EGM, 3ª ola 2016: Desciende la audiencia de la radio tradicional en España

Crónica de urgencia del EGM, 3ª ola 2016 (I) 

La pérdida de otros 353.000 oyentes de la radio española debería constituir un ‘aviso a navegantes’ para toda la industria 

• Onda Cero empieza a rentabilizar el ‘efecto de la Morena’
• El “Hoy por Hoy’ (SER) ha perdido, en un año, 132.000 oyentes, y se queda por debajo de su marca de 3.272.000 de oyentes
• La séptima hora de “Herrera en Cope” le ha acercado al techo de los casi dos millones de oyentes
• En RNE, que ha perdido 209.000 oyentes, sólo ha subido Manolo HH con “España vuelta y vuelta”
• El tramo de la radio española que más oyentes ha perdido es el comprendido entre las 8 y las 9 de la mañana:352.000 oyentes

Como siempre, no todos ganan. Ni los que ganan, ganan tanto como dicen; ni los que pierden se hunden en la miseria. Insisto: un oyente es un tesoro. Y en la tercera ola de 2016 del EGM hay 24.485.000 españoles que escuchan la radio, de lunes a viernes. Y esto es, precisamente, lo que más me preocupa: la tendencia que marca el Estudio General de Medios (EGM), elaborado trimestralmente por la AIMC, en la que se trasluce que los oyentes de radio van descendiendo en cada encuesta. Observemos este cuadro:

OLEADA	EGM 3ª 2015	EGM 1ª 2016	EGM 2ª 2016	EGM 3ª 2016
OYENTES TOTAL	25.004.000	25.208.000	24.838.000	24.485.000
PENETRACION	62,09%	63,5%	62,5%	61,7%

Fuente: EGM 3ª ola 2016

Como dato complementario, hay que añadir que la población total de las tres últimas oleadas era la misma, no ha variado: 39.716.000 españoles mayores de 14 años. Éste, por tanto, es el universo de la encuesta de la AIMC. El universo de la tercera ola de 2015 era ligeramente superior (39.724.000). El caso es que, en esta ola, han desaparecido 353.000 oyentes.

La radio 'tradicional' española empieza a sufrir la 'crisis de los oyentes' (Fotografía Pixabay)

No son buenos datos para la radio española, y no le pongo nombres y apellidos. En este caso, no me interesan. Hablo, genéricamente, de que los españoles cada vez escuchan menos la radio. Algo de lo que el EGM está haciendo una tendencia, porque, después de un pequeño pico en la primera ola de 2016, el resto son pérdidas. Habrá que estar muy atento al EGM de 2017, por si se confirma la tendencia, en cuyo caso, la radio debería hacer algo, si es que la industria es capaz de hacer algo conjuntamente por bien del medio, sin pensar cada uno en sus respectivas cuentas de resultados.

Tradicionalmente, la tercera ola del año -que se corresponde con el comienzo de una nueva Temporada de radio, en este caso la 2016-2017- suele beneficiarse del regreso a la rutina, tras las vacaciones de verano, y de la reanudación del curso político y, consiguientemente, del aumento de consumo de información. Pero también es cierto que en los últimos dos años, esta tendencia también se ha fracturado. La radio ya no llama la atención como hace algunos años. Se está perdiendo la costumbre, el hábito. Los oyentes más ancianos mueren, y no se incorporan nuevos, con lo que el cómputo global de oyentes de radio en España está descendiendo. Y veremos dónde se frena la tendencia, si es que se frena. En todo caso, esto debería constituir un ‘aviso a navegantes’.

Habrá que volver a este punto, y a lo que de negativo representa para la evolución de la audiencia de la radio ‘tradicional’ -podríamos decir- española. El dato no augura buenas perspectivas, desde luego, es evidente. Si la audiencia global desciende, ¿qué consecuencias tiene este descenso para la radio hablada y la radiofórmula musical? Está claro, que ambas descienden igualmente, en distinta proporción, como sí se ha mantenido en los últimos años: la radio musical se sitúa en el 58 por ciento de penetración, y pierde 348.000 oyentes, situándose en los 14.206.000 oyentes; y la radio hablada se mantiene once puntos por debajo que la radiofórmula (47 por ciento), desciende 120.000 oyentes, y suma 11.508.000 oyentes que se muestran fieles a sus programas de radio preferidos, de lunes a viernes.

La inercia de la radio ya no sirve para mantener vivo su esplendor y atractivo (Fotografía Pixabay)

Dicho lo cual, y mostrando mi preocupación por el medio, no tanto por los resultados particulares de las cadenas, nos adentramos en aguas pantanosas. Y utilizo este adjetivo porque, como ocurre siempre, y tal vez nos enseñaron nuestros políticos, cada uno entiende o `cocina’ sus datos como mejor le viene, sin preocuparse de la fidelidad y el respeto a la realidad. Lo que ocurre es que las redes sociales han roto esta manipulación interesada que, en ocasiones, es cierto, no son mentiras, pero sí medias verdades. ¿Qué ha ocurrido en la radio española, según la foto finish de la tercera encuesta del EGM del año 2016?

Vamos por partes. No voy a volver a insistir en los grandes titulares que ya hemos podido leer todos, y que hablan de pérdidas repartidas por todas las grandes cadenas, unas más que otras; pero sí recordar que las pérdidas se generan porque la ‘tarta de oyentes’ ha descendido, como hemos visto, y también por los propios méritos de estas cadenas. Pero ésta última no es la única razón que explica estos números rojos que, en las casas a las que han llegado, ya estarán analizando con lupa. Influyen también otras circunstancias relativas a las características del trabajo de campo, a su localización y a los encuestados, que varían.

La cadena SER sigue perdiendo oyentes, es cierto. Pero mantiene todavía una holgada diferencia con el segundo -la Cadena Cope- que en este caso también ha perdido oyentes. Pero los datos más sangrantes en esta ola corresponden a RNE que se ha dejado por el camino nada menos que 209.000 oyentes. Si ésta es la cruz de la moneda, en la cara se sitúa en el último trimestre del año Onda Cero, que ha sumado 163.000 nuevos oyentes, y empieza a remontar. Está claro que empieza a rentabilizar el ‘efecto de la Morena”. Así queda el ranquin:

CADENA	CADENA SER	CADENA COPE	ONDA CERO	RNE
OYENTES TOTAL	4.267.000	2.631.000	2.012.000	1.208.000
PENETRACION	37,1%	22,9%	17,5%	10,5%
RESULTADOS	-86.000	-35.000	163.000	-209.000

Fuente: EGM, 3ª ola 2016

Una primera observación que me sugieren estos datos, sobre todo el de la diferencia de penetración entre Cope y Onda Cero. Sólo quiero lanzar una pregunta para la reflexión: ¿merece la pena realmente, sólo por un 5,4 por ciento más de penetración favorable a la cadena de los obispos, frente a la cadena de Atresmedia, meterse en costes millonarios como la nómina de Herrera, el equipo de deportes y el alquiler de las emisoras a Punto Radio? Ahí lo dejo, subrayando simplemente que Onda Cero ganó doce millones de euros tras la salida de Carlos Herrera y que Cope perdió en 2015 más de dos millones de euros. A veces el EGM no lo es todo.

Fernando Giménez Barriocanal, máximo responsable de la Cadena Cope (Fotografía COPE.es)

Podemos ahondar en las heridas de los números rojos. Si esas pérdidas que acabo de señalar en rojo, se trasladaran al escenario interanual, la cadena que más pérdidas ha acumulado en un año ha sido la SER, seguida de RNE y de Cope. Es decir, dicho de otra manera, la única que cierra el año con crecimiento neto es Onda Cero, pero, claro, la cadena verde partía de lo que partía…

CADENA	CADENA SER	CADENA COPE	ONDA CERO	RNE
OYENTES TOTAL	4.267.000	2.631.000	2.012.000	1.208.000
RESULTADOS	-245.000	-40.000	66.000	-82.000

Fuente: Diferencia EGM 3ª ola 2015-3ª ola 2016

En lo que respecta al resto de cadenas, privadas y autonómicas, la catalana RAC1 sigue liderando la audiencia tras las grandes cadenas nacionales. En esta ola ha obtenido 811.000 oyentes, que no está nada mal, ha ganado 41.000 oyentes en la ola, pero ha perdido 49.000 en el interanual. Su principal competidora, Catalunya Radio, ha reunido en este trimestre a 573.000 oyentes, 31.000 más que en la ola anterior; aunque en el interanual, la autonómica catalana ha perdido 88.000 oyentes.

El resto de autonómicas se mueven por cifras bastante inferiores a las de Catalunya Radio, siguiendo por Canal Sur Radio y Radio Euskadi y terminando con Radio Principado de Asturias, con 9.000, que encima se ha dejado mil en esta ola. Insisto con algunas autonómicas, marcadas por el control gubernamental, y el escaso relieve y resultados de audiencia, en calcular la ratio de rentabilidad, establecida en proporción al presupuesto público invertido y el número de oyentes contabilizado por el EGM, lo que nos daría, además, cuánto le cuesta a cada emisora autonómica un oyente. El dato sería demoledor. Un dato más: el índice de penetración de la radio balear, IB3, con respecto a su población, es de un 4,5 por ciento, con 40.000 oyentes sobre casi 870.000 habitantes. Y no digo más…

El equipo de RAC 1 toma las calles de Catalunya

Vamos con los grandes programas de la mañana, el prime time de la radio. El “Hoy por Hoy” de la cadena SER sigue liderando esta franja matinal, pero con serias pérdidas, y no me refiero a las puntuales de esta ola (-23.000 oyentes), sino al dato interanual, que es mucho más rotundo: 132.000 oyentes menos. Es que si lo comparásemos con la primera ola de este mismo año, las pérdidas ascenderían a 367.000 oyentes. Su gran diferencia en apoyos es lo que tranquiliza al trasatlántico de la SER, pero estoy seguro de que están haciendo una disección por tramos horarios para ver dónde puede concentrarse el desinterés de los oyentes. Donde acumulan más pérdidas de oyentes es en el segundo tramo, el de magacine, en esta ocasión (-48.000 oyentes de 10:00 a 11:00 horas) y, más grave aún, entre las 12:00 y las 13:00 horas (-95.000), hora que se subdivide en dos medias horas, de cadena y local/regional. La radio de proximidad no le ha salido muy bien parada a la SER en esta ola, en general.

Vayamos con el maestro Herrera. “Herrera en Cope” ha crecido, como suponía (122.000 oyentes), y el ‘efecto Herrera’ sigue tirando del carro de la cadena de los obispos, que ha tenido un pequeño tropiezo en su cifra global de oyentes. Efectivamente, como suponía, la nueva hora, de 12:00 a 13:00 horas, recién incorporada, y cuya resolución ya he criticado en esta misma web, ha sido estratégica y casi premonitoria, hasta el punto de que, a esa hora, Cope concentra el 58,1 por ciento de la audiencia de radio hablada del país, lo que en cifras se cuantifica en la nada despreciable cifra de 173.000 oyentes nuevos, que se suman a los 298.000 que ya estaban, cuando la SER -su principal competidor, y el espejo permanente en que se mira- como hemos visto en el párrafo anterior, se desinfla un poco. De hecho esa hora es la que más audiencia ha atraído del programa. He criticado el fraude que supone no contar con Herrera en una hora de programa que lleva su apellido, pero ahora debo reconocer que el resumen de ‘lo mejor de lo mejor’ del programa ha conseguido atraer a 471.000 oyentes en ese tramo. ¿Las cifras de Herrera son tan magníficas? Indiscutiblemente son buenas, pero no ‘magníficas’: el crecimiento interanual del programa es de sólo 66.000 oyentes. Su crecimiento fue bestial en el primer EGM, nada más llegar, pero luego se ha ido desinflando un poco. Ahora recupera fuerza, cómo no.

El programa matinal de Onda Cero, comandado por Carlos Alsina y Juanra Lucas, se encuentra a 884.000 oyentes de la última marca de Carlos Herrera. Y ha sufrido un bajón de 28.000 oyentes que se han ido y que sitúan los apoyos del programa en 1.187.000 oyentes. En el interanual, han perdido 79.000. En cuanto al ritmo de crecimiento, han tenido un mejor comportamiento las horas correspondientes al magacine, frente al tramo informativo. Y hay un dato un tanto inexplicable, porque afecta a toda la radio hablada, entre las 8 y las 9 de la mañana, que ha sufrido un descenso generalizado de 352.000 oyentes (menos en la SER), de los que Alsina tenía 106.000, que ha perdido. Una idea, que ya sé que no comparten en Onda Cero, pero estarían en su derecho: si aumentaran en media hora el programa, hasta las 13:00 horas, sumarían miles de nuevos oyentes. Estarían en su derecho, insisto, en el actual escenario del EGM en que se mueve la radio ‘tradicional’ española.

Manolo HH

Alfredo Menéndez, RNE, probó las mieles del millón de oyentes, y se los fue dejando, en sucesivas oleadas. La progresión ascendente terminó por tornarse descendente, y en ella se encuentra sumido ahora mismo. Las pérdidas de la mañana, sangrantes, se concentran en el tramo informativo, más que en el del magacine. En el tramo que antes mencionaba, de 8:00 a 9:00 “Las mañanas de RNE” se dejan 125.000 oyentes, mientras que en el segundo tramo del programa llega incluso a mejorar marcas (45.000 oyentes más de 10:00 a 11:00 horas). En todo caso, lejos ya de ese millón de la primera ola de 2016, el programa de Menéndez se sitúa en los 844.000 oyentes. Por eso, en este contexto adverso para la radio pública, en la que ha decepcionado a 209.000 oyentes, y todos sus programas han perdido apoyos, el dato de crecimiento de “España vuelta y vuelta”, de Manolo HH (12:00-13:00 horas), tiene más mérito, porque ha crecido 14.000 oyentes, y se ha situado en los 184.000. Recordemos que Manolo HH fue quien lideró "Las Mañanas de RNE" hace algunos años (2012) con valores semejantes a los Menéndez.

Continúa…