientos al Consejo y nos dijo que quería continuar con el proyecto y el mandato de los dos tercios del parlamento, la ley en vigor, etc. Al final de la mañana me pregunta, “¿Qué vas a hacer con Radio Nacional?” Me quedé parado, no entendía la pregunta, no estaba avisado… (Santiago González sí sabía lo que estaba pasando) le contesté que yo no daba el perfil, que en esa silla habían estado profesionales con los que no me podía ni comparar y me contestó, “bueno vale, pero ¿qué vas a hacer con Radio Nacional? Porque Santiago ha dicho que si no eres el director de RNE te quiere en la tele, eso quiere decir que tienes que ser el que continúe con el trabajo”, así que me repitió la pregunta…

Moreno fue el menos 'político'
de los directores de RNE

-¿Y qué le contestaste?

-Sinceramente, Gorka, no recuerdo ni lo que dije. Pero no me pude negar, la lealtad me parece que es algo imprescindible, no a cualquier precio, pero te permite mirarte al espejo y aguantar esa mirada. Yo no empezaba de cero. Formaba parte de un equipo que se forjó en las conversaciones iniciales sobre el modelo de radio que nos parecía adecuado para Radio Nacional y solo pretendí continuar y mejorar en la medida de mis posibilidades ese proyecto con el que me identifico plenamente.

-¿Una radio para todos?

-¡Eso es! Una radio para todos, en la que todo se pregunte y se investigue, pero sin agresividad; no vamos contra nadie, todos se tienen que sentir cómodos, los que hablen y los que escuchen, pero sin contenidos vetados, sin trincheras, con la hoja en blanco cada día, sin unas gafas de un color que nos haga ver e interpretar el mundo con un sesgo previo. Ya sé que hablo de objetividad y que es una quimera, pero dicha objetividad se busca cada día, aunque sea imposible alcanzarla.

-Coincido contigo, Iñaki Gabilondo habla de la “subjetividad honesta”.

-Y por otro lado, también queríamos una radio de vanguardia, para nuevos oyentes conectados, que son presente y futuro, una radio que no ceda en la calidad, ni acepte el me vale todo a cualquier precio, que trabaje los géneros clásicos, pero experimente nuevos formatos. Creo que nada de lo que he dicho es político, y me permito contradecirte…

-…¡por favor!

-…el director de RNE no tiene que ser un cargo más político; a mi manera de ver es un gestor de mucha responsabilidad que finalmente es el último responsable de la parrilla incluyendo directores y presentadores, el responsable del presupuesto y el responsable de la audiencia. Ésa es la medida o balance que se debe hacer de un director, presupuesto, parrilla y resultados. Creo que es el trabajo más complicado que puede hacer un profesional de la Radio como pretendo ser yo. No haré balance de mi gestión, lo tienen que hacer otros, pero conocer y calibrar los parámetros de los que he hablado es muy fácil: son datos públicos y están al alcance de cualquiera.

-Y llega un director a RNE que se autodefine como un ‘perfeccionista’ (¡qué peligro!) ¿eras muy exigente?

-Pues sí que soy un poco exigente, pero no el que más, ni de manera enfermiza. Lo que no soporto es la dejadez; hacerlo mal a veces da el mismo trabajo que hacerlo bien y en cualquier caso creo que somos unos privilegiados, tenemos un trabajo que en ocasiones nos permite disfrutar mucho y además nos pagan los ciudadanos y tenemos que hacer lo mejor de lo que seamos capaces, sin escatimar ni un solo esfuerzo.

En la inauguración de la exposición dedicada a los 75 años de vida de RNE, "la radio de todos"

-¿Qué es lo más difícil al frente de una responsabilidad como ésta?

-Lo más difícil en una dirección es elegir a tu equipo y crear un clima adecuado para que los compañeros que forman las distintas estructuras de la empresa sientan que forman parte de ella, se les tiene en cuenta y perciban que tienen que empujar poniendo sus conocimientos y su talento para alcanzar los objetivos. Una empresa de servicios como la nuestra no funciona con toda su potencialidad si los trabajadores están esperando a ver qué ocurrencia tiene ese día el jefe. Todos tienen que aportar, se decida lo que se decida finalmente.

-¿Y cómo te fue con tu equipo?

-En mi caso no puedo decir otra cosa más que mi equipo fue lo mejor de la etapa; discutimos de todo con muchos malos momentos, como grandes recortes de presupuesto, huelgas, etc. Pero también con otros muy buenos, y cuando se salía del despacho con la decisión tomada había una lealtad total, sin filtraciones interesadas y sin fisuras y quiero dar las gracias por ello. Ser exigente pero argumentando, tomar decisiones con criterio, nombrar a los mejores, no a los seguidistas, todo ello manda mensajes a la plantilla en la línea de crear equipo. Yo, que además tengo muchos amigos dentro de la casa y les conozco bien desde antes de tener ningún cargo, creo que es muy necesario salir del despacho y preguntar mucho y hablar mucho para percibir la realidad de lo que pasa. Si esperas enterarte por los que van al despacho a contarte cosas, no te enteras de nada.

-Y tener permanentemente el despacho abierto y accesible, sin duda. Eres un zamorano, de Benavente, aunque criado en Salamanca, tú mismo reconoces que tienes un carácter un poco seco, que siempre vas de frente y no te andas con tapujos. ¿A veces esto es un problema, sobre todo cuando todo tiene que ser, en un puesto como ése, “políticamente correcto”?

Moreno siempre defendió una
radio pública de todos y para todos

-Tienes razón. No soy precisamente un gracioso, me gusta decir lo que pienso, pero sin agresividad, ni haciendo daño de manera gratuita. De todas maneras, todo se aprende y te tienes que adaptar a las situaciones y sacar las consecuencias. Es verdad que me ha dado algún problema y se me ha podido percibir como frío y rígido, pero he pretendido ser consecuente y he sancionado a amigos o quitado programas que parecían imposibles de quitar o he impedido alguna progresión a gente cercana, precisamente porque se podría percibir como negligente, aunque no lo fuera.

-Esto es muy complicado de gestionar… doloroso en muchas ocasiones…

-Cuando cesas a alguien es muy difícil que te entienda y lo acepte, por muchos argumentos que tengas; y no lo digo de oídas. Hoy puedo ir con la cabeza alta por los pasillos de la Casa de la Radio.

-¿Y crees que ahora estamos en un momento parecido a aquel, en que sólo cabe el consenso para elegir al equipo rector de la radiotelevisión pública? ¿Podría ser una nueva oportunidad, la segunda?

-Ésta sí que es una decisión política y a los hechos hay que remitirse: se hizo una ley por consenso, se modificó dicha ley que es la que ahora está en vigor, nuestros representantes elegidos democráticamente deciden. Cuando visité la BBC para conocer de primera mano ese modelo idealizado desde las aulas de la Facultad, me quedé con una frase que me pareció clave para poder ejercer como medio de comunicación al servicio de los ciudadanos: “Independencia del poder político en la elección de los responsables e independencia económica para no sufrir los chantajes del poder”. Dejemos de pensar en modelos nuevos o justificaciones para dilatar las situaciones; se sabe lo que hay que hacer: si se quiere, se hará; si no se hace es porque no se quiere.

-¿La radiotelevisión pública es del Gobierno o de los españoles? ¿Y tú crees que esto se puede articular con una Corporación ‘independiente’?

-A mí me gusta decir que RTVE debería ser como la Seguridad Social: todo el mundo la puede criticar por mil razones, seguro que se podría mejorar en casi todos los aspectos, pero que no nos la toquen y desde luego a nadie se le pasa por la cabeza quitarla. Es algo indiscutible de nuestro modelo de sociedad y de lo que nos sentimos orgullosos. La democracia se basa en la decisión de los ciudadanos eligiendo a sus representantes y la decisión se fundamenta en experiencias personales e información externa. Creo que está muy clara la importancia de los medios en una democracia.

Un director de RNE que haya
grabado radio... inusual

-¿Cómo has visto el debate de los últimos tiempos en torno a la función que han desarrollado los medios públicos en las recientes elecciones generales: ¿ha sido la adecuada?, ¿se ha informado de manera correcta y completa, o han sido una mera correa de transmisión?

-Los medios tenemos que reflexionar mucho sobre esto, creo que nos va el futuro en ello. Hoy, que tenemos acceso a todos los medios desde el móvil, en cualquier lugar y en cualquier momento, que un ciudadano individual puede ser seguido por millones de personas en sus análisis y valoraciones políticas, no se entendería un medio de comunicación del gobierno. Ni se entiende ni se acepta. El único camino es crear un medio útil para los ciudadanos, de confianza y garantía, que aporte claridad y rigor a la realidad compleja que nos rodea.

Continúa...