Javier del Pino y su ‘I+D’ en ‘A Vivir que son dos Días’
https://www.gorkazumeta.com/2012/10/javier-del-pino-y-su-id-en-vivir-que.html?m=0
He escuchado a mi amigo Javier del Pino al frente de su nuevo ‘A Vivir que son dos días”, en la cadena SER. Y debo reconocer que no me ha sorprendido. Esperaba esto de él, porque me consta que es un tipo inteligente, con conocimiento del medio, y además brillante. En otro momento de este blog advertí que firmaría un magnífico programa, y así lo está haciendo. No tengo vocación de futurólogo, pero me agarro a lo que he conocido siempre de él. A su solidez.
Es
un profesional de la vieja escuela de la casa –sin querer con esto llamarle
viejo, y mucho menos antiguo- pero su pedigrí,
al lado de Carlos –Charli- Llamas tantos años, forjó una manera de decir y de ver
las cosas que nos rodean, siempre con la mirada limpia. Luego, desde la
corresponsalía de Washington (EE.UU.) nos ayudó a entender mejor lo que ocurría
en la primera potencia del mundo. Pero su lucidez brillaba más en programas que
en informativos, cuando podía explayarse en los detalles que, en ocasiones,
dejan de ser anecdóticos para pasar a trascendentes.
El fin de semana es un magnífico territorio para innovar |
En
sus muchos años compartiendo sección con Javier
Cansado (la otra mitad del dúo ‘Faemino
y…”), con Gemma Nierga de
anfitriona en ‘La Ventana’, Javier
nos demostró ser un contertulio eficaz, mucho más que un sparring del imprevisible Cansado. Por eso, oportunamente, y como
no podía ser de otra manera, Javier del Pino ha recuperado a Javier Cansado
para poner en marcha una especie de ‘antiConsultorio’, en el que el humorista
se erige en antipredicador. Original, y muy bien llevado. De nuevo Cansado
introduce las gotas necesarias de surrealismo para soportar una sección
maquillada de humor pero con los arrestos suficientes como para presentar, con un
manto simpático, elementos cotidianos y a la vez significativos que nos hacen
la vida más cómoda.
La
presencia de Ramón Lobo en “A vista de Lobo” hace que la sección de
este periodista auténtico, bregado en mil y una guerras (literalmente) cobre un
interés inusitado. La conversación entre Lobo y Javier del Pino debatiendo qué debe prevalecer en el caso del topless
de Kate Middleton: ¿la libertad de expresión o el derecho a la
intimidad? O el caso de las caricaturas
sobre Mahoma, que están provocando tantas protestas en los países
musulmanes, donde los radicales las están aprovechando para multiplicar su
protagonismo y presencia, tienen en el análisis de Lobo una explicación aliada
del sentido común y de verdad.
Javier del Pino ha recuperado la
figura de José Martí Gómez, uno de
los periodistas más prestigiosos, y ecuánimes, de todos los que ha dado
Cataluña, y ha dado muchos, y buenos. La mirada de Martí es un gran patrimonio
para el nuevo ‘A Vivir’. Como lo va a
ser la incorporación de José Ignacio
Salmerón (Sinacio), que ha parido
su concurso “No me lo digas”, en el
que enfrenta a dos personajes populares con un cuestionario de actualidad como
compromiso. Invitados como Juanjo
Puigcorbé y Pera Ponce, Manel Fuentes y Nuria Roca han sido los primeros que han compartido el juego
propuesto por Javier del Pino y Sinacio.
La sección se enriquece además con la presencia de un pianista –Jerónimo Maeso (recuperando el sonido
del piano de cola del estudio central de Radio Madrid, desde ‘La Verbena de la Moncloa’) y un locutor
–mi amigo Julio López Fonseca-, cada
uno en su papel, enriqueciendo con su trabajo esta original propuesta, tamizada
siempre por el buen humor.
El nuevo ‘A Vivir que son dos días’ de la SER también trae en su zurrón, como
es lógico en un fin de semana, cine, música, libros, gastronomía y ciencia.
Pero el punto de vista, el envoltorio, también es original. Del Pino y su
equipo han trabajado a fondo para esquivar el tópico, lo que se agradece mucho.
Javier del Pino durante la presentación de la programación de la SER, en septiembre pasado |
Pero quería detenerme un poco más
en una de las secciones que me parecen más originales, hasta el punto de
considerarla, en mi modesta opinión, como una nueva aportación en el lenguaje
radiofónico, me refiero a ‘El Jurado’.
Cada quince días, Del Pino, acompañado por uno de los tipos que más saben de
radio en este país y por el que yo siempre he sentido sincera devoción, Carlos López Tapia, fundador de Lo Que Yo Te Diga, y defenestrado hace
algunos años del magnífico programa ‘El
Cine’ que dirigía, ha regresado, felizmente, a la antena de la SER, para
ofrecer una propuesta que se sale de lo habitual y en la que, colateralmente,
el cine vuelve a estar presente, rememorando aquellas grandes películas de
juicios, como “Doce hombres sin piedad”
o “Testigo de cargo” (con un Charles Laugthon imbatible).
Carlos López Tapia trabaja con
eficacia casos jurídicos como “El caso de
la comida rápida” o “El caso de la
mamá ladrona”, entre otros, en los que, gracias a la ayuda de oportunas y
didácticas dramatizaciones, va planteando su evolución, desde el punto de vista
del abogado defensor, y el del fiscal, aportando argumentos con los que los
oyentes se identifican en el lado del receptor, y toman postura inmediata como
si formaran parte del jurado popular que debe enjuiciar el caso. En paralelo, y
muy bien combinado en tiempo y ritmo, se alternan las voces de expertos, de uno
y otro lado, que van explicando posturas y elementos jurídicos, de manera que
se aporta también el lado pedagógico sobre el mundo judicial que añade claridad
sobre muchos puntos oscuros de este gremio tan críptico.
‘El Jurado’ juega muy bien con los recursos radiofónicos:
dramatizaciones y entrevistas, alternados por el diálogo entre Javier del Pino
y Carlos López Tapia. Es una sección que invita a la participación inmediata de
los oyentes, erigidos en improvisados jueces populares. El tono, evidentemente
serio, de López Tapia, conduciendo la sección, se me antoja, sin embargo,
demasiado frío y distante. Pero, sinceramente, tampoco sabría resolver una
alternativa a esa manera de dirigirse al oyente. No es, está claro, una sección
de humor. Pero los temas excesivamente sesudos, en radio, tienden a bordear el
aburrimiento. De ahí, que López Tapia, inteligentemente, haya introducido las
dramatizaciones de por medio para aligerar el peso de la sección. Creo que,
durante las entrevistas, ambos, Javier y Carlos, podrían bajarse un poco de su
pedestal virtual y bajar a la arena de la calidez, tan propia de este medio.
Este punto, precisamente –el de la
calidez- es el que creo que debe reforzar Javier del Pino al frente del
programa. No puede olvidarse la procedencia del madrileño, que ha estado
adscrito a los Servicios Informativos desde su incorporación a la cadena SER, y
todos los que hemos hecho antes ese camino hemos sufrido en nuestras carnes la
necesaria e imprescindible mutación de pasar de ser una voz a mostrarse
abiertamente –en un programa- como la persona que encerramos dentro. Javier
tiene que aprender a sonreír más en antena, como alguna vez le he oído en el
simpático concurso “No me lo digas’
del que hablaba antes, pero soy consciente de que el cambio, el enriquecimiento
diría yo, cuesta. A la postre, también lo defiendo, situarse al frente de un
magazine es, como decía otro gran maestro, JulioCésar Iglesias, en este mismo blog, “un gran salto profesional”.
Javier del Pino se ha esforzado por ofrecer un 'A Vivir...' de alta calidad |
En muy poco tiempo, Javier del
Pino, aunque intuyo que ha heredado algunos compromisos anteriores que no
encajan muy bien en su nuevo concepto de ‘A Vivir que son dos días’, ha demostrado que, a pesar de que en la radio casi
todo está inventado, todavía hay margen de maniobra para la creatividad y la
originalidad en la presentación de los contenidos. Hablar con dos actores que
tienen una obra de teatro en cartel es relativamente fácil, si tiramos de buena
documentación y un poco de oficio. Pero hacerlo en medio de un marco diferente,
incluso aparentemente hostil, como es
un concurso, con preguntas sobre actualidad, un piano al fondo como confidente
cómplice, e incluso un compañero de informativos que sirve de apoyo a los
invitados, con la figura sumada de un locutor, a la usanza de Joaquín Prat en ‘El precio justo’, enriquece enormemente la entrevista y la hace,
decididamente, mucho más atractiva para el oyente.
Se ha abierto un debate dentro de
la propia SER, que ya está analizando resultados de sus cambios de programación,
que califican ‘A vivir que son dos días’
de programa excesivamente elitista, “muy cerrado”, en definitiva, poco comercial, o incluso poco convencional. Es cierto. Estoy seguro de que éste ha
sido, precisamente, el objetivo de Javier, que ha logrado con creces. Lo que
estaba hecho hasta ahora había cumplido su etapa y Javier ha entendido que
había que innovar. La SER no es una radio que deba contentarse con repetir una
misma fórmula hasta la saciedad, sino que debe responder al reto del líder:
seguir trabajando por ofrecer renovada calidad de sus contenidos.
Creo, finalmente, que Javier del
Pino está ofreciendo un magnífico ‘A Vivir que son dos días’, un programa que ha sobrepasado el límite de lo
convencional para aventurarse casi en el campo, comprometido, de la I+D (Investigación más Desarrollo) tan poco
habitual sobre todo en el mundo de la radio. Seguiré atento su magnífica
evolución, divirtiéndome y aprendiendo.
genial programa, lo mejor.
ResponderEliminarMe gusta muchísimo este programa, ha ido a mejor, muy completo, diverido y serio, serio y divertido
ResponderEliminarPUES YO QUIERO QUE VUELVA ISAÍAS !!!!!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarNo sé si es elitista, pero si lo es se agradece infinito.
EliminarMe gusta y mucho.
ResponderEliminarMe gusta muchísimo, Javier del Pino se va encontrando a gusto y se va soltando. La música genial.
ResponderEliminarMagnífico programa y excelente artículo Gorka. Sólo añadiría que la selección musical que hace el equipo de Javier está fuera de lo común en la radio española. Se podría grabar un disco con las canciones elegidas para cada programa.
ResponderEliminarEs lo mejor que se puede oír en la radio, es muy muy grande Javier del Pino
ResponderEliminarEl mejor A Vivir que son dos dias de todos los que ha habido
ResponderEliminarMe gusta mucho, ha mejorado y Javier habla y comenta muy bien
ResponderEliminarEstoy deseando que llegue el fin de semana para escucharle,es el único programa que se puede oir sin que se te ponga el corazón a cien,es muy entretenido,con buena música y menos anuncios.Gracias por poner las canciones en INGLES a ver si de una vez nos ponemos todos a tono que falta nos hace.
ResponderEliminarMe encanta como lo hace y realmente ha renovado mucho el formato, las dosis de humor, la Inteligencia Comunicativa,el buen periodismo, he escuchado ya a muchos profesionale de ese programa y eJavier del Pino creo que lo ha mejorado¡¡¡¡
ResponderEliminaren hora buena ¡¡¡¡:)
Nos gusta mucho...buena música, humor y sobre todo información critica y constructiva.
ResponderEliminarMuy bueno el programa, y Javier, muy bien. Y muy buena música. Me gustaría conocer las canciones que ponéis.
ResponderEliminaralguien sabe como es el titulo de la cancióny cantante de la música en la sección de Javier cansado?. gracias
ResponderEliminarNada mejor que preguntar a quien mejor lo sabe, Juan Aranaz, eficaz realizador del programa. Me dice que es "Creep" en versión de Richard Cheese. Gracias a Juan y gracias a... bueno, me gustaría ponerle un nombre, pero no me lo permite. Gracias en cualquier caso por escribir!
Eliminarpues a mi me gustaria saber el titulo de la cancion que da paso a la pildora de jose marti gomez.......soy de barcelona, y me parece un programa fantastico......gracias......
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