Sergi Mas: “Nadie ha podido con la radio, ni podrá con ella”

ENTREVISTA A SERGI MAS "persona, comunicador, periodista, padre, amigo” (I) 

“Los programas son zapatos y las emisoras zapaterías” 

• “España es un país de etiquetas”
• “Una de las razones del éxito de un programa es que los programadores no se metan en contenidos”
• “Creo que "Arús con leche” fue el primer programa matinal donde se trataba de forma irónica la actualidad”
• “Yo iba a ser el primer presentador de ‘Zapeando’, pero me decidí por la oferta de M80 que me llegó una semana antes, porque pensé que la radio era más estable”

Sergi Mas es un tipo que ha mamado radio desde la infancia. Un tipo que creció con la radio muy cerca y escuchaba, en los programas infantiles de la SER, a un Juan de Toro, todoterreno, que presentaba “123, Bimbo otra vez”. Fue creciendo y amando la radio Más y Más, hasta hacerla parte de su vida, hasta vivir de ella y, al tiempo, disfrutar con ella. Sergi Mas es uno de los grandes nombres de la radio española; nombres que la han hecho crecer, y avanzar. Aunque no figure entre los primeros espadas, Sergi Mas les ha hecho brillar más a cuantos le han tenido como (brillante) colaborador. Su conocimiento del medio, su trayectoria (en radio, y en televisión), su pericia (es su propio realizador desde su estudio de radio doméstico), su proverbial sentido del humor, su sentido de la oportunidad (se adapta como un guante a todo tipo de situaciones) y su originalidad en sus planteamientos son sus mejores tarjetas de presentación. De los muchos programas a los que se asocia su nombre, hay uno especialmente -“Arús con leche”- que constituyó un auténtico hito en los mornings shows que nacieron en España a principios de los noventa, un modelo a seguir, del que son herederos todos los despertadores matinales de las cadenas musicales españolas. Por eso, en esa constante búsqueda de invitados que puedan aportar su conocimiento y experiencia sobre la radio -objetivo permanente de esta web- contar con la aportación de Sergi Mas es un regalo, que hago extensivo a todos ustedes…

Sergi Mas siempre ha tenido cara de pillín...

-He leído en la Wikipedia que te define como “actor, cómico y periodista español”. Lo primero: ¿son oficios ‘compatibles’? ¿El periodismo se lleva bien con la comicidad o deben ser como el aceite y el agua?

-Para empezar, lo que pone en la Wikipedia no lo controlo, como mucha gente, ni sé quién lo ha escrito. Pero vamos, si la tuviera que escribir yo, pondría, por este orden: persona, comunicador, periodista, padre, amigo.  Pero tras tantos años (tengo 52 y sumo… sumo… ya 33 currando; empecé a los diecinueve a cobrar, no a trabajar en esto) al final lo que haces es comunicar cosas. En diferentes medios, en diferentes tonos, en diferentes formatos… 

"Tengo 52 años y sumo ya 33 currando; empecé a los 19 a cobrar, no a trabajar"

-Y el periodismo y la comicidad, ¿cómo se llevan?

-Pues, para los tiempos que corren, empiezan a ser cosas parecidas. No quisiera equiparar periodismo y Twitter, ni muchísimo menos, aunque existen cuentas que están asociadas, pero lees según qué cosas y… 

-…te entran los siete males, sí! Tu trayectoria profesional es casi trepidante, Sergi: televisión, prensa, radio, incluso voz de un videojuego… No te voy a pedir que me digas ¿cuál es tu preferido? (aunque lo intuyo), pero sí que me defiendas la radio: ¿Por qué la radio?

-La radio es la mejor.

Sergi Mas, un comunicador

-¡Intuía bien!

-Con ésta frase, Gorka, acabaría la respuesta. Pero quiero añadir que la radio es el mejor instrumento y, sobre todo, el más directo, el más sincero, el más libre, el más arriesgado, el más pasional y a la vez el más íntimo, el más emotivo y el más novedoso.  Ni el video mató a la estrella de la radio en los ochenta, ni la proliferación de las cadenas y ofertas de la televisión, ni las redes sociales… Al final nadie ha podido, NI PODRÁ, con ella. 

-Totalmente de acuerdo, aunque hay amenazas.

-Es que la radio es la mejor, porque la idea que existe en tu cerebro va directa a la emisión. No hay más filtros, no hay más intermediarios. A lo sumo, un técnico de sonido que suma: con una música, una sintonía concreta, con un efecto o con otra cosa. Pero la radio es el instrumento actual más directo entre emisor y receptor. De tu cerebro va a la antena.  

-Sí, la televisión es otra cosa.

-En televisión, la idea que tienes en tu cabeza tiene que atravesar las diferentes capas de la cebolla que requiere este medio: un iluminador, un técnico de sonido, un realizador y la cámara con la que va a acabar pinchando mi frase, un decorador que me envolverá en un espacio para emitirla. Divertida, entretenida, pero tu idea puede cambiar totalmente el sentido en función de cada una de las capas por las que va pasando.  Está claro que la radio gana por goleada. No hay color. 

Jorge Salvador es hoy uno de los 'capos'
del entertainment en televisión, pero
nació en la radio (ahora en "El Hormiguero")

-¡Ni falta que le hace! Tal vez, por su trascendencia, lo más llamativo de tu trabajo fue tu tiempo en “El Hormiguero” (ahí está tu relación, histórica, con Jorge Salvador, desde ‘Arús con Leche’), “El Informal”, ‘Zapeando” y en Catalunya “Polonia”, donde bordabas la imitación al President Montilla. Esto en TV, pero en radio, me gustaría referirme al “Arús con Leche”, en M80, que hacíais desde Radio Barcelona (SER) por lo que supuso para la historia reciente de la radio musical en España, que todavía sigue viviendo del morning. Si te pido un recuerdo de esos años, con Alfonso Arús, ¿qué te viene a la cabeza?

-Como te decía, apreciado Gorka, ya llevo unos años en esto y tienes la sensación (sólo sensación) de que tu valía profesional suele ser equiparable a la última cosa que has hecho. Me decía un día el gran José María Iñigo: “Tú vales lo que has hecho en tu último programa”.

-Frase muy conocida, y reconocida, de ese gran referente que sigue siendo Íñigo.

-Pues el gran Iñigo tiene mucha parte de razón, pero creo que no toda. Para el gran público, el que lee titulares gordos de prensa, también para el directivo de radio que ficha colaboradores/as en función de su número de followers en redes sociales puede ser; pero hay otra parte de la gente que recuerda, como tú haces, un trabajo anterior. Y eso es agradable. En España todo aquel que supere los cincuenta años ya es un viejo o un “bah… otra vez éste”.  En Estados Unidos la edad suma; aquí resta.  

El filtro al que somete Sergi Mas la realidad es el del humor

-También el error, en Estados Unidos, se valora mucho más que aquí, porque implica riesgo, el que es difícil que se asuma aquí, por miedo, precisamente. Todos tenemos un pasado, Sergi, más corto o más largo, pero cuando tienes a alguien delante al que quieres entrevistar, mis ‘mayores’, me recomendaron averiguar lo más posible de quien tienes enfrente, sobre todo por respeto y, en mi caso, si me permites, también admiración.

-Gracias, Gorka. Pues estoy orgulloso de muchas cosas. De “Arús con leche”, por ejemplo: mira que ese morning duró ocho años (del 86 al 94) y hoy en día todavía me recuerdan ese programa, y ya han pasado más de veintidós años desde que acabó. ¿Son muchos para un programa de radio, no te parece? 

-Si fuera gallego, te respondería ‘depende’. Si me hablas de radio, todavía quedan oyentes, entonces jóvenes, hoy no tanto, que lo escucharon todos los días por la mañana cuando iban a trabajar, y eso -insisto- en radio, cala mucho…

"Jorge Salvador fue el primer técnico de radio que tenía voz y hablaba y el primero que incorporó los cortes de televisión" 

-Creo que fue el primer programa matinal donde se trataba de forma irónica la actualidad. El primero en hacer imitaciones relacionadas con el día a día. Jorge Salvador fue el primer técnico de radio que tenía voz y hablaba y el primero que incorporó los cortes de televisión. Y después han venido chiquicientos mil. El primero en colocar un ordenador en un control para buscar rápidamente cortes, chistes y sintonías… Después han venido muchas cosas, de las que alguna te sientes feliz, otras orgulloso, otras indiferente… Es como el zapatero que recuerda una marca concreta de zapatos que lanzó en un año determinado. Unos fueron un fracaso, otros funcionaron bien… Los programas somos zapatos y las emisoras zapaterías.  Yo miro unas declaraciones en televisión y en función de los capuchones de las emisoras de radio que acompañan unas declaraciones te puedo decir de qué año es esa rueda de prensa. Emisoras que cierran, que las cierran, que se venden… 

Anna Simón y Florentino Fernández, Flo, con quienes
también trabajó Sergi Mas en el programa "Así nos va"

-¿El caso de “El Hormiguero”?

-En “El Hormiguero” estuve un año, y muy bien. Fue una delicia trabajar con Pablo Motos. El ‘Así nos va’ de la Sexta fue una suerte trabajar con Florentino Fernández (todos deberíamos tener al lado un Flo en nuestro trabajo), colaborar con Anna Simón fue un regalo; estuve en ‘El Informal’ de Telecinco durante el verano de 1999… Te contaré un secreto: yo tenía que ser el primer presentador de ‘Zapeando’, pero la semana anterior me llegó una propuesta para hacer el Morning de M80… y por respeto al primero que llamó y, aunque no firmé nada, di mi palabra y al final escogí la radio, porque además pensé que la radio era más estable… Jajajaja.

-¡Pues vaya! Precisamente largo no fue tu camino en las mañanas de M80…

-En fin… Como ves, muchas batallitas.  Hay muchas formas de hacer periodismo; y una es plasmarlo en forma de gags. Y eso es lo que se hace en ’Polónia’, de TV3. Por mi parecido físico a Montilla estuve los 4 años de su mandato imitándolo, semana a semana. Y sí: fue divertido, con cientos de anécdotas y el cariño de la gente que lo ve. Al final te quedas con eso. En fin, y yo he hecho muchas cosas (y muchas son muchas) en televisión, como el “Fent amics”, en TV3, y también en radio, tanto a nivel nacional como a nivel local. Orgulloso y contentísimo de haber hecho programas de deporte y de entretenimiento en Catalunya durante años como “Mas esports”… en fin. Que la vida continúa a los 52… 

-¡Por supuesto, Sergi! Nadie tiene la varita mágica a la hora de elegir los ‘condimentos de un programa para que logre el éxito’ (sea en radio o en TV), pero, por tu experiencia, ¿cuáles crees que son elementos imprescindibles?

De su paso por M80 Radio

-En efecto Gorka. No la tiene nadie. Éxito es, sobre todo, dejar trabajar a los directores y realizadores. Y que los directores y programadores no opinen y no se metan en contenidos. ¿Tú estás convencido de fichar a alguien?  Lo fichas y, al menos en radio, lo aguantas un año. En ocho años de ‘Arús con leche” jamás (y esto te pido que lo pongas en mayúsculas: JAMÁS) hubo una sola reunión de contenidos donde Josep María Martí hablara con nosotros. Jamás.  Y servidor en cuatro años que hice un programa de deportes de dos horas al día en COM Ràdio (ahora por desgracia ya no existe) que se llamaba “Mas Esports”, y jamás (de nuevo en mayúsculas: JAMÁS) me reuní con el director, el amigo Francesc Triola, para hablar de contenidos. Desde luego, tenía carta blanca para abrir programa con Barça, Espanyol, Hockey sobre patines, deporte femenino, hacer los editoriales que me daba la gana… Jamás. Calla, que el éxito no venga por ahí. 

-¿Participaste también en el equipo de otro programa de la SER, “La Ventana”, que hizo grande Xavier Sardá? Cuando la radio abría una nueva etapa -donde desaparecían los realizadores, los locutores y los ¡guionistas! este programa recuperó este oficio… que afortunadamente no se ha perdido, pero con diferente efecto en la etapa de Sardá, y en la etapa de Gemma Nierga.

"Tengo mucha mili hecha en la radio"

-Participé, pero no con Sardá, sino con Gemma, que heredó el programa tras la marcha de Xavier a Telecinco, para hacer “Crónicas Marcianas”. Estuve con ella las dos primeras temporadas. Gemma venía de hacer exitosamente el “Hablar por hablar” y Daniel Gavela confió en ella. Y ella en mí. Como en aquella casa los informativos suelen llamarse por Horas (14, 20, 25) al mío le puse ‘Hora 17’. Y tras el boleto de las cinco era un informativo en el que yo me cocinaba mi propio espacio con guión, cortes, entrevistas, parodias… En fin. Toda una mili. 

En su tiempo en COM Radio

-Por cierto, ¿te hubiera gustado ser el ‘Señor Casamajor’?

-Bueno, ¿por qué no?  Durante unos cuantos años en Catalunya fui en radio y en televisión el alter-ego (el imitador, vaya) del que fuera editor y Presidente de Planeta José Manuel Lara, un viejete simpático, agradable y con una personalidad muy concreta. Alguna cosa tendría cuando en programas que hablaban del Barça siempre salía, año tras año, como personaje más votado y valorado por la audiencia. 

-¿Cómo se hace para escribir para otra persona -el director y presentador del programa- y que leído por él, parezca que lo dice él, en lugar del guionista? Tal vez, el ejemplo culmen de la historia de la radiodifusión española contemporánea sea el equipo de guionistas de Luis del Olmo, sin los que nunca hubiera llegado a ser nada el presentador leonés…

-Mira… Es curioso. Pero yo jamás he escrito nada para otra persona. ¡Vaya, otra vez ‘jamás’! Y yo creo que Luis del Olmo acertó en tocar esa tecla. Entiendo que el inventor de la tertulia en la radio española (está claro que fue él) precisara de ciertas pautas para conducir y reconducir algunas partes de su programa.  No puedes hacer un programa de radio de seis horas con sólo un DIN-A4…

-…salvo que te llames, perdona, Iñaki Gabilondo.

-Esa es una excepción. Pero volviendo a Luis, su habilidad en solicitar (y recuperar) guionistas para el género magacine (y no sólo para el género del teatro radiofónico) está fuera de toda duda. 

Iñaki Gabilondo y Luis del Olmo, dos
caminos diferentes, unidos por la radio

-Volvamos al humor en la radio. Antes lo nombraba, Iñaki dice que “introducir el humor en la radio es de lo más complicado, porque hay tantos tipos de humor -casi- como españoles…”. ¿Coincides con él?

-Es fácil coincidir con Iñaki. O lo que es lo mismo: es muy difícil no coincidir con él cuando habla del oficio. Once años después (su ‘Hoy por hoy’ lo dejó en 2005, todo va muy rápido) todavía echo en falta su voz por las mañanas. Y sí, es cierto: hay muchos tipos de humor, hay muchos tamices, hay demasiadas capas y somos demasiado especiales. Puedes estar muchos años haciendo humor, o entretenimiento, y un día haces un comentario, un chiste, un no sé qué… y a esa persona que le encantabas, desde ese momento le has caído en desgracia para siempre.  Y como somos un país de etiquetas, eso ya no te lo quita nadie. También quienes trabajamos con el humor deberíamos cada día hacer el ejercicio de que es imposible gustar a alguien al que de entrada no le gustas. Es muy difícil hacer humor. Mucho. 

Continúa…