Guillermo Orduna: “La radio debe hacer suyo lo digital"
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ENTREVISTA
CON GUILLERMO ORDUNA (y II)
“La radio no es sólo un medio informativo, también es una gran
acompañante”
Continúa…
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| Guillermo Orduna (izquierda, arriba) posa con sus compañeros del "Diario de la tarde" (2000) |
-Es
la gran pregunta para la que no hay una respuesta hasta que esas nuevas formas
lleguen a la antena. Siempre que se innova se elimina algo para sustituirlo por
otra cosa y generalmente hay conflicto en la audiencia, como ocurrió cuando
fueron muriendo los programas dramáticos o los concursos desaparecieron de las
emisiones.
-¿Entonces crees que la
radio debe trabajar por devolverle la ilusión por el medio al oyente?
-Totalmente.
Lo que creo es que tenemos que buscar nuevos formatos que ilusionen al oyente,
que le hagan esclavo de una cita con la radio, que ahora solo existen en
determinados espacios informativos y como cierta rutina en la que cada uno oye
la radio a esa hora cómoda a la que está acostumbrado, pero no tenemos citas
con ningún Loco de la Colina a las
doce de la noche, ni con ningún programa o voz concreta que nos atrape. Al
menos yo no las tengo.
-¿Internet nos puede aportar ideas, nuevos caminos?
-¡Sí, sí!
Fíjate por ejemplo en el fenómeno de los Youtubers. Es el invento más simple del mundo: un tipo que habla frente a una
cámara de lo que le da la gana. Pero lo hace con garra, con gracia
y utilizando los resortes comunicativos que tiene con habilidad. Quien
ponga en práctica algo así en la radio, quizá está abriendo una nueva era.
A veces lo más simple es lo más innovador.
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| Uno de los antiguos estudios de RNE, de los que solo queda la mesa de mezclas |
-Esta frase: “a veces
es preferible un contenido escaso bien realizado y que, al menos en su
vertiente estética alcance los niveles deseados. ¿Significa esto dar más
importancia en la radio al continente que al contenido? Personalmente, le
concedo la misma” ¿eres consciente
de que rompe muchos moldes? Durante mucho tiempo, y en las mismas
facultades, se ha dado prioridad al mensaje, y no al envoltorio del mensaje. En
el caso de la radio, tú sitúas estos conceptos a la misma altura.
-Sí, porque la radio no es solo un medio informativo. Es también una
gran acompañante de personas solas, de horas de trabajo, de viaje. El oyente
busca información y contenido pero ése no puede ser el cien por cien del tiempo
de la radio, 24 horas al día. Creo que una radio bien hecha, con la estética y
el sonido cuidado, debe ir por delante y por detrás de todos los contenidos y,
en todo caso, una mala realización, una mala utilización del lenguaje de los
sonidos, puede arruinar la noticia más sensacional y la idea más genial.
-De ahí que la siguiente
frase que destaco, conectada con la anterior, dice: “un reportaje para la
radio debe concebirse narrativamente desde el sonido, no a partir de un texto”.
¿Un reportaje en radio sin sonidos está
cojo, en tu opinión?
-Siempre que no se fuerce la presencia del sonido, sí, porque también
podríamos caer en cierta ridiculez sonora. La inclusión del sonido debe ser muy
intuitiva, muy equilibrada, nunca excesiva, pero sí que me atrevo a decir que
un reportaje en la radio sin sonido difícilmente lo podemos calificar como tal.
Si no tenemos sonidos para construir un reportaje radiofónico, una de dos, o no
lo hemos trabajado adecuadamente o el argumento no es radiofónico, con lo
cual podremos construir una noticia simple o una crónica.
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| Guillermo Orduna |
-Pero, ¿todas las realidades son ‘traducibles’ en
términos sonoros, no? Hay que buscarlo… claro, y supone un esfuerzo.
-Estoy de
acuerdo, creo que cualquier contenido aporta sonido, aunque sea el sonido
de las palabras que nos permitan suministrar dos líneas sonoras al reportaje,
la narración y la intervención de protagonistas o voces informativas
sobre la cuestión de que se trate. Lo que sí es importante es que, quien va a
construir un reportaje para la radio, no empiece escribiendo, sino escuchando
el material sonoro del que dispone y a partir de ahí añadir el texto, o no
añadirlo. Se puede hacer una pieza radiofónica solo con sonidos, pero no se
puede hacer solo con un simple texto leído.
-No me resisto a caer en
el tópico, pero quiero tu opinión, referida en concreto a la radio: ¿oficio o profesión? Porque tú mismo
reconoces: “cuántos buenos periodistas han fracasado ante un micrófono
después de llevar años ejerciendo la profesión en medios escritos, por la
imprudencia de ellos o de los responsables de una emisora que les han colocado
al frente de la conducción o dirección de programas, sin conocer los códigos y
peculiaridades del oficio de la
radio”.
-No creo en una ni en otra respuesta
infaliblemente. También ha habido casos de periodistas que han aterrizado en la
radio con mucha fortuna; que tenían un "ángel" radiofónico que ha
producido sus efectos inmediatos. Lo que sí creo es que el oficio en la radio
es imprescindible, como en la prensa y cualquier medio. Me sigue
gustando la idea del "aprendiz" que se va haciendo a sí mismo
escuchando y observando cómo trabajan los demás, pienso que sigue siendo muy
válida en ese oficio como en muchos otros. No creo que nadie haga pasteles
ricos si no ha visto cómo lo hacen los maestros.
-Y
llega la radio online, el nuevo paradigma. Dices: “con la
irrupción de la radio en internet, ésta pasa a ser un medio multimedia como los
demás, pero debe diferenciarse de ellos fundamentando su contenidos en el
sonido”. Y luego te encuentras con que los ‘directores de las webs’
reconocen, en público, que “el audio no
vende”, que se clican más los videos o las fotos que los podcast. ¿Una
reflexión? ¿También hay que ser hombre de radio para ‘vender’ bien tu producto?
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| Orduna dirigiendo el "Diario de las 2' (RNE) en los años 80 |
-Creo que
sí. Muy recientemente hubo un gran momento radiofónico, cuando dos políticos de
la vieja y la nueva era coincidieron en el micrófono de RNE
(me refiero a Celia Villalobos y Pablo Iglesias). La polémica que
aprovechó muy bien Alfredo Menéndez
fue difundida inmediatamente por todos los medios (tv, webs, incluso otras
emisoras) y en cambio la web de la emisora que lo produjo le daba menos relieve
que los demás medios. No creo que haya habido en este caso mucha visión
radiofónica...
-Otra frase, con mucha
enjundia: “¿Ha perdido la radio esa facultad de ser el medio más rápido? La
respuesta es que sí. Lo que no ha perdido es la característica de ser el medio
capaz de ser recibido antes por la naturaleza misma de su modo de transmitir y
de ser recibida. La radio es audio y por tanto la simplicidad en el proceso de
transmisión-recepción sigue existiendo”. ¿Cómo crees que se está adaptando
la radio al nuevo entorno online? ¿Cuáles son tus impresiones?
-Creo que es
el gran reto. Frente al nuevo marco digital, la radio tiene que ofrecer valores
añadidos que no pueden dar las páginas web. Podría intensificar las formas de
participación en la que ha sido medio pionera, quizá a través de internet con
encuestas, concursos, quizá utilizando mensajes de voz. Pero sobre todo no debe
enfrentarse a lo digital sino hacerlo suyo, integrando sus posibilidades,
tendría que subrayar más la información, demasiado dispersa en los contenidos y
desde luego ganando en credibilidad y buscando nuevas formas de presentar la
información.
-Antes de concluir, me
gustaría provocarte una reflexión en torno al futuro del medio. La radio se encuentra en un proceso de
reconversión de analógico a digital, con muchos inconvenientes para atraer a
las generaciones más jóvenes, que ven este medio como algo ajeno a ellos, los
actuales oyentes (sobre todo los de las Ondas Medias) están desapareciendo
(muriéndose), la radio está entrando irremisiblemente –como dices- en la
rutina, la concurrencia de medios online, multifacéticos (prensa, radio,
televisión entremezclados) contribuye a distorsionar la esencia del medio
radio, o definitivamente a perderla… ¿Y
sin embargo, hay algo positivo…?.
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| Corrigiendo el guión antes de entrar en directo |
-Si a pesar
del aluvión digital, de la irrupción de internet y de la tv, la radio ha
sobrevivido; esto nos lleva a pensar que se va a mantener, sin duda. Lo que sí
creo que sería necesario es que quienes pretendan vivir para y de la radio, se
estrujen los sesos para descubrir, si no grandes y nuevos formatos, la mejor
manera de mantener el buen estilo de hacer radio cada día, de innovar un
poquito, porque a veces los grandes hallazgos llegan de la casualidad o de la
experimentación cotidiana. Hacen falta apuestas valientes que impidan que todas
las emisoras hagan lo mismo a las mismas horas. ¿Por qué cuando hay futbol el
oyente al que no le gusta queda condenado a estar sin radio?
-¡Totalmente de acuerdo! Se trata de la ‘invasión’
del fútbol… inaceptable para quienes no nos atrae lo más mínimo, pero es lo que
vende más. Haría falta una
alternativa. A mí me queda, por ejemplo, el podcast y Juan Luis Cano, en “Ya
Veremos” (M80). Por
último, completa esta frase, Guillermo: “La radio es para mí…
-…el sueño cumplido. Soy el ejemplo perfecto de vocación desde los 6 años cuando visité los
estudios de la radio para acudir a los concursos infantiles y encima he tenido
la suerte de trabajar en lo que me gusta.
