Una tarde en el (radio) teatro, con RNE y Sherlock Holmes
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En la última ficción sonora: "Sherlock Holmes, el signo de los cuatro”
Daniel Galindo, 'hombre en punta' de García, en su conexión con la Ficción Sonora de 'Sherlock Holmes' |
“¡Faltan tres minutos y entramos con García”. Quien habla es Benigno Moreno, director de “Ficción Sonora” de RNE, y exdirector de la radio pública en los tiempos de Juan Ramón Lucas y Toni Garrido, un hombre de la casa, que antepuso el criterio profesional frente a otros más serviles. Defendió a capa y a espada a sus colaboradores, a quienes transmitía su apoyo incondicional y se enfrentó a campañas de desprestigio lideradas por los poderosos sindicatos de RTVE, que a veces dan la impresión de ser los verdaderos dueños de la radio pública. Este mismo Benigno Moreno es hoy un privilegiado. Ha abandonado la púrpura del cargo, para volver al ruedo de la radio, y hacer lo que le gusta: Radioficción, así, con mayúsculas.
Tuve la oportunidad de charlar un rato con él tras el ensayo general de “Sherlock Holmes, el signo de los cuatro”, que se representó en “La Casa Encendida” de Madrid, el pasado 11 de noviembre, y le transmití la sensación, enormemente positiva, que existe, en los ambientes radiofónicos, de su mandato. Y él me apostilló que se limitó “a tratar de hacer buena radio” y de situar la radio pública en el lugar que se merece, “y EGM tras EGM la encuesta revalidaba la apuesta de RNE”. Que se lo digan a la Cope, que quedó relegada al cuarto lugar, hasta que desaparecieron de la antena Lucas y Garrido, y fueron sustituidos por Manolo HH y Yolanda Flores.
Sergio Peris-Mencheta -Sherlock- y Juan Suárez -Watson- en acción. |
La conexión con Ciudadano García, y su programa “Esto me suena” la coordinaba desde el escenario de esta nueva ‘Ficción Sonora’ Daniel Galindo, que presentó a los actores Sergio Peris-Mencheta (Sherlock Holmes) y Juan Suárez (Watson). En paralelo tuiteé un par de fotos de la escena y se las envié al programa y David Sierra, el subdirector, sorprendido, respondió “¡Qué bueno!”. Peris-Mencheta, actor, hasta ahora no de radio, sino actor, ‘a secas’, reconoció en la entrevista que cuando uno se ve “envuelto en la música y los efectos” se deja llevar por este lenguaje radiofónico de tanto impacto entre los oyentes. Da la impresión de que todos los actores que han participado en las “Ficciones sonoras” de RNE, quedan abducidos por el medio, y eso que Alfonso Latorre, guionista de este maravilloso resurgir del radioteatro, actualizado, me desvelaba que en los primeros ensayos, los actores que se incorporan al reparto y no proceden del medio, ni han trabajado en él, “se encuentran totalmente descolocados por la manera de decir” que exige el medio. No es para menos. Simplemente el conocimiento de los ‘planos’ en la radio para ellos debe de ser como el descubrimiento de la rueda…
La 'familia' al completo de esta nueva Ficción Sonora de RNE |
Igual que Benigno, sin conocerme, intuyéndome, me espetó desde el escenario un sonoro “¿Gorka?” y me quedé en la silla, asintiendo, impresionado; Miguel Ángel Coleto, otro de los realizadores, vino a saludarme antes de comenzar el ensayo general de la obra. “¡Te esperábamos hace tiempo! –me regañó amablemente-. No seré yo desde luego quien reste mérito a los actores, que dan voz –y vida- a los personajes de estas ‘Ficciones Sonoras’, pero la labor callada de los técnicos y realizadores está a la altura de los protagonistas. Y no me cabe la menor duda. “Nuestro objetivo es que la banda sonora que acompaña a la obra en todo momento haga grande el conjunto, pero no debe destacar, no es un personaje más” –me confesó Miguel Ángel. Absolutamente de acuerdo, salvo que, efectivamente, la música y los efectos se conviertan en centro de atención de los guionistas, en protagonistas en sí mismos, como en aquel histórico “Pasos” de Antonio Calderón, uno de los precursores de la radio moderna en España y creador, precisamente, del Cuadro de Actores de Radio Madrid, un auténtico gurú de la SER de los años 60-70.
Imagen previa de los preparativos del estreno, con Alfonso Latorre (guionista) atravesando la platea y Benigno Moreno, el jefe de todo, probando micros |
Coleto me contó los intríngulis del montaje técnico, y aluciné, ya me lo había adelantado, pocas semanas antes, Mayca Aguilera, en entrevista en esta web, pero, como le reconocí a la propia Mayca, no es lo mismo leerlo, que verlo… Hablamos Coleto y yo sobre la orfebrería de sus predecesores, que con apenas medios técnicos, y la imposibilidad de grabar (porque no tenían magnetófonos, éstos llegaron mucho más tarde) realizaban los “Teatros en el Aire” (en la SER, por ejemplo) con toda la pericia del mundo, un pulso envidiable y brazos de pulpo. Hoy, sin hurtarles mérito a los realizadores actuales de radio, las cosas están más fáciles. “Lo que tenemos que hacer, Gorka, es adaptar nuestras herramientas a las necesidades que tenemos, y en este sentido, hemos formado un equipo muy engrasado, donde cada uno sabe lo que tiene que hacer”, subraya Miguel Ángel. Y, ciertamente, doy fe del mecanismo ‘de relojería’ que marcaba el funcionamiento de la realización de este “Sherlock Holmes”, última “Ficción Sonora” de la radio pública.
De izquierda a derecha, Inma Nieto, Sergio Peris-Mencheta y Juan Suárez |
Me sorprendí, gratamente, del más que notable esfuerzo del actor protagonista, Sergio Peris-Mencheta, que encarnaba al misógino Sherlock Holmes, por adaptarse al medio y por centrar en su potente voz todos los recursos que es capaz de proyectar un actor. A pesar de todo, la escuela de los actores de radio, que a sus conocimientos de interpretación suman su dominio del oficio, ofrecería otro resultado, diferente, y probablemente –perdónenme- de calidad superior. “Éste, el de la elección de los actores, profesionales o del oficio, es un debate permanente” –me reconoció Miguel Ángel Coleto-. Seguro. Si no hubiera existido esta escuela de actores de radio no tendríamos ese referente en nuestra memoria colectiva…
Mayca era puro nervio, contenido, pero presente. “Volveré a ser persona a partir de las diez de la noche, cuando terminemos. Es muy intenso además hacer dos representaciones en tan poco tiempo, desgasta mucho (se refería al ensayo general y al estreno) y nos ha quedado más larga que nunca: 90 minutos”. Poco tiempo va a poder relajarse Mayca Aguilera porque, aparte del “Documentos RNE”, de Juan Carlos Soriano, le quedan por editar nada menos que tres horas del “Quijote” de Josep María Pou y Javier Cámara. Pero tenéis un trabajo privilegiado, les insistía yo, a lo que asentían todos.
El equipo de actores de "Ficción Sonora" de RNE |
Alfonso Latorre, el hacedor de los guiones, el responsable de que los textos ‘suenen’ a radio, cobren vida ante los oyentes, me contaba algunas de las anécdotas de las “Ficciones Sonoras” anteriores, como cuando un actor se saltó, en el estreno, una página entera del guión, sin darse cuenta. Menos mal que el actor que le daba réplica tuvo el reflejo de pasarla también e incorporarse a tiempo para seguir manteniendo un diálogo coherente. “Estaba de los nervios” –me confesaba-. Y es que una cosa es que sea el propio guionista el que vaya podando el guión, en función del tiempo, o del ritmo que se perciba, y otra que sea el actor el que asuma esta potestad. “Es que no se dio ni cuenta, Gorka, hasta que se lo demostramos al final de la obra”. El proceso de elección de la obra a representar suele repetirse, y en este sentido, Alfonso forma parte de la rutina de adaptarlo al medio y de tratar de conferirle toda la fuerza dramática que tiene que reunir para concentrar el interés del oyente. “He cambiado el papel de algunos personajes de la obra original, le he dado otro aire a la introducción, he añadido una escena donde Sherlock y Watson se conocen, pero es fruto de mi imaginación, Conan Doyle no lo cuenta así…”. En definitiva, la libertad creadora del guionista, gremio tan ausente, por desgracia, en la radio actual (por falta de presupuesto) es la que justifica un buen guión, que dé pie a los actores a sentirse vivos en sus personajes.
El guión, fiel aliado de la realización sonora, muy compleja, de esta ficción sonora |
La representación tuvo bastantes fallos, muchos de ellos –los más- imperceptibles para el común de los oyentes. “Menos mal que casi siempre el estreno es mucho mejor, porque la tensión se hace más fuerte y la atención se concentra más en el esfuerzo de hacerlo bien” -me subraya Latorre-. Pero resultaba imposible no empatizar con los errores de los actores, patinazos con las palabras, que arruinaban, en milésimas de segundo, la carga dramática de su texto. Así, Sergio Péris-Mencheta se descentraba con las pruebas de luces que el técnico realizaba durante el ensayo general y manifestaba en gestos su incomodidad, hasta el punto de que se equivocó en una palabra y su ceño se frunció, inevitablemente. Al igual que la actriz Inma Nieto que, casi en su última intervención, cuando justificaba un comportamiento extremo que había protagonizado en la obra (no es cosa de desentrañar el final) se aceleró demasiado y terminó por ‘caerse’ en una frase. El enfado le duró minutos, según comprobé, más allá de las escaleras del escenario hacia camerinos.
Mayca Aguilera era la encargada, tras el ensayo general, de recopilar los fallos, tanto técnicos como de interpretación, para inventariarlos y corregirlos en el directo. “El podcast que colgamos en la web de rtve.es es tal cual el estreno –me anunciaba- menos cuando se producen errores, que editamos para corregirlos”. En estos casos recurren al ensayo general, e incluso a otros ensayos previos en la Casa de la Radio, materiales que guardan con celo. “Grabamos la palabra sola, en vacío, en una tarjeta de sonido, -desvelaba Coleto- para trabajar posteriormente el formato 5.1 y poder redirigir los efectos, o la música hacia los diferentes canales de reproducción”.
Éste es el 'corazón', el centro neurálgico, de esta nueva 'Ficción Sonora' de RNE |
Certifico que las palabras de Peris-Mencheta eran ciertas, porque cuando los actores se rodeaban de la música y los efectos, del ambiente en definitiva de la obra, se dejaban llevar. Tanto que durante los tiroteos que se producían, e incluso el lanzamiento de dardos envenenados, tanto Sherlock como, sobre todo, Watson (como corresponde incluso a sus personajes) se agachaban para evitarlos. Intuyo que el volumen de sus auriculares era muy alto –Peris-Mencheta se lo subió durante el ensayo general- para sentirse verdaderamente envueltos en el ambiente de la obra y ‘creérsela’. Observando a Juan Suárez veía a una persona que vivía su personaje, e incluso se movía y gesticulaba como él. A la radio no le interesan los gestos, pero es que resulta que la voz es fiel reflejo de ellos. Cuando me acerqué a felicitarle y estrecharle la mano, me respondió mostrando su agradecimiento e incomodidad (por el elogio) a un tiempo. Gestionar el halago con inteligencia y acierto está al alcance sólo de unos pocos…
Primeros ensayos en la 'Casa de la Radio', en los estudios 'Música' |
En definitiva, resultó una noche repleta de emociones. Tras el ensayo general y la despedida de los colegas que me atendieron tan amablemente, me puse mis auriculares y me dispuse a escuchar el directo con atención. Pero mi imaginación, lamentablemente, estaba cercenada por la imagen de los rostros que correspondían a las voces. Ya no los podía imaginar, porque mi memoria visual recuperaba su aspecto. La radio es como el libro en literatura: te permite crear tu universo de sensaciones partiendo exclusivamente de la imaginación como herramienta. Y en este caso, presenciar la obra y a sus actores me impedía disfrutar de la obra en toda su extensión. ¡Qué gran paradoja sufría! En todo caso, acudir a “La Casa Encendida” fue un regalo, que debo agradecer a la amable invitación de Mayca Aguilera y pese a que disfruté como un niño con zapatos nuevos, lo cierto es que me sigo quedando con la versión radiofónica. La fuerza de un buen sonido es imbatible. No hay imagen que lo supere. “La imagen va a la cabeza y el sonido al corazón –sentenció Miguel Ángel Coleto, convencido-. ¡Qué razón tiene!