Y tras el EGM, llegó el bochorno

La cocina del EGM enfrenta a SER y Cope en redes sociales

Caer en las trampas del EGM

Hemos asistido, en las últimas horas, tras la publicación de la primera oleada del Estudio General de Medios a un juego al que, hasta ahora, solo conocíamos en el universo de nuestros políticos, a quienes utilizar las mentiras, o las medias verdades, no les produce ningún sonrojo. La Cadena SER ha revalidado su liderazgo en la radio española, y esto viene ocurriendo desde hace más de un cuarto de siglo. Sin duda es un statu quo con el que ya estamos familiarizados, lo tenemos todos asumido, y forma parte, de alguna manera, de la imagen rutinaria, incluso recurrente, del EGM, elaborado trimestralmente por la Asociación para la Investigación de Medios de Comunicación (AIMC). Sea ésta mi primera afirmación. Los datos la avalan.

Carlos Herrera, en selfie junto al periodista Antón Losada, y la codirectora de "Hoy por Hoy" y competidora suya, Pepa Bueno, en un encuentro informal que tuvo lugar en Galicia en 2017 (Fotografía Twitter Carlos Herrera)

Datos que se refieren, no solo al cómputo general de audiencia de la cadena frente a sus competidoras, sino también al prime time de la cadena amarilla, frente a la Cope que, ciertamente, le ha dado un vuelco importante a la encuesta, y nadie, en su razonable juicio, a la vista de los contundentes datos con los que se ha saldado el EGM, puede -ni debe- negar. Me refiero al “Hoy por Hoy”, y a “Herrera en Cope”, programas en liza, y en directo enfrentamiento en el estudio que orienta la inversión publicitaria. El cuadro es claro:

DATOS	AUDIENCIA GENERAL	“HOY POR HOY”	“HERRERA EN COPE”	DIFERENCIA
CADENA SER	3.987.000	2.640.000		-120.000
CADENA COPE	3.303.000		2.492.000	+ 466.000
Diferencia SER-Cope	684.000			148.000

Fuente: EGM, 1ª ola 2019

Por tanto, la Cadena SER sigue siendo líder. La pregunta, a la vista de lo ocurrido, es ¿por cuánto tiempo más? Pero esto se averiguará el próximo 26 de junio, día de publicación de la segunda oleada del EGM de este año. Hasta entonces, los datos que reinan en el firmamento radiofónico español son los de esta primera ola.

El cartel de Cope que creaba la confusión,
señalando a Carlos Herrera como líder

Lo que en un primer momento parecía ‘fairplay’, cuando la Cadena SER publicó un video bajo el título de “Las cuentas claras”, en el que se leía la frase: “pero lo importante no son las diferencias, es lo que la radio suma”, en alusión al aumento -genérico, sin adscripciones a marcas concretas- de la audiencia de la radio en España, se transformó luego en una batalla abierta en redes sociales con reproches de uno y otro lado y, por supuesto, la participación de los seguidores, y bastantes hooligans (las redes es lo que tienen…) en la trifulca: que si no sabéis perder, que si hemos ganado, que si somos líderes, que…

Hay un dato esencial para entender el aumento de las cifras, y es la actualización que ha hecho la AIMC del universo de la encuesta, situado a partir de 2019 en 40.288.000 (de lunes a viernes), o sea, que se suman 437.000 nuevas personas, potencialmente nuevos oyentes de radio, y que se notan en las cifras. Por eso es aún más grave que en esta nueva situación, claramente positiva para la radio, la Cadena SER haya perdido 152.000 oyentes en el neto, y nada menos que 248.000 oyentes en el acumulado. Pero, insisto, siguen siendo líderes. En Gran Vía, sin embargo, eran conscientes de esta victoria amenazada por la Copetencia, y no utilizaron los fuegos artificiales habituales para comunicar sus cifras en su web, sino que eligieron una estrategia de comunicación de “baja intensidad”. No era para menos.

Ante esta situación, con una actualización del universo del EGM tan significativo, que no se producía desde la primera ola de 2018 (pero en aquella ocasión solo se incorporaron 68.000 potencialmente nuevos oyentes de radio), lo que hay que observar son los porcentajes de penetración, y apenas han variado en dos décimas. Ha pasado en esta ola del 59,7 por ciento, al 59,9 por ciento, y continúa por tanto por debajo, a distancia, del 64,9 por ciento, el pico más alto logrado en las últimas veinte encuestas, desde 2012. No es para echar las campanas al vuelo, pero no está nada mal que la radio recupere seguidores.

Acabamos de vivir un momento HISTÓRICO en @COPE 📻 @HerreraenCOPE es líder absoluto en las mañanas radiofónicas. Qué orgullo formar parte de este equipo 🥳 Eres un grande, jefe @carlosherreracr 😍 pic.twitter.com/kne5Yh1nm3
— Laura Rubio (@lrubio_) 10 de abril de 2019

A las ocho de la mañana, en “Herrera en Cope”, Pilar Cisneros fue la encargada de comunicar en antena los resultados de Cope, y ahí se armó: Carlos Herrera, “eres el comunicador líder de la radio española, desde las 8 de la mañana a la 1 de la tarde”, afirmó. Y llegó una tarta al estudio, que todos recibieron con vítores y alegría, incluidos directivos de la cadena de los obispos. La alegría se desataba. Faltaban los descorches de champán. Hasta el propio Herrera, un agnóstico confeso del EGM no tenía más remedio que dar pábulo al EGM, ante la contundencia de las cifras que le concedía en esta oleada trimestral. Al oyente lo que le quedaba en la cabeza, oído el comentario de Pilar Cisneros, era que “Herrera es líder”. Y no, no es cierto. Es una media verdad, que demuestra las prisas de la Cope por vencer a su enemigo, y hasta humillarle. Y, la verdad, no era necesario, porque los datos hablan por sí solos, y no era necesario buscar triquiñuelas estadísticas para confundir deliberadamente al oyente.

Este fue el cuadro que publicó Cope en su web para explicar de dónde salía su afirmación:

El cuadro publicado por Cope en su web, a raíz de los datos de la última ola del EGM

Los números son ciertos, pero forman parte de la cocina del EGM, que, está claro, la radio parece haber heredado de los políticos, verdaderos expertos en emplatar los datos de las elecciones de la mejor forma posible. Esta pelea no da una buena imagen del sector. En el caso de la SER, hasta su director general, Daniel Gavela, entró en la pelea, desde Twitter.

Cómo me gusta ver tan felices a mis amigos por ser segundos. La Ser felicitó en antena a sus competidores por sus buenos resultados. Sabemos ganar (sin necesidad de doping horario). Liderazgo obliga.
— Daniel Gavela (@gavela_daniel) 11 de abril de 2019

Por respeto a los datos, vamos con este cuadro, que representa el resultado atribuido por el EGM, hora a hora, de ambos programas, “Hoy por Hoy”, codirigido por Pepa Bueno (de 6:00 a 10:00 horas) y Toni Garrido (de 10:00 a 12:30 horas), y “Herrera en Cope”, con un único comunicador, circunstancia, no vamos a negarla, que beneficia a Herrera a efectos del título de “comunicador líder” que, como diría el desaparecido Peret, “no sirve de ná” a efectos oficiales.

HORARIO	CADENA SER	CADENA COPE	DIFERENCIA SER	DIFERENCIA COPE
6:00-7:00	498.000	477.000	+16.000	+45.000
7:00-8:00	1.103.000	1.052.000	+37.000	+177.000
8:00-9:00	1.316.000	1.316.000	-61.000	+207.000
9:00-10:00	1.131.000	1.145.000	-45.000	+199.000
10:00-11:00	806.000	947.000	-80.000	+258.000
11:00-12:00	576.000	690.000	-126.000	+162.000
12:00-13:00	528.000	516.000	-19.000	+101.000
13:00-14:00	0,00	360.000		+34.000
TOTALES	2.640.000	2.492.000

Fuente: 1ª ola EGM 2019, de lunes a viernes

No creo necesario apuntar nada más de lo que ya el lector percibe por sí mismo, al observar los números rojos que arroja el ejercicio de la SER en este trimestre. Ciertamente la SER tiene un problema, grave, con la situación que se le ha planteado desde Cope. Y la amenaza tiene un nombre propio, o dos, por personalizar las amenazas: Carlos Herrera y Paco González, director de “Tiempo de Juego”, que ha superado los sábados a “Carrusel Deportivo” (Cadena SER) y ha empatado, prácticamente, los domingos.

La reacción de la SER ante
la confusión generada por Cope

Sí me gustaría hacer una aclaración con respecto a la afirmación del director general de Prisa Radio España, Daniel Gavela, al afirmar que “sabemos ganar (sin necesidad de doping horario)”. El EGM nos ha acostumbrado a un deporte innato a la encuesta: sumar horas, para sumar oyentes; lo que se conoce como audiencia acumulada. Un deporte, por cierto, que, históricamente, inició la Cadena SER, con el “Hoy por Hoy” de Iñaki Gabilondo, para tratar de superar al (invencible) “Protagonistas”, de Luis del Olmo. Hasta que lo logró. Fue una idea de su entonces director de márketing, ya desaparecido, y al que venero, Claudio Martínez. El propio Carlos Herrera recordaba los inicios, con su peculiar gracia, en este podcast que grabé en 2017: “Realmente, la radio-radio comenzaba a las 9:00 de la mañana, cuando Luis decía “¡Buenos días España!”. Pero antes estaban los ‘Matinales’, el de la SER, que era magnífico, y ‘las Españas’ (a las 7, y a las 8), de Radio Nacional. A las 9:00 empezaba, entonces, lo que se consideraba ‘la leña’. Pero, por culpa de estos dos cabrones (refiriéndose cariñosamente a Luis del Olmo e Iñaki Gabilondo, también presentes en el acto), la cosa empezó cada vez antes, y más pronto, y ahora empezamos a las 6:00 de la mañana, y a alguno le parece tarde”. Para algunos este período, situado en los ochenta, les sonará a prehistórico, pero ahí nació la ‘pelea del EGM’ por el acumulado, que todavía continuamos arrastrando. Y que es la trampa del EGM, que no mide programas, sino horarios.

Otro de los carteles de la discordia

Así, “Herrera en Cope”, añade una hora más a su mañana, para sumar oyentes, y alcanzar al adversario antes. En su día ya comenté lo que me parece un auténtico fraude a los oyentes: convertir la última hora del programa, de 13:00 a 14:00 horas, suprimiendo el tiempo local de las emisoras que ahora va a través de la nueva red Cope+ (nombre que luego la SER copió sin ningún rubor al reciclar los postes de Máxima FM), en un refrito de lo emitido, en ausencia del propio Herrera, que abandona la antena. Pero les funciona, como se ha visto. Es la misma estrategia que utiliza “Tiempo de Juego” que va de 13:00 horas a 1 de la madrugada, frente a su directo competidor “Carrusel Deportivo”, que va de 15:00 horas a 1:30 de la madrugada, los sábados, y ¡de 12:00 del mediodía! a 1:30 de la madrugada, frente al “Carrusel”, los domingos, que va de 15:00 horas a 1:30 horas. Como vemos, el deporte se mantiene. Pero, si recurrimos al histórico, y como bien conocen la frase bíblica en la cadena de los obispos, “el que esté libre de culpa, que tire la primera piedra”.

Nunca dejaré de reconocer la calidad del equipo de la Cope, por eso tiene tanto mérito ganarles. Si un día ganan, https://t.co/W2MYwQrxM7 una pelea muy profesional y muy estimulante. Creo ciegamente en que con una competencia fuerte la radio es mejor.
— Daniel Gavela (@gavela_daniel) 11 de abril de 2019

En definitiva, lo que hemos presenciado estos días posteriores a la publicación del EGM ha sido un espectáculo bochornoso, por ambas partes en pugna: la Cope, por querer ir demasiado deprisa, y la SER por entrar al trapo, con malas artes, de un comportamiento que desautoriza a quien lo ejerce. Los datos, irrefutables, sitúan a cada uno en el lugar que le corresponde: la cadena de Prisa sigue siendo la líder, pero la Cope ha dado un paso histórico, de gigante, hacia el liderazgo. Un paso que, no lo olvidemos, representa Carlos Herrera, cuyo contrato expira en junio de 2021. Evidentemente, si vislumbra la posibilidad de alcanzar el liderazgo, es posible que continúe. Pero todas las fichas están puestas en un solo comunicador, el “líder”, como le llaman hace años sus seguidores, especialmente ese grupo de oyentes, tan cohesionado, y fiel, como son los “fósforos”, pero no porque lo sea, tal vez de facto, pero no de iure.

Cada cual en su sitio, de momento, a la espera de que en junio se produzca el “SERpaso” o, por el contrario, descienda el número de oyentes, la SER se recupere y Cope los pierda. Ya se sabe que cuando hay subidón, el EGM se autocorrige en la siguiente ola. Pero no adelantemos acontecimientos. Todo llegará en su momento. Lo que es evidente, hoy por hoy, es que los despachos en Gran Vía registran una temperatura volcánica ante los resultados de esta ola, y que en Alfonso XI tienen la meta del liderazgo más cerca, alcanzable, como nunca la han tenido. Se merecen la alegría. La fidelización de sus oyentes les ha proporcionado el subidón.