Las 'estrellas' en la sombra (y II)
https://www.gorkazumeta.com/2012/01/las-estrellas-en-la-sombra-y-ii.html
Continúa...
Los clásicos…
Aunque no tuve oportunidad de trabajar con él, sí que le conocí. Era el técnico que se ocupaba de los efectos de sonido, absolutamente artesanales, de las radionovelas y radioteatros más clásicos de Radio Madrid, Esteban Cavadas. El famosísimo armario de los efectos se guardaba celosamente en el estudio de grabaciones de programas. Las nuevas generaciones, que se iban incorporando, preguntaban por el origen de aquel extraño mueble desvenzijado que ocupaba parte del estudio, sin conocer que Esteban hacía surgir de él, de sus tripas, increíbles sonidos repletos ‘de verdad’.
‘El cine de Lo Que yo Te Diga’
Los tiempos de las radionovelas y 'Teatros del Aire' en Radio Madrid reunían familias enteras en torno al aparato de radio |
En ese mismo estudio se grababa todas las semanas el mejor programa de la cadena SER, desde el punto de vista no sólo de su impecable realización, sino también de su minucioso contenido: ‘El Cine de Lo Que Yo Te Diga’, que dirigía Carlos López Tapia, al que siempre respeté y admiré. Cuando me invitaban a interpretar a personajes o a doblar (traducir) cortes, acudía como un niño con zapatos nuevos, de lo bien que me lo pasaba. El equipo ante el micro estaba formado por Juan Zavala, Elio Castro, Antonio Martínez y María Guerra. Por detrás, Marisa y Ana. En sus primeros tiempos lo grababa Jesús Sánchez, un técnico de primera al que daba gusto verle trabajar, si no fuera porque el volumen al que lo hacía lograba que tus tímpanos bailaran el Kasachov. Entonces no existían las virguerías digitales que ahora escupen los ordenadores con demasiada, y a veces gratuita, frecuencia. Jesús sabía dónde entraban las músicas, dónde se fundían con la pieza, y cómo resolvían (desaparecían). Con precisión. Sin titubeos. Con una pericia natural admirable. Lástima que desapareciera de la parrilla. Pero éste es otro tema.
Nunca entendí cómo podía haber compañeros míos que no se dieran cuenta por sí mismos del papel fundamental, por lo menos de co-protagonistas, que desempeñaban los técnicos. Aquí, por supuesto, no voy a dar nombres. Pero sí daré el de un técnico, de la vieja escuela, con el que hablé mucho de radio –y aprendí, cómo no-: Luis Pinar. Todo un caballero español de la técnica, al que la radio enamoró y cautivó. Daba gusto trabajar con esta gente porque sentían profundamente lo que hacían. Y lo contagiaban. Había que estar atento, también es cierto, a ‘dejarse’ contagiar. Pero a mí siempre me gustó ‘pegarme’ a ellos, para rodearme de oficio y de sabiduría.
Nunca entendí cómo podía haber compañeros míos que no se dieran cuenta por sí mismos del papel fundamental, por lo menos de co-protagonistas, que desempeñaban los técnicos. Aquí, por supuesto, no voy a dar nombres. Pero sí daré el de un técnico, de la vieja escuela, con el que hablé mucho de radio –y aprendí, cómo no-: Luis Pinar. Todo un caballero español de la técnica, al que la radio enamoró y cautivó. Daba gusto trabajar con esta gente porque sentían profundamente lo que hacían. Y lo contagiaban. Había que estar atento, también es cierto, a ‘dejarse’ contagiar. Pero a mí siempre me gustó ‘pegarme’ a ellos, para rodearme de oficio y de sabiduría.
Detalle de una de las modernas mesas de mezcla digitales de la Cadena SER (Foto Gorka Zumeta) |
Siempre era un placer también acercarse a los estudios de producción de la SER, donde trabajaban los técnicos más creativos de la radio. Mención especial para Goñi, incorporado desde la extinta Antena 3 Radio, cuyos comienzos compartió en su Navarra natal, con Joaquín Luqui, un tipo genial. Se marchó de la SER a la competencia y le perdí la pista, pero seguro que seguirá siendo igual de iconoclasta. Juan Antonio Merayo es el técnico más antiguo de este departamento. Un auténtico fuera de serie en la realización. Tuve la suerte de trabajar con él en varios programas especiales, incluso algún dramático que otro, y percibí ese aliento exclusivo de los grandes profesionales del sonido, siempre con la chaqueta de la humildad puesta encima y con un humor a prueba de bombas. A Juan Antonio le acompañan Jesús Sánchez, el de ‘El Cine’, que recaló aquí hace algunos años, Enrique Hernández y Roberto Cuadrado. Hoy, algunos de ellos, están más volcados en la producción de video, destinado a la web de la SER.
La experiencia en Punto Radio
Técnico realizando un programa en directo en ABC Punto Radio |
Ellos son, los técnicos, los que hacen posible, en última instancia, que la voz de las grandes estrellas de la radio, nos llegue nítida y con todos sus matices, como una pieza esencial de un aparente totum revolutum de elementos radiofónicos ensamblados más o menos coherentemente. Pero, cuidado, no hay que ser amigo de ellos por puro interés egoísta, sino por devoción, porque su trabajo, muy lucido pero anónimo a veces, es puro arte radiofónico. ¡Va por vosotros!
Bueno, a José María Goñi le conocí en las pellas de matemáticas a mis quince años (1973) en el estudio 3 de Radio Madrid, 9ª planta de Gran Vía 32, grabando cuñas y programas, con Remedios de la Peña, a Joaquín Prat, a José Domingo Castaño o a Juan Luis Vives. Eran los tiempos de la continuidad en la 2ª planta del estudio 6 y del 5 con Angel Carbajo, Rafael Rincón, Joaquín Serrano, Jesús Alarcos, o de Francisco José Tomillo.
ResponderEliminarJ.M. Goñi preparó a muchos de los locutores de 40 Principales, y ya en Antena 3 de Radio fue mi jefe de emisiones en Radio 80 Serie Oro en 1992. Según mis noticias, acabó en la COPE. No me extrañaría que ahora estuviese también ERE-jubilado.
Un abrazo, Gorka.
Pedro José Ruiz Mayordomo.
Madrid.