El EGM sin prisas (I)
https://www.gorkazumeta.com/2014/07/el-egm-sin-prisas-i.html
Todas las cadenas esquivan los números rojos, pero los tienen
Cada
tres meses la radio pasa, como en el colegio, más o menos, las evaluaciones. Los oyentes le ponen la
nota y la Asociación para la
Investigación de los Medios de Comunicación (AIMC) certifica los números, a
través del polémico, y desde luego imperfecto, EGM. Tan imperfecto como la
memoria de los oyentes encuestados, que son los que lo construyen a través de
sus recuerdos “del día anterior”.
Cada cadena se arrima a sus datos más positivos, esquivando los números rojos |
Sin
embargo, las notas de la segunda oleada del año, como la que nos ocupa, tienen
un especial significado, porque suponen las ‘notas
finales’ de la Temporada de radio. No solo los directivos de cada una de
las cadenas de radio están muy pendientes de los resultados, sino también las
agencias de publicidad y las grandes cuentas, que van priorizando sus
inversiones en función de quiénes son más fuertes y quiénes más débiles. Pero
en todo caso, los datos en los que se basan esas inversiones languidecen
enseguida, porque se basan en encuestas realizadas uno o dos meses atrás, y el
plazo es muy largo.
De momento, lo que tenemos ahora mismo, es –sigue siendo, con todas sus imperfecciones- el EGM. Y, como suele ocurrir, los datos más sobresalientes, son ya conocidos y de dominio público. Pero la encuesta arroja siempre detalles que pasan inadvertidos para los grandes titulares, que se preocupan solo de las cifras más espectaculares, de la Foto finish.
La radio online se aleja
del EGM y se acerca al audímetro
Los que hacemos radio nos alegramos de que no exista un
audímetro diario como está implantado en televisión y que marca su tiranía
diaria con los datos del share de
audiencia. Esto, de alguna manera, está cambiando, al menos en radio online,
donde los efectos de un programa se miden de inmediato entre los
oyentes/internautas, bien a través del tráfico que genera en la web o el site donde se aloja su señal, bien a
través de las descargas de podcast que genera, que son cuantificables en tiempo
real, a través de los correspondientes servidores que distribuyen la señal.
Esta realidad es algo que también está cambiando la radio
online. Y mi pregunta es si esto es o no positivo para el medio. Cabe el riesgo
de que, en función de quién y cómo se analicen los datos obtenidos de la
escucha o descarga de los contenidos de una emisora online se tomen decisiones
demasiado urgidas por la prisa y la falta de reflexión o, cuando menos, de la
paciencia mínima, e imprescindible, que debe imponerse en estos casos, donde
debe primar la prudencia. Es una pregunta que, sin duda, abre un debate muy
interesante, en el que, hasta ahora, solo había participado la televisión. La
radio se quedaba al margen. Ya no va a ser así.
Este EGM, en general, no ha deparado grandes sorpresas,
y sigue las pautas propias, y habituales, de la segunda oleada del año.
Desciende el número de oyentes, en muy poco, no llega a 70.000 oyentes menos,
aumenta el consumo de radio temática musical (casi 200.000 más) y se reduce el
número de oyentes de radio generalista (-252.000).
La cifra es muy parecida, y podría en parte relacionarse: los oyentes de radio
convencional se pasan a la musical. Pero no seamos, por favor, tan simples en
los planteamientos, aunque indudablemente existe el trasvase. ¿Por qué? Pues
porque la tensión, surgida del comienzo de la Temporada (allá por septiembre),
es imposible de mantener permanentemente. Y han pasado más de seis meses desde
entonces, muchas horas de radio. La actualidad informativa, que es de alguna
manera la que va marcando el interés y la atracción sobre la audiencia decae
también, salvo acontecimientos muy puntuales, que no tienen un reflejo concreto
en una oleada, por la brevedad de su impacto.
Con respecto a los grandes grupos, Prisa
Radio ha perdido
fuerzas con respecto a su EGM anterior (-1,6%), aunque sigue liderando, por
supuesto; Onda Cero saca una ligera ventaja (+0,2%) a Cope, -un respiro- su más
directo competidor (en el anterior habían empatado), la emisora pública rompe
tendencia y pierde fuerza (-0,9%) y otras emisoras, algunas regionales,
obtienen una buena cosecha. Estos datos, curiosamente, resultan de una gran
trascendencia por cuanto representan el poderío de cada uno de los grupos
frente a los grandes agentes del sector publicitario español. Aquí se juegan
muchos millones de euros…
CADENA
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2! OLA 2014
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1ª OLA 2014
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DIFERENCIA
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SER
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4.688.000
|
4.566.000
|
-122.000
|
ONDA CERO
|
2.603.000
|
2.714.000
|
111.000
|
RNE
|
1.317.000
|
1.213.000
|
-104.000
|
COPE
|
1.972.000
|
1.951.000
|
-21.000
|
2ª ola
EGM 2014
Vamos con las joyas de la corona, las cadenas generalistas.
La SER sigue al
frente, pero ha perdido fuerza (-122.000 oyentes).
Le sigue, a mucha distancia, Onda Cero, que refuerza posiciones
(+111.000 oyentes) frente a la Cope, que ha perdido, muy poco (21.000 oyentes, muy pocas
encuestas). Y RNE ha perdido posiciones (-104.000
oyentes).
Y aquí es donde, con las cifras en la mano, cada cadena
juega a sus anchas a la hora de maquillar y vender sus hazañas, según le
interesa. El EGM contempla dos grandes comparaciones: la surgida de la
diferencia entre la última oleada y la anterior, y la certificada entre la
última oleada y la misma encuesta de hace un año. Evidentemente, las dos
comparaciones no reflejan lo mismo. Una cadena de emisoras puede,
perfectamente, mejorar marcas con respecto a hace un año, pero sin embargo
perder oyentes con respecto a la oleada anterior. Es obvio determinar qué dato,
de los dos, venderá en sus informativos, programas y webs. El marketing
está para vender, y en esto las cadenas de radio también se aprovechan,
y supongo que hacen bien, porque son sus intereses los que están en juego.
Ya se han caído fichas de este mural de la SER, y en este caso las razones no hay que buscarlas en el EGM |
Dicho esto, ¿cuáles son las cadenas de radio que
registran menores pérdidas, o una evolución más en positivo de sus audiencias?
Vayamos por partes. ¿qué le pasa a la SER? Sus datos, siendo fuertes
–muy fuertes- son malos. Con respecto a la oleada anterior, y como ya hemos
visto en número de oyentes, se ha dejado por el camino un 2,6 por ciento de sus
apoyos, pero es que si recurrimos a la comparación con respecto a la misma
oleada de 2013, hay que hablar de una pérdida de oyentes de casi un 5 por
ciento (-219.000 oyentes). ¿Qué ha ocurrido con
Onda Cero? Sus datos no son malos, si atendemos a esa expresión popular que
señala “virgencita,
que me quede como estoy”, porque con respecto a la oleada anterior ha ganado un 4,3
por ciento, y no le ha salido mal la comparación con sus resultados del año
2013, donde solo perdió 8.000 oyentes, un 0,3
por ciento. Con RNE hay que tener más paciencia, si es que se la pueden
permitir. La radio, ya se sabe, y lo he repetido aquí más de una vez, es una
carrera de fondo (los sistemas de medición así lo confirman). El caso es que ha
terminado temporada con menos oyentes de los que se encontró el año pasado. Con
respecto a la oleada anterior, se ha dejado casi un 8 por ciento, y en
comparación con la misma oleada de 2013 ha perdido oyentes (-119.000), casi un 9 por ciento. El dato no es bueno,
pero la programación se está asentando. Luego ya descenderemos al detalle.
El caso es que cada cadena tira de números y elige los
que le resultan más favorables, evitando, como es lógico, el color rojo, no
vaya a ser que se extienda por los despachos de las agencias de publicidad como
un reguero.
Continúa...