Entrevista a Jaume Segalés, ABC Punto Radio (y II)

“Este oficio es duro, siempre está en crisis” 

Jaume Segalés sobre el cierre de “ABC Punto Radio”

La entrevista a Jaume Segalés tuvo lugar antes de que se conociera la noticia sobre el futuro de ABC Punto Radio que, no por esperada, ha sido menos sombría. Pese al momento, y siempre apoyado en su proverbial optimismo y sentido positivo de la vida, Jaume ha tenido la enorme amabilidad de trasladarme sus impresiones sobre este injusto cierre:

-Después de arrancar esta cadena el 2 de agosto de 2004 con José Antonio Piñero, Alejo García, Carolina Costantini, y algunos compañeros más, han sido ocho años bonitos, porque un proyecto nuevo siempre ilusiona. Luchar hasta el final es agotador pero enriquecedor; así que ahora tocará volver a pensar en nuevas ideas, si puede ser en el mundo que más he disfrutado -que es la radio- mejor. Si no, pues donde se pueda.  

Continúa...

-Tú has hecho la mañana, Jaume, la tarde, la madrugada en “A día de hoy”, ¿ahora el fin de semana es un territorio más favorable para hacer radio más creativa, con menos compromiso con la actualidad, con menos tensión en el minuto a minuto? ¿Te sientes más cómodo?

Segalés, gran conocedor
y practicante del oficio

-Todas las franjas son buenas y en todas me he divertido. Siempre he dicho que a mí me encanta la noche-madrugada y el fin de semana-festivos. Los oyentes son menos, pero más fieles. Al final, el comercial busca miles de personas para vender publicidad, pero tú buscas complicidad con el oyente y sentirte parte de su familia. Por el mismo motivo, eres creativo, pruebas otras cosas y ellos te van marcando, con su aprobación o crítica, si les gusta o no. En fin de semana intento que el sábado sea como un breve resumen de lo importante de la semana y mucho humor... Y el domingo, como un avance de lo que nos viene, con información social y también con ironía y música.

“Yo me dormía en cualquier rincón”

-Es cierto que Luis del Olmo, en Onda Rambla, en Barcelona,  te permitía echarte cabezaditas en el locutorio y que te despertaba con un codazo para que intervinieras? ¿Y después volvías a dormirte? ¿Tan duro era el ritmo de trabajo que llevabas entonces?

-Sí, Hilario López Millán me iba despertando y dando codazos cuando Luis me daba paso. Estuve un año enlazando un programa de domingos que tuve una década, ‘Esports i Natura’, que me llevaba a la radio a las 6 de la mañana. Luego, fútbol, retransmisiones, programa de deportes por la noche y, de madrugada, con Juan Ramón Lucas, hacía el deporte de 5,30 a 6. Dormía los domingos en un sillón de la emisora, un par de horitas hasta el lunes, cuando terminaba el entrenamiento del Barça y la intervención en los programas de las 14h, que me iba a casa a dormir. Luis también se ha echado cabezadas a mi lado y me ha pedido que coja el micro durante ese tiempo. Esto es divertido pero, a veces, pegas un bajón y es bueno poder descansar... Yo me dormía en cualquier rincón, a horas disimuladas, en las que no había más que un par de compañeros en el programa.

Segalés, de la Escuela del Olmo

Recuperar la vida privada…

 -Me interesa también destacar que eres profesor de la Universidad Camilo José Cela, pero, vamos a ver, ¿te queda tiempo para compaginarlo con la docencia? ¿Dónde queda tu vida privada?

-Este año estoy muy aburrido, porque tengo demasiado tiempo, me paso el día con mi mujer y los niños. Estoy implorando más carga de trabajo pero, por la crisis, no me dan más horas. Antes sí que estaba de madrugada, a mediodía y un día a la semana, de profesor. Ahora trabajo cuatro días de siete, y normalmente, la tarde la paso siempre con los críos haciendo con ellos los deberes o yendo a sus actividades extraescolares. El fin de semana, cuando llego a casa están, o bien en el partido de fútbol o bien comiendo, así que no me echan de menos. Sí que hubo épocas en las que no nos veíamos apenas y, por eso, ahora, ellos están muy felices de tenerme siempre por casa.

-¿Qué consejos tienes para tus alumnos? ¿Les dices que el oficio de radiofonista tiene a veces un precio muy alto, y que es casi como ingresar en un convento?

-Les digo lo que me decían mis profesores: que este oficio es duro, que siempre está en crisis, que no caben todos y que no desfallezcan. Hay que pelear y estar al quite toda la vida, pensando en ello, presentando proyectos, poniendo buena cara a gente que sabes que te va a pegar un estacazo por la espalda... Es nuestro sino. Aquí te pueden echar o renovar por un cliente contento que haya vendido mucho; por un EGM bueno o malo; por un partido político o un empresario que se haya enfadado por una información tuya o al revés, que le haya beneficiado una información que has publicado. Y el cuarto factor: que caigas bien o mal al jefe nuevo que llegue a la empresa. En cada oficio tu puesto de trabajo depende de algunos de estos factores, pero no de todos a la vez, creo yo.

El maestro Del Olmo le premió, por justicia,
 con un premio "Protagonistas"

El futuro de la radio: incierto

-El futuro inmediato de la radio, creo, va a pasar por internet. ¿Cuál es tu visión del futuro del oficio? ¿Cómo lo ves?

-El futuro inmediato pasa por una reordenación del sector, de los costes y de los beneficios. Además, por un reequilibrio entre la radio nacional y la local, que en épocas de crisis es la primera que cae, pero es la más necesaria, pienso yo. En cuanto a internet, puede haber muchos medios, porque son baratos, el cliente-oyente puede salir beneficiado, pero no creo que llegue a mantener una redacción completa con los sueldos que se pueden pagar por una publicidad en la red.

-La solución ¿podría pasar por la especialización?

-Igual sí. ¿Por qué todos tenemos que tener una potente redacción de informativos, de deportes, programas locales, regionales y nacionales? Igual unos que hagan sólo noticias locales, otros nacionales,  otros programación musical, otros humorística. No sé, habrá que pensar en ello, porque la radio generalista necesita mucha gente para el poco dinero que recibe. Los precios, igual que en la prensa, se han caído. Lo que antes valía (o cobrabas) mil, ahora se ofrece por cien, con mucha suerte. Los sueldos, los gastos, la luz, las antenas, los coches... todo sube de costes. ¿Dónde recortas de forma tan brutal? En los profesionales. Hay que repensarlo, porque fíjate cómo en la tele, creando más de cien canales, no hay más libertad ni mayor criterio. Hay más pobreza, menos recursos, más programas viejos, malos o poco vistos... Si pones mil radios en internet, al final, no da para nadie. Y el producto se cae.

-¿Y cómo ves a los futuros oyentes, a los jóvenes?

Segalés también puso toda
su ilusión en Punto Radio

-¡En su mundo, que no siempre pasa por la radio! ¿Cuántos jóvenes han escuchado la última semana cada día un informativo en radio, o un programa musical para informarse de sus cantantes en radio convencional? Eso lo pregunto a los alumnos y casi todos admiten que no lo hacen. Ya se organizan su información y su ocio y su música por internet, y los prescindibles somos los periodistas.

¿Hay un “¿hasta cuándo?” en ese desapego al periodista?

-Claro. Hasta que lo necesiten… Hasta que nadie les haga la criba y vean que lo que leen y escuchan son barbaridades incontroladas, no contrastadas. Cuando se cansen de mentiras e insultos, buscarán periodistas para que les cuenten las cosas. Pero igual ya no estamos porque nos hemos ido todos al paro.

-Las redes sociales cada vez están más integradas en la radio, pero ¿no caemos a veces en el error de volcarnos en ellas y concederles demasiado protagonismo, y olvidarnos de miles de oyentes que ni siquiera tienen acceso a internet todavía?

-En eso, abundando en la respuesta anterior, tienes toda la razón. Nos exigen generar debates y mensajes y amigos en Facebook y Twitter y la página web. Y ves cómo muchos ni escuchan el programa, simplemente entran para darse palos o para hablar con gente en la red social de tu emisora. Y luego, siempre intento poner la mitad de los premios de concurso, o la mitad de sinergias, con los oyentes que no tienen internet. Sigo dando paso a oyentes por teléfono, gratis, que no tengan que pagar, al mismo nivel o más que los que entran por redes sociales, porque creo que hay que respetar a estas personas que aún son nuestros fieles amigos.

Recogiendo su último premio,
la Antena de Plata, de este año 2012

-¿Qué te gustaría hacer en radio, que todavía no has hecho?

-Me queda por tener un programa nacional jugándomela con un equipo propio, sin crisis de por medio, sin ser el tercer plato, sin ser el sustituto. Probarlo, ver si el EGM me maltrata y me despiden en dos años o si podemos merecer un programa de franja completa de mañana o tarde. Es lo único, pero ni es mi deseo ni mi anhelo ni mi sueño. Me gustaría, pero ni lo veo viable, ni posible, ni probable, ni lo reclamo, ni lo espero. Voy tirando con lo que puedo hacer, intentando que sea el producto más digno posible o, al menos, lo que me gustaría escuchar en fin de semana.

+ Para terminar, completa la frase:

-“La radio es para mí… una amante que me satisface a diario.