“Replicar el escenario analógico en el mundo IP móvil, es matar moscas a cañonazos”

El desarrollo de la radio digital terrestre en España (y III)

Javier Sánchez, Presidente del Programa Estratégico sobre Plataformas de Radio Digital de la UER 

Javier Sánchez es Responsable
de Planificación Técnica de RNE

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“El futuro no es nada halagüeño”

-Sinceramente, Javier, ¿tú crees que algún día veremos en España una red de DAB+ consolidada?

-Lo inmediato es reconocer que con una cobertura actual de DAB del 20% el futuro no es nada halagüeño. Pero no está de más recordar que en los inicios de la radio digital se pretendía “rodar” en el pelotón de cabeza y que hace diez años la red alcanzó un 50% de cobertura porque, al margen de cualquier consideración y de los índices de penetración conseguidos, existió voluntad política al más alto nivel para, al menos, impulsar su despliegue.

-Pero esa iniciativa, bastante forzada por otra parte, se esfumó. La industria de los receptores no fabricaba aparatos con norma DAB, y los radiodifusores no produjeron nuevos productos que sirvieran de atractivo a los oyentes para hacerse con esos nuevos receptores de radio digital, una especie de pescadilla que se mordía la cola… Y, claro, ahora, estamos en época de vacas flacas, donde hay que recortar de todos los sitios.

-Lamentablemente, a día de hoy, la radio digital no es ninguna prioridad en nuestro país. Ni tan siquiera sorprende a nadie que no esté incluida en la Agenda Digital Española, porque en estos momentos se han considerado mucho más interesantes otras cosas como, por ejemplo,  facilitar el desarrollo de actividades de croudsourcing y croudfounding o actualizar el Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales en materia de habilidades y capacitación TIC. Pero la situación ha cambiado mucho desde el año 2000. Sin ir más lejos, hoy en día hay una gran variedad de receptores con precios que arrancan desde los 20 euros. Y se espera que bajen más aún, puesto que las patentes de los receptores de primera generación han expirado y se prevé que en un par de años haya receptores por debajo de 15 euros.

La red de DAB+ es mucho menos costosa que la OM y la FM

-Entonces, ¿hacia dónde vamos? Yo veo que esto no sale adelante y no solo eso, que la radio online ya le ha adelantado a la radio digital terrestre.

-Si la radio es realmente un instrumento de cohesión social, debería pensarse seriamente en su futuro. Y si aquellos que apenas vislumbran las posibilidades de la radio digital tomasen al menos conciencia de que una red DAB+ es infinitamente más eficiente energéticamente hablando que una red de OM y mucho más eficiente que una de FM (los gastos de explotación pueden reducirse en torno a un 60% con respecto a la FM, de acuerdo con la experiencia de nuestros colegas de Deutchlandradio), se abandonaría casi inmediatamente la OM como ya han hecho otros países y se prestaría más atención al despliegue en DAB+. Ello permitiría a la radio, entre otras cosas, destinar un mayor porcentaje de gasto a los contenidos en un futuro, que es lo que realmente demanda el oyente y su auténtica razón de existir como medio.

Radio híbrida en el NAB 2013

-¿La DAB+ es, pues, una segunda oportunidad para evitar los errores de la DAB?

-Absolutamente de acuerdo. Si no se ofrece cierta estabilidad temporal y seguridad jurídica a los concesionarios de radiodifusión sonora digital terrestre actuales, teniendo en cuenta que la eficiencia espectral de las nuevas tecnologías puede ampliar la capacidad de negocio, viajaremos a ninguna parte. Y, es cierto, ya no nos podemos permitir el lujo de frustrar el despliegue del DAB+ y repetir los mismos errores que cometimos con el DAB. El DAB+ nos ofrece ahora la posibilidad de aprovechar la nueva circunstancia tecnológica sin perder mucho tiempo porque, quién sabe, si no será la última…

-¿En qué escenario tecnológico trabaja RNE a cinco o seis años vista? ¿En un escenario online prioritariamente o en un escenario mixto?

-Aunque el escenario será necesariamente mixto por su posicionamiento y número de oyentes, permíteme que deje de momento el tema en barbecho y abra, aprovechando tu pregunta, una reflexión de carácter más general. Ya habrá ocasión de aportar datos más concretos.

El 82% del tráfico de los smartphone discurre por WiFi

-Tú dirás…

-Si los practicantes del apriorismo se sirviesen del razonamiento y no del sentimiento, caerían en la cuenta de que existe información publicada que ofrece bastantes pistas sobre las tendencias en el consumo de contenidos. Sabrían así, por ejemplo, que aunque España es el país de Europa con mayor penetración de smartphones (66% del total de móviles), resulta que más del 82% del tráfico que se cursa en estos dispositivos es a través de WiFi por motivos económicos, frente a un escaso 18% de la red 3G. Al menos, esto es lo que puede leerse en un reciente informe de Mobidia y aunque los porcentajes puedan ser discutibles en cuanto a su verdadera magnitud, no ofrecen dudas sobre un hábito de consumo.

Receptor de Radio DAB con estética retro,
fabricado para el mercado británico

-¿Quieres decir que la red –o el precio de la red, mejor dicho- condiciona el desarrollo de la radio online, negativamente, a la vista de estos datos que has comentado?

-Exacto. Incluso asumiendo un tráfico algo mayor a través de 3G ¿no parece, cuando menos, cuestionable que el futuro de la radio pase exclusivamente por internet? Porque en ese hipotético caso, ¿qué ocurrirá con la escucha en exteriores y en movilidad? ¿Acaso alguien cree ingenuamente que los oyentes en nuestro país recurrirán mayoritariamente al 3G/4G en sus vehículos para escuchar la radio en sus desplazamientos? Incluso a la vista de estos mismos datos, ¿parece realmente que vaya a existir demanda suficiente como para justificar el “dividendo” digital en nuestro país y su adelanto en un año con respecto a Europa? Quizá sea más sorprendente aún una afirmación de una autoridad española recogida en varios medios, según la cual el volumen de contenidos de actualidad se multiplicará por 20 gracias, precisamente, ¡al 4G! Desde luego, si pensamos en un mercado audiovisual mayoritario de consumo masivo de alta definición en streaming con recepción en movilidad en exteriores (en interiores se usa WiFi…) a través de dispositivos con pantallas inferiores a 6” en las que el ojo no percibe resoluciones muy altas, algo estamos haciendo mal…

Las cifras incontestables de los costes de la DAB frente al escenario online

-¿La DAB+ es, por tanto, en cuestión de costes, más barata que la cobertura de 4G?

-Es que no tiene ningún sentido replicar el mundo de la radiodifusión en el mundo IP móvil, salvo que se desee matar moscas a cañonazos. En este caso, se parte de un planteamiento erróneo para llegar a conclusiones equivocadas, puesto las propias tecnologías LTE o 4G no están concebidas para proporcionar un servicio masivo de radiodifusión.

-Es un punto de vista que no había tenido oportunidad de conocer, Javier. ¿Podrías aportarnos más datos sobre este asunto?

Receptor de radio compatible DAB y DAB+
y conexión al iPod, marca Kenwood, para coches

-Sin duda el más llamativo para el caso de la radio es el ofrecido por el IDAG (International DMB Advancement Group) para los Países Bajos. Según los cálculos que han efectuado, para proporcionar una cobertura territorial del 75% utilizando tecnología móvil se necesitan 38.000 estaciones base, con una inversión inicial de 9.200 millones de dólares y unos costes anuales de explotación de 2.300 millones de dólares. Con tan sólo 30 centros emisores de DAB+, se cubre el mismo territorio con una inversión y unos costes anuales de explotación infinitamente menores. Por tanto, seamos serios. La radio está en el umbral de una etapa diferente en la que tiene que tomar conciencia de lo que es y de dónde está. Traspasar ese umbral no exige una reinvención con riesgo de pérdida de identidad, sino un cambio de actitud que permita su evolución preservando su esencia. Posponer sine die la digitalización de la difusión, resistirse a un apagado analógico o infravalorar los avances de otros países europeos no esconde, quizá, otra cosa que el desasosiego que produce afrontar la realidad.

Las ventajas de la DAB sobre la FM

Desde el punto de vista del oyente, que es donde creo que se ha de poner el foco, tal vez la ventaja más evidente es que puede recibir una oferta más amplia que la actual. Basta con observar los canales “Xtra” de la BBC. Otras ventajas claramente percibidas podrían ser el Slideshow (radiodifusión de imágenes con formato JPEG, PNG o Animated PNG y susceptibles de ser presentadas incluso a velocidades de entre 1 y 10 fps) y, por qué no, la emisión de determinados eventos (conciertos, ficción sonora, documentales, etc.) con sonido multicanal. Pero quizá una mucho más básica y que se acabe valorando bastante en España sea la recepción de un audio de calidad, libre del ruido de fondo inherente a toda emisión de FM y, sobre todo, de los insoportables “chisporroteos” que provocan las interferencias perjudiciales causadas por los muchos radiodifusores ilegales existentes en esta banda.

-¿Estás de acuerdo, además, en que la radio online nace con un condicionante tecnológico que limita la existencia de grandes audiencias, lo que elevaría sus costes de emisión (capacidad de los servidores) de manera desmedida?

-Completamente. Se echen las cuentas que se echen, los costes de radiodifusión sonora terrestre no dependen del número de oyentes para una determinada cobertura territorial, mientras que los costes de la radio por IP dependen del volumen de tráfico que se tenga que servir. En cualquier caso, cada uno debe fijar su target de audiencia y, desde un saludable agnosticismo tecnológico, contemplar todos sus costes a la hora de hacer números. Seguro que se lleva sorpresas tales como que el coste de un stream de audio a 128 kbps arroja una cifra anual de gasto de seis dígitos si se estima una audiencia estable de 100.000 oyentes que escuchan tres horas al día. O que echando un cálculo rápido con la ley en la mano, tan sólo en tasas de ocupación de espectro se van cerca de 420.000 euros anuales por programa nacional en FM y en torno a 500.000 por programa nacional en OM, mientras que en DAB no se llega ni a 50.000 euros por múltiplex nacional (seis programas). A ello hay que añadir que, dependiendo de tu posicionamiento como medio, deberás plantearte si necesitas llegar a la audiencia por una única plataforma, por varias o por todas las tecnológicamente posible y económicamente viables.

Pequeño receptor de DAB

Los inconvenientes de la desregulación del sector

-¿Qué resulta más barato: un oyente analógico o un oyente digital online?

-Pues como se puede deducir de lo que te acabo de contar, depende. Hay cifras publicadas para todos los gustos en función del número de oyentes y de los gastos que se consideren. Pero quizá lo interesante no sea reflexionar únicamente sobre estos costes en sí mismos, sino sobre todas las obligaciones económicas derivadas del cumplimiento del marco regulatorio aplicable a la radiodifusión sonora, frente a la desregulación de la radio por internet. Eso es lo que marca definitivamente la diferencia y su análisis daría para unas cuantas entregas. En cualquier caso, creo que hay algo aún más inquietante: si existe un cierto temor por parte de los radiodifusores con concesión de radio digital a un escenario con nuevos actores, imaginemos qué ocurriría en un escenario desregulado. Si no se trabaja en el futuro de la radiodifusión sonora digital, este escenario irá cobrando protagonismo por inacción.

-¿Qué nos queda por ver en materia de tecnología radiofónica?

-En España, prácticamente de todo. Sirva como ejemplo que en el mundo ya existen cerca de 1.900 estaciones complementando sus emisiones con radio híbrida en 14 países. Estamos hartos de escuchar que la tecnología no es un fin en sí mismo, sino un medio. Y puede que sea verdad. Lo que no admite discusión alguna es que, lo queramos o no, nos ha tocado vivir en una época en la que nos estamos acostumbrando a interactuar con ciertos dispositivos a través de pantallas táctiles en color. Por lo tanto, si la radio desea realmente mantener su importancia, parece lógico pensar de entrada que debe estar presente en todos ellos. Pero no basta con estar “de cualquier manera”, mostrando simplemente una frecuencia numérica o un indicativo en una aplicación gráfica, sino en la forma más atractiva posible y complementando al audio emitido.

Minúsculo receptor
de Radio DAB

Soluciones mixtas para el futuro, complementarias

-Te veo como un defensor convencido de las excelencias de la DAB+.

-Mira, todo apunta a que la mejor solución para este propósito es complementar DAB+ con servicios de radio híbrida (actualmente bajo especificaciones de RadioDNS), radio por IP, acceso a redes sociales y FM (hasta su apagado) para que, en función de la disponibilidad, se ofrezca la mejor combinación posible. Un ejemplo real puede ser un smartphone que está recibiendo DAB+ y RadioDNS, pierde la conexión y conmuta automáticamente a radio por IP hasta volver a recibir nivel de señal suficiente en DAB+. En cualquier caso, es en el receptor en donde se produce la convergencia de los distintos servicios ofrecidos a través de las distintas plataformas, por lo que deberá incorporar, entre otras cosas,  un chipset que permita la recepción de FM/DAB/DAB+.

-Los oyentes van a necesitar un cursillo para convivir con todas estas nuevas tecnologías que nos has comentado.

- En absoluto, y ahí está lo bueno, porque toda esta complejidad deberá ser transparente para un usuario que interactuará con esta “radio en color” en su smarthphone, en el sistema multimedia de su vehículo o en un receptor portátil de manera análoga a como lo hace con cualquier otra aplicación. Nótese igualmente que cuanto más inteligente sea el dispositivo y más atractivas sean las funcionalidades ofrecidas, mayor será el tiempo de interacción del oyente.

-Y estos receptores ya existen o, todavía, son ciencia ficción?

-En recepción portátil, el primer aparato que incorporaba todo lo mencionado salió al mercado hace tres años y resulta altamente ilustrativo comprobar las posibilidades que ofrece si hay servicios DAB/DAB+, de radio híbrida y WiFi en su emplazamiento. Las últimas tendencias en este campo, con reconocimiento de voz incluido, están concentradas en el prototipo que Radioplayer presentó a finales del pasado año. En el resto de dispositivos, quizá quede más camino por recorrer. En lo que se refiere a smartphones y tablets, es imprescindible que comiencen a incorporar chipsets que decodifiquen FM/DAB/DAB+, puesto que desarrollar apps de radio híbrida es relativamente sencillo y todos estos dispositivos disponen de acceso a WiFi. Y en lo relativo a sistemas multimedia instalados en vehículos, aparte del mencionado chipset se deberá disponer de una conexión 3G/4G para tener acceso a todas las funcionalidades.

Prototipo de Radio híbrida

-Pero para este escenario, con productos tan completos en el mercado, hace falta una voluntad política inequívoca de implantación de la DAB+ por parte de las autoridades, no solo de un país, sino de toda Europa.

-Exacto. En un contexto económico globalizado, el mercado mínimo que considera hoy en día la industria a la hora de comercializar casi cualquier producto es Europa. Esto es así porque en un mercado tan competitivo, con márgenes comerciales decrecientes, no resulta económicamente viable poner en el mercado productos de estas características si no es a gran escala. Y para que ello suceda, es indispensable que exista la armonización, al menos a escala europea, enunciada en la Recomendación 138 de la UER. Pero eso es ya otro cantar…